“Le importa poco el país”
Para la psicóloga social, filósofa y escritora, Colette Capriles, el presidente Maduro se comporta como si la situación del país no fuera grave. La profesora de Filosofía Política en la USB espera que, ante esta realidad, la oposición sea más combativa y tome más en serio los errores del gobierno
TALCUAL, ESPERANZA MÁRQUEZ, 25-01-2015.
Para la psicóloga social, filósofa y escritora, Colette Capriles, el presidente Maduro se comporta como si la situación del país no fuera grave. La profesora de Filosofía Política en la USB espera que, ante esta realidad, la oposición sea más combativa y tome más en serio los errores del gobierno
–¿Qué conclusiones sacó de la Memoria y Cuenta del presidente Maduro?
–La grave circunstancia por la que pasa el país no fue considerada y eso está orientado políticamente a decir, a afirmar, que el gobierno persiste en su política general. El objetivo es afirmar que no hay cambio de política general dentro del gobierno y, específicamente, dentro de la política económica y que el país sigue idéntico. No hay cambio ni progreso ni voluntad de abordar una situación que para el gobierno pareciera que no es tan grave como sí luce grave para los consumidores y los ciudadanos. El gobierno no se comporta como que la situación fuera grave.
–La grave circunstancia por la que pasa el país no fue considerada y eso está orientado políticamente a decir, a afirmar, que el gobierno persiste en su política general. El objetivo es afirmar que no hay cambio de política general dentro del gobierno y, específicamente, dentro de la política económica y que el país sigue idéntico. No hay cambio ni progreso ni voluntad de abordar una situación que para el gobierno pareciera que no es tan grave como sí luce grave para los consumidores y los ciudadanos. El gobierno no se comporta como que la situación fuera grave.
–¿A qué atribuyó Maduro el mal estado de la economía?
–A la teoría de la conspiración. Pero los remedios que se proponen no son proporcionales al grado de enfermedad que padece. Entonces, o no lo perciben correctamente o requieren que el país siga enfermo. Los medios que tiene a disposición son demasiado limitados porque están constreñidos por dos cosas: por un lado lo ideológico, porque tienen dificultades para imaginar una economía de otro tipo; lo otro son los grupos de poder que están asociados a un esquema económico del cual extraen toda la renta y se apropian de ella y ese vampirismo de la clase rentista no cesa, no suelta al enfermo, no cede ni ante la miseria de la gente. Esas son dos limitantes muy grandes, una de orden simbólico, ideológico y otra de orden absolutamente material y concreta y que está asociada a los resortes del Estado, al monopolio de la fuerza, a los militares. Es como estar entre la espada y la pared, y el margen de maniobra es muy pequeño.
–A la teoría de la conspiración. Pero los remedios que se proponen no son proporcionales al grado de enfermedad que padece. Entonces, o no lo perciben correctamente o requieren que el país siga enfermo. Los medios que tiene a disposición son demasiado limitados porque están constreñidos por dos cosas: por un lado lo ideológico, porque tienen dificultades para imaginar una economía de otro tipo; lo otro son los grupos de poder que están asociados a un esquema económico del cual extraen toda la renta y se apropian de ella y ese vampirismo de la clase rentista no cesa, no suelta al enfermo, no cede ni ante la miseria de la gente. Esas son dos limitantes muy grandes, una de orden simbólico, ideológico y otra de orden absolutamente material y concreta y que está asociada a los resortes del Estado, al monopolio de la fuerza, a los militares. Es como estar entre la espada y la pared, y el margen de maniobra es muy pequeño.
–¿Qué debíamos esperar de Maduro?
–Si llegó hasta allí con el aval de Chávez, gana unas elecciones de la manera que sea, no tiene ninguna restricción constitucional ni moral para imponer su criterio como presidente, a la manera personalista como se ha ejercido el poder durante todo este tiempo. Sin embargo, no se atrevió y lo que ha ido es cambiando muy lentamente; ha puesto a su gente; ha salido de otros; ha pactado con ciertos capos del chavismo; pero no tiene la autoridad suficiente como para ponerse por encima. Sentí con el mensaje: yo soy un vocero de esta alianza, de este poder cívico militar que gobierna, y esto es lo que menos perjudica. Me pareció humanamente horrible, moralmente muy bajo, llegar a lo más bajo de la política que es la del clan que no le importa destruir y depredar la economía de un país. Maduro es la cara visible de una sociedad de castas, una nueva burguesía, una nueva clase dominante que no está dispuesta a rebajar su nivel de influencias sobre la economía.
–Si llegó hasta allí con el aval de Chávez, gana unas elecciones de la manera que sea, no tiene ninguna restricción constitucional ni moral para imponer su criterio como presidente, a la manera personalista como se ha ejercido el poder durante todo este tiempo. Sin embargo, no se atrevió y lo que ha ido es cambiando muy lentamente; ha puesto a su gente; ha salido de otros; ha pactado con ciertos capos del chavismo; pero no tiene la autoridad suficiente como para ponerse por encima. Sentí con el mensaje: yo soy un vocero de esta alianza, de este poder cívico militar que gobierna, y esto es lo que menos perjudica. Me pareció humanamente horrible, moralmente muy bajo, llegar a lo más bajo de la política que es la del clan que no le importa destruir y depredar la economía de un país. Maduro es la cara visible de una sociedad de castas, una nueva burguesía, una nueva clase dominante que no está dispuesta a rebajar su nivel de influencias sobre la economía.
–¿Hubo algo que resaltara en su discurso?
–Focalizar la acción del Estado, lo cual indica lo mal que ha gobernado durante el último año. Aquí queda implícito que el alto gobierno, el gabinete ejecutivo, no controla los procesos institucionales del Estado. Es decir, en lo que pasa en el gabinete y lo que ocurre en la base del aparato del Estado en el plano de la ejecución hay un gran misterio, no tienen consistencia, eficacia burocrática, lo que tienen es la pura dominación. Es un Estado gigantesco absolutamente incontrolable y que favorece el enquistamiento de las castas. Pero focalizarse en lo que les interesa, que es el objetivo electoral, ya no tienen cómo hacerlo y no tienen el dinero que permitía la ineficiencia.
–Focalizar la acción del Estado, lo cual indica lo mal que ha gobernado durante el último año. Aquí queda implícito que el alto gobierno, el gabinete ejecutivo, no controla los procesos institucionales del Estado. Es decir, en lo que pasa en el gabinete y lo que ocurre en la base del aparato del Estado en el plano de la ejecución hay un gran misterio, no tienen consistencia, eficacia burocrática, lo que tienen es la pura dominación. Es un Estado gigantesco absolutamente incontrolable y que favorece el enquistamiento de las castas. Pero focalizarse en lo que les interesa, que es el objetivo electoral, ya no tienen cómo hacerlo y no tienen el dinero que permitía la ineficiencia.
–Y el Dios proveerá…
–No hubo ninguna mención de cómo aumentar los ingresos y ahí es donde vamos al tema de "Dios proveerá". Yo tengo la sensación de que pueden estar esperando algunos préstamos, algunas negociaciones que se hicieron en la gira que no pueden anunciar en este momento hasta que se produzcan efectivamente y que de alguna manera puedan aliviar este déficit terrible de los ingresos y, además, permitir que todo su plan electoral se cumpla. El "Dios proveerá" es como la esperanza de que algo puede pasar.
–No hubo ninguna mención de cómo aumentar los ingresos y ahí es donde vamos al tema de "Dios proveerá". Yo tengo la sensación de que pueden estar esperando algunos préstamos, algunas negociaciones que se hicieron en la gira que no pueden anunciar en este momento hasta que se produzcan efectivamente y que de alguna manera puedan aliviar este déficit terrible de los ingresos y, además, permitir que todo su plan electoral se cumpla. El "Dios proveerá" es como la esperanza de que algo puede pasar.
–¿Qué va a pasar con el país?
–Si seguimos la premisa de que todo va a seguir igual, el mensaje es que está apoyado, que representa un grupo que está firmemente en el poder, no se sienten amenazados por la situación, esto sigue igual. Pero existe la posibilidad de que haya reacciones de la sociedad, políticas o no políticas. Estoy sintiendo que hay una activación política y vamos a ir viendo cómo los partidos y los líderes comienzan a activarse.
–Si seguimos la premisa de que todo va a seguir igual, el mensaje es que está apoyado, que representa un grupo que está firmemente en el poder, no se sienten amenazados por la situación, esto sigue igual. Pero existe la posibilidad de que haya reacciones de la sociedad, políticas o no políticas. Estoy sintiendo que hay una activación política y vamos a ir viendo cómo los partidos y los líderes comienzan a activarse.
–¿Vislumbra una rebelión popular?
–Hay una aversión cada vez mayor de la sociedad a la violencia porque la padece todos los días. Entonces, la idea de levantamientos populares, insurrecciones, golpe de Estado, militares disparando, colectivos desatados, rebeldía saqueadora, todo ese imaginario de rebelión popular está totalmente fuera del cuadro en este momento. La gente no lo quiere. Esto también se manifestó en el discurso no solamente por este sentimiento de la gente sino porque el Estado tiene cómo detenerlo. Aunque la indignación no se vea, no quiere decir que no exista.
–Hay una aversión cada vez mayor de la sociedad a la violencia porque la padece todos los días. Entonces, la idea de levantamientos populares, insurrecciones, golpe de Estado, militares disparando, colectivos desatados, rebeldía saqueadora, todo ese imaginario de rebelión popular está totalmente fuera del cuadro en este momento. La gente no lo quiere. Esto también se manifestó en el discurso no solamente por este sentimiento de la gente sino porque el Estado tiene cómo detenerlo. Aunque la indignación no se vea, no quiere decir que no exista.
–¿Cuál debe ser el papel de las fuerzas opositoras?
–Deberían tomarse estas próximas semanas de reacomodo y diseñar su plan, y que ese programa esté apoyado políticamente y demuestre que hay un consenso mínimo en aspectos muy específicos de la gestión pública. Eso contribuiría a construir más confianza, que es lo que le falta, y así comenzar a movilizarse. La oposición tiene que ser mucho más combativa en lo político, pero más concreta, tomarse en serio al gobierno y presentar un proyecto alternativo porque sí hay una manera de ser república que no es la del chavismo.
–Deberían tomarse estas próximas semanas de reacomodo y diseñar su plan, y que ese programa esté apoyado políticamente y demuestre que hay un consenso mínimo en aspectos muy específicos de la gestión pública. Eso contribuiría a construir más confianza, que es lo que le falta, y así comenzar a movilizarse. La oposición tiene que ser mucho más combativa en lo político, pero más concreta, tomarse en serio al gobierno y presentar un proyecto alternativo porque sí hay una manera de ser república que no es la del chavismo.
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