Desorden en un supermercado de San Cristóbal por compradores que exigían artículos regulados

LA NACIÓN, 4 febrero, 2016

Compradores ansiosos esperaban impacientemente que sacaran productos regulados, a pesar de que representantes del negocio les informaron que no disponían de ninguno de esos artículos. (Foto/Jorge Castellanos)

Un conato de desorden ocurrió en un supermercado de la parte alta de San Cristóbal este miércoles, cuando aproximadamente a las 10 de la mañana, un grupo de compradores empezó a exigir a los encargados que sacaran productos regulados, a pesar de que les informaron que se había agotado la existencia.

“Habían sacado los productos (regulados), pero como se acabaron, la gente comenzó a gritar ‘¡queremos jabón!’; después un supuesto vigilante de supermercado presuntamente aseguró que había mercancía, pero por políticas de la empresa no podían sacarla hasta la tarde”, relató uno de los clientes molestos por no hallar lo que buscaba.

Esta confusión enardeció a un grupo de consumidores, muchos de los cuales intentaban soliviantar al resto de quienes habían hecho cola para entrar, pues aseguraban que había productos regulados.

Agentes de la Policía Nacional Bolivariana, Politáchira y Guardia Nacional acudieron al sitio, a fin de verificar las denuncias de los compradores y mantener el orden público.

A las 11 de la mañana se intentó restablecer el acceso al establecimiento solo para quienes no buscaban productos regulados, ya que no disponían para ofertar, pero esta medida no duró. Previamente, parte del personal del supermercado junto con efectivos militares inspeccionaron los depósitos y constataron que, efectivamente, no conservaban mercancía regulada.

La gerencia decidió cerrar el supermercado para evitar actos de violencia, pero un grupo de los compradores había logrado entrar y se negó a abandonar el sitio a la espera de que se dispusieran los artículos que supuestamente llegarían a mediados de la tarde. Muchos aseguraban que esperaban un cargamento de leche en polvo, pero el rumor también resultó falso.

Adentro, trabajadores del establecimiento pidieron a este grupo de clientes que los dejaran laborar. Aunque según testigos, en principio llegó a haber unas 100 personas, con el paso de las horas el grupo se fue reduciendo.

La mediación de funcionarios de la Defensoría del Pueblo sirvió para que estas personas desistieran de su actitud y, a las 5 de la tarde, el local reabrió al público con total normalidad, luego se siete horas de esta situación irregular. La custodia preventiva de efectivos de la GNB se mantuvo hasta ya entrada la noche. (Gabriel Vivas/ DP)