EPÍSTOLA DOLIENTE AL
GOBERNADOR CARLOS MATA FIGUEROA
Le confieso, gobernador, que cuando usted me extendió la
mano para saludarme al momento de
entregar en la Receptoría
de Correspondencia de la Dirección de Recursos
Humanos del despacho que usted dirige los documentos para solicitar la
jubilación que legalmente me corresponde, dado que serví en la Administración
Pública más de 35 años, la impresión que su persona provocó
en mí fue muy positiva y creí ingenuamente que
usted procedería, por ser un acto de justicia, a atender y resolver la
situación que no pudo o no quiso resolver su antecesor.
Era el 7 de
enero.
Había
acudido a la Dirección
de Recursos Humanos a reactivar la solicitud de jubilación introducida ante ese
despacho, al conocerse los resultados de las elecciones del 16 de diciembre del
pasado año, que usted ganó en buena lid y no por obra y gracia de Pdvsa y otros
organismos oficiales como alegaría el gobernador saliente.
Pues bien,
fui atendido muy amablemente tanto por la directora de ese despacho, su
asistente y una de las abogadas cuyo nombre desconozco, quien luego de decirme
que era mi derecho solicitar la jubilación, en la segunda entrevista que tuve
con ella, ya que no me llamó a mi teléfono como había prometido, me informó que
mi solicitud no era pertinente porque el cargo tenía carácter NC, es decir, de
libre nombramiento y remoción.
Me explicó
también que quien debió haberme jubilado era el gobernador saliente, pues era
mi patrón en diciembre, y no usted.
Añadió,
ante una pregunta mía, que ni en la Corte Celestial que recurriera para denunciar lo
que considero una violación de mis derechos, fallaría a mi favor.
Le respondí
que acudiría ante todas las instancias legales a solicitar que su despacho
proceda a jubilarme.
Algunas preguntas,
señor gobernador: ¿Por qué al momento de usted asumir la Gobernación , el 20 de diciembre del pasado año,
no procedió a removerme para obviar la responsabilidad de jubilarme? ¿Por qué
se me pagó los meses de enero y febrero, siendo que se me había removido y ya
había una colega en el cargo de Coordinador de Redacción? ¿Por qué se me pagó
la cesta-ticket de enero y febrero sino dependía ya de la Gobernación ?
Si se hizo
esos pagos era porque no se me había removido, y por lo tanto a usted como mi
patrón le correspondía jubilarme, tanto por los más de 35 años de servicio en
distintas dependencias de la Administración Pública , como por los 78 años de
edad que tengo, cumplidos durante los trámites para la jubilación que me fue
negada.
Señor
gobernador, le repito que usted era mi patrón hasta el 28 de febrero, cuando
dejé de salir en nómina, y por lo tanto antes de procederse a mi remoción debió
decretar la jubilación que me corresponde.
Sé muy bien
que quien tiene el oro impone las reglas. Sé también que quien detenta el poder
atropella al débil.
No tengo
recursos económicos para recurrir ante un tribunal a solicitar que lo obligue a
reparar la injusticia que ha cometido contra una persona a quien al usted
extenderle la mano para saludarlo, sin conocerlo, le causó una buena impresión,
distinta a la que tenía en el marco de la campaña electoral que lo llevó al
triunfo.
Reciba los
más cordiales saludos de un periodista que
ya al final casi de su paso por esta vida, se siente atropellado por el
fuerte, usted señor gobernador. No le guardo ningún rencor porque ese
sentimiento no encuentra acomodo en mi corazón, tanto así que desde el blog Noticias de Nueva Esparta publico todas
las notas de prensa de su despacho, de su partido y de su esposa, también como
yo periodista. Éxitos.
Lic.
Periodismo Eladio Rodulfo González (CNP-2372, Cédula de Identidad 1713250)
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