Gómez: “Le quitaremos a Maduro las leyes habilitantes para derogar medidas que desangran la economía”

Publicado el Jueves 5 noviembre, 2015. LA NACIÓN 0 Commentarios

Inconfundible por su famoso slogan de campaña “la hija de la frontera”. Laidy Gómez, es abogada de la República y militante de AD. Electa en primarias como candidata de la unidad a la Asamblea Nacional tras superar en votos al parlamentario e historiador Walter Márquez.

Es inseparable -como muchos en esta era tecnológica- de su tablet y sus dos celulares. No obstante, los dejó a un lado por más de cuarenta minutos para platicar con la periodista. Defiende a cabalidad la dignidad del pueblo fronterizo y refuta que “no se puede generalizar al llamar  “por presunción” de delincuente, bachaquero y contrabandista a todo el que habite en San Antonio, Ureña, Junín los Capacho y Delicias”.

Su principal característica es la locuacidad. Se disputa con Néstor Sayago, su más cercano contendor del oficialismo, el primer lugar del candidato que más ha hablado en la entrevista ofrecida a La Nación. Es analítica y firme en sus convicciones. Aboga por la recuperación de la calidad de vida de los venezolanos, “incluidos los revolucionarios”.

Expresa que “los ciudadanos no estamos pidiendo vivir con grandes riquezas ni en mansiones, sencillamente, como sociedad le exigimos al gobierno que queremos recuperar las condiciones básicas de vida que hemos tenido y,  hoy,  se ven amenazadas por las prácticas comunistas”.

Asegura que “teniendo la mayoría le diremos al Presidente, usted tiene que ejecutar y la Asamblea Nacional legislar”. Una de las primeras propuestas que llevará será la de “quitarle a Maduro las leyes habilitantes, a través de las cuales ha venido dictando las medidas económicas que han desangrando a la población venezolana”.

“La sociedad venezolana necesita recuperarse y ni con divisiones ni violencia lograremos el país que merecemos todos”, expresa.

Aclara la candidata que no quiere caer en la “demagogia” de presentar un catálogo de propuestas legislativas que no logren ser aprobadas si la unidad no obtiene la mayoría de los curules. Sin embargo, dice que apuesta a “orientar las políticas económicas que puedan reinstitucionalizar el poder público y dirigir la autonomía del poder, con eso lograremos que exista seguridad jurídica y vuelva la inversión a Venezuela. Si eso pasa, podemos equilibrar la inflación”, afirma.

De allí que planteará propuestas legislativas que brinden equilibrio a las realidades económicas que viven los diferentes sectores de la población venezolana”.

En el caso de la frontera propone un régimen económico especial pero “no como el que plantea el gobierno en términos de proselitismo político, no puede existir un control monetario en una Zona Económica Especial como es la frontera del Táchira, porque deben existir unas estructuras jurídicas”; al tiempo que advierte “si el gobierno mantiene la moneda represada eso será zona de corrupción especial porque se seguirán asignando las divisas a los amigos del gobierno, o a quienes digan los señores Nicolás o Diosdado”.

Advierte Gómez que: “Mientras exista una inflación tan impactante los ciudadanos que estamos sometidos a la escasez y desabastecimiento no sólo de alimentos, sino de los repuestos para vehículos, las medicinas y los anticonceptivos, dependeremos del hermano país para adquirirlos porque aquí nos los hay”.

De modo que, indica la candidata, “someternos a tener que comprar esos artículos en Colombia a un precio de dólar negro es insostenible; y esto debe ser regulado con una propuesta legislativa que venga a conocer las realidades de la ama de casa que tiene que ir  Cúcuta a comprar una pastilla para la tensión que si aquí le costaba 700 bolívares allá la puede conseguirla en 4 mil ó 5 mil bolívares”, argumenta.

Todo lo anterior, le hace ratificar que: “El control que el gobierno genera el gobierno lo que hace es generar beneficios individuales y no está resolviendo el problema real”.

— Sin radicalismos, sin violencia, ni apasionamientos, ni desconectarnos del sentimiento que la sociedad venezolana refleja, la militancia que ha seguido a la Revolución es víctima de este proceso al igual que nosotros los demócratas, porque tampoco son dignificados y su calidad de vida se ha deteriorado en los mismos esquemas—argumenta.

Además, recalca que, “en el país teniendo o no, no se pueden adquirir las medicinas para curarle una enfermedad a un hijo; los que tienen y los que no están expuestos a morir en la emergencia de cualquier hospital, ambulatorio o clínica porque no hay medicamentos suficientes”, expone.

“Votará el ciudadano en rechazo al deterioro de su calidad de vida”

Augura la candidata de la unidad que: “Los venezolanos no votarán por partidos políticos, ni por figuras personalistas sino marcará el rechazo a las prácticas  comunistas que han venido deteriorando su calidad de vida”.

— No se justifica que en una sociedad productora de petróleo las damas tengamos que exponernos en una farmacia hasta que se nos note que de verdad tenemos el período para que se nos pueda vender un paquete de toallas sanitarias. Eso lo viví yo en San Antonio del Táchira, cuando una muchacha tuvo que llegar prácticamente expuesta a que la gente la viera manchada para que le vendieran, porque la vía regular es llegar en estado de emergencia y la otra es comprar un paquete que cuesta más de 1.500 bolívares— reclama.

“Ese desmejoramiento de la calidad de vida es lo que el pueblo rechaza”, reitera. “Tenemos la capacidad de producir y trabajar y así llevar a nuestras  mesas la comida que deseemos a nuestros hijos. Pero aquí uno no puede ni comer arroz con pollo, porque si consigues una cosa la otra no y en el escenario más cotidiano ninguna de los dos o a precios inalcanzables, cuestiona Laidy Gómez.

— El gobierno ha atacado a los que se dedican al contrabando de alimentos y de combustible, porque argumenta que es una actitud apátrida que desangra al Estado. ¿Eso está mal?   

— A razón del estado de excepción la actividad ilícita y la economía informal han quedado en manos del gobierno. Y, la evidencia de ello es que quienes cuidan las trochas son los que están permitiendo esos delitos. Ahora, al hablar del bachaqueo, más que adjudicarle una responsabilidad social al ciudadano debemos transferírsela al propio sistema, porque el bachaqueo y el contrabando ocurren a razón de una consecuencia económica, pero hay una realidad y es que la devaluación monetaria genera atractivo para una economía informal que atenta contra la garantía alimentaria— explica.

Pero, insiste Laidy Gómez, “con medidas de forma, como lo es el cierre fronterizo, los procedimientos de las OLP, no se está atacando el fondo del problema, que es permitir que el ciudadano pueda tener un salario digno que le permita llevar el alimento a sus hijos, cubrir los gastos de salud y educación a sus hijos y no tenga que relevar la economía formal por la informal”.

Aclara que: “Si es cierto que existen situaciones que generaban inseguridad ciudadana, no es menos cierto que el grueso de la frontera son padres y madres cabezas de hogar, dedicados al trabajo formal y el gobierno tipifica a quien habita en este espacio como delincuente, paramilitar y bachaquero”.

A juicio de la aspirante a diputada, “la economía informal es una consecuencia de la equivocada política económica que maneja desde hace más de ocho años. La realidad del venezolano es que el sueldo mínimo no le alcanza ni para una semana de comida porque la cesta básica supera los 57 mil bolívares”.

— La devaluación monetaria es una situación que el gobierno no ha podido cambiar con medidas de forma, ejemplo, el hecho de que tenemos más de sesenta días con la frontera cerrada y en Cúcuta sigue teniendo nuestra moneda el mismo valor devaluado. ¿Cómo es posible que a un niño le manden a hacer una tarea y tenga que sacar la copia de un billete de cinco bolívares y el niño prefiera pegar el billete en la hoja porque la copia le cuesta 150 bolívares— recrimina la candidata opositora.

Sostiene Gómez que: “La devaluación es tan impactante que el gobierno se tapa los ojos y con medidas de forma, como es el cierre fronterizo que sigue permitiendo la ilegalidad, que beneficia a ciertos personeros que están allí asignados por el gobierno. De no ser así, que el gobierno explique por dónde pasan las toneladas de alimentos que las policía colombiana ha incautado recientemente”, reta.

Increpa al gobierno  porque no habla de otros sectores irregulares sino de paramilitarismo, “cuando muchos  ciudadanos extranjeros que fueron cedulados en Revolución se dedicaron a generar actividades delincuenciales en la frontera.  De tal manera que, es una bofetada a la idiosincrasia del hombre y la mujer que se levantan temprano y deben trabajar horas extras para poder llevar a la casa un cartón de huevos que cuesta mil bolívares, decir que todos somos contrabandistas y bachaqueros”, sentencia.

—  ¿Considera justo que Colombia no derogue la Resolución 8, la cual legaliza a los cambistas y por ende la conversión a discrecionalidad del valor de la moneda?

— Eso es una interpretación irresponsable de quienes gobiernan porque nuestra moneda era fuerte, podíamos darle el valor que quisiéramos y ésta se fue degradando por culpa del gobierno venezolano, porque la política económica que han venido generando a través de leyes habilitantes y decretos no tiene sintonía con la realidad del pueblo— aduce.

Prosigue la candidata por el Circuito de la Frontera, “no podemos olvidar que durante 17 años de Revolución hemos tenido el precio más atractivo del petróleo, pero sencillamente, a la par no se han generado políticas económicas que puedan mantener la fortaleza de nuestro bolívar”.

Por ende, asegura que: “Colombia no es responsable de que se estén utilizando los billetes de 2 bolívares  para hacer papelillos de piñata. Teníamos toda la infraestructura para que la inversión pudiera generar fuente de empleo y de producción detener la inflación pero, sencillamente, este gobierno ha dejado de hacer gestión pública para convertirse en un gobierno empresario que no tiene la capacidad”

— El gobierno ha relevado la gestión en materia de servicios públicos, seguridad integral y educación para dedicarse a la producción y no ha tenido éxito, porque así busca manipular a la población para dependamos solo del régimen y esa es una práctica comunista; y es contra eso que la sociedad venezolana marcará un rechazo contundente el 6 de diciembre”, ratifica Gómez.

“Vencerá el pueblo el miedo y los atropellos”

Confiesa Laidy Gómez que hacer precampaña en estado de excepción ha sido “sumamente complejo”, porque “motivado a la vulneración de las garantías constitucionales y derechos humanos”, no ha podido hacer asambleas públicas en las comunidades, casa a casas, ni conversatorios para llevar su mensaje.

Refuta que a más de sesenta días del cierre de la frontera “persisten la inseguridad, la escasez y el caos para asistir a las entidades bancarias, de modo que la medida de forma no ha reparado ni mejorado las condiciones de vida de los ciudadanos que habitan los municipios de la frontera”.

— Los primeros quince días no se apreciaban colas en las bombas, transcurridos 69 días se empiezan a apreciar las formaciones y en los bancos; pero, además, la producción textil e industrial se ha visto muy golpeada. Incluso, la actividad aduanera que es lícita propia de las fronteras está paralizada, lo que ha generado que grandes contenedores de medicamentos, repuestos y otros productos de primera necesidad se queden retenidos en Cúcuta y no puedan pasar— expone la abanderada de la unidad.

Aunado a eso, dice que, “ante  el anuncio del aumento salarial muchos negocios han cerrado. Se ha generado una especie de despido masivo porque los comerciantes y empresarios mantenían su nómina con capital propio”.

Cita por ejemplo que, “una industria que fabrica calzado y que a la semana facturaba 5 mil unidades, actualmente solo saca mil. Allí está el impacto fuerte. En los restaurantes han despedido al personal, en los comercios a cualquier hora del día quebrantan las vitrinas para cometer hurtos y todo esto sucede en estado de excepción!”, exclama Laidy Gómez.

Pone otro ejemplo, y  relata que “en un hotel de San Antonio se cometió un robo a mano armada y asesinatos. Entonces, decir que esta acción ha garantizado la seguridad ciudadana y alimentaria es bofetear a los ciudadanos que allí habitamos”.

— Las colas siguen amplias y en ciudad de Cúcuta la policía colombiana ha incautado toneladas de alimentos y de carne venezolana que el pueblo deduce están pasando por las trochas, porque las aduanas están cerradas. Se observan actuaciones del hampa, las colas han vuelto a las bombas y la banca. También se hace más cola y se consigue menos comida en los abastos y supermercados de la frontera— fustiga la aspirante a diputada en la AN.

Lo anterior, sentencia, “quiere decir que el gobierno ha quedado al desnudo cuando dice que aquí no hay alimentos porque existe el contrabando y el bachaqueo”.

Por lo expuesto, reitera que, “el origen de fondo es que el gobierno es incapaz de garantizar e incentivar la producción nacional, porque tiene la moneda controlada desde hace doce años y, prácticamente, poder acceder a las divisas, adquirir materia prima y producir depende de si soy amigo del gobierno o sencillamente yo le caigo bien, es decir, se maneja la asignación de divisas a discrecionalidad y eso es sumamente peligroso”.

¿Quién es ella?

Nombres y apellidos: Laidy Gómez
Fecha de nacimiento: 12 de diciembre de 1.981
Edad: 33años
Estado civil: Divorciada/ Sin hijos
Signo: Sagitario
Profesión: Abogada
Lugar de origen: Rubio, municipio Junín
Ideología: Socialdemócrata
Partido: AD
Religión: Católica
Hobby: Hacer ejercicio
Lema: “Vamos a recuperar el país en el que merecemos vivir”
Twitter: @laidygomezf
Instagram: Laidygomez_1

(Texto: Leidy Zafra / Foto: Jorge Castellanos / Video: Héctor Yepes)