La Asunción, julio 25 (Prensa-Gene).- Un Gobierno serio, responsable, respetuoso y honesto no tendría de ministro a quien, para esconder su enorme, estrepitoso, continuado y flagrante fracaso recurre al insulto contra sus adversarios ideológicos, cuando lo correcto, saludable, educado y conveniente para la convivencia nacional es manejarse con la sindéresis, que es razonamiento, y con el diálogo que es entendimiento. Pero como el señor Jorge Giordani aun vive en el Paleolítico en cuanto al manejo de los asuntos económicos y en la barbarie por el empleo de un lenguaje escatológico, el Gobierno marcha mal, muy mal, y el pueblo sufre a diario los resultados de una política económica incapaz, por ejemplo, de disminuir la inflación, la más alta en toda América Latina y entre las primeras en todo el mundo.
-Su actitud resulta intolerable y merece el repudio colectivo porque no puede este ministro asumir esta clase de conducta, que lo coloca tal cual es, un equivocado funcionario, un ignorante en política y un grosero personaje que poco ha hecho en sentido favorable para el país y sí mucho daño a los venezolanos. Mantenido de la democracia, que ahora tanto repudia, como converso que él es, no puede ni está capacitado para regir los destinos de nuestra economía, que lo ha demostrado con tanto error cometido; menos puede asumir el papel de rector moral cuando, por su reiterado irrespeto, su conducta como funcionario público no es precisamente la más adecuada.
Añadió Rodríguez Avila que “no puede el señor ministro calificar de “escoria” a los que estamos de verdad dirigiendo los destinos de nuestros pueblos, trabajando con probada eficacia y administrando con honradez, sujetos a cualquier clase de investigaciones, los recursos que recibimos de la tesorería nacional. Miente, de manera descarada, cuando nos acusa de ser “secuestradores del poder” porque bien lo saben nuestros pueblos, lo que nosotros hacemos es maravillas con los siempre tardíos recursos que el Gobierno centralista, y porque Giordiani así lo recomienda, nos envía cada vez más escasos”.
-Llamarnos “escoria” evidencia, igualmente, hasta dónde ha descendido la educación, la consideración y la moral en figuras como la de Giordani, llamado a dar siempre buen ejemplo no sólo por su edad y profesión sino porque resulta el tercer hombre del Gobierno, precisamente el que por ser el cerebro de la economía comunista que se nos quiere imponer, debiera ser quien mayor cúmulo de ejemplos positivos diese. Un país no puede estar dirigido en su economía al menos por esta clase de señorones que, en tiempos de la democracia, la alababan para expoliarla y, ahora, bajo un régimen comunista, aprovechándose de tener todo el poder, utilizan la mentira y el insulto para atacar al adversario.
Dijo el gobernador de Margarita, Coche y Cubagua que “nada positivo, entonces, estaría aportando el señor ministro Giordiani al buen entendimiento que tanto requiere y dice necesitar el señor presidente para que triunfe su revolución. Flaco servicio, mejor dicho, el que este funcionario aporta al intento de comunizar a Venezuela pues viéndolo actuar de este modo, y escuchándole proferir tanta ofensa, lo menos que puede hacer el pueblo es fortalecer mucho más su deseo de un pronto cambio de Gobierno”.
Fuente: Boletín de Prensa de la Gobernación.
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