El Intruso e Invasor que Perturba
mi Tranquilidad
Mi compromiso es por ti, no es al turista al que tenemos que sacar, sino a estos gobernantes
Franchomgta Briceño N.
En unas semanas extremadamente convulsionadas en el Estado Nueva Esparta producto de la angustia y el nervio colectivo ante la desinformación de los entes gubernamentales competentes en las materias relacionadas con servicios básicos, debido a lo delicado y precario que han sido los suministros de agua, luz, alimento entre otros, el ciudadano de a pie reaccionó espontáneamente con tres principales acciones comunes.
Canalizó su malestar e inconformidad públicamente de forma virtual en las redes sociales, lo que sin duda generó un impacto global contraproducente para cualquier destino turístico en el mundo, manifestó físicamente su rechazo y negación a soportar las penurias a las cuales se les está sometiendo, a través de protestas de calle y cierre de vías y finalmente, expresó su indignación, por considerar que la empresa privada turística regional, en su criterio atenta directamente sobre su bienestar, cuando según su criterio prioriza sus posturas, decisiones y acciones hacia los turistas y visitantes, incluso hasta a expensas de la calidad de vida del residente.
Lo descrito no es ficción, no es exageración, en una realidad que nos refleja que en más de cuatro décadas, si, más de 40 años, todos nosotros, margariteños y cochenses, aun pensamos que el modelo turístico de desarrollo y por ende todo inversor que apuesta al turismo como alternativa y cree en margarita y coche, es un intruso, un invasor nefasto y tóxico que deteriora, perturba y degrada nuestra tranquilidad y calidad de vida.
Pero es que este intruso e invasor, en principio sufre exactamente de las mismas calamidades de agua, luz, alimentos y otras penurias que aquejan al ciudadano de a pie, y en segunda, dedica su tiempo, esfuerzo y recursos en crear y mantener, unidades productivas que generen riqueza no solo para él, sino para todos, debido a que entre otras aristas, genera empleo directo e indirecto, potencia proveedores que son otros empresarios y emprendedores comunitarios, paga impuestos a las alcaldías, gobernación y gobierno nacional, entre una larga lista de etcs.
En síntesis, colabora económicamente con los gobernantes, generándole ingresos fiscales directos, aunque estos hagan mal uso de ellos, colabora con el tejido socio productivo insular, además de colaborar económicamente con la población en forma de empleos.
Adicional a ello, este inversor e invasor, con el fin de prestar un mejor servicio a sus clientes, que son los turistas, mejora las condiciones generales de su entorno, no solo en materia ecológica natural, sino también social, colectiva y ciudadana.
¿Entonces?, ¿dónde está nuestro foco de atención? ¿Son los turistas que vienen a dejar su dinero los culpables de nuestras calamidades?, o ¿son los representantes del gobierno, los que con acciones ineficientes, corruptas y desarticuladas, invierten nuestro dinero en pro de consolidar una ideología y no en la calidad de vida y las capacidades generales del de a pie?.
En virtud de esto, comparto y difundo la postura empresarial regional de turismo, cuando lanzan como campaña "mi compromiso es por ti". Una campaña hacia el turista y hacia el residente, que refrende ese esfuerzo que hacemos y debemos hacer por ambos factores y, con ello cierro preguntándome, ¿quién es el invasor e intruso?, ¿a quién es que tenemos que sacar para mejorar? ¿al turista? Fuente de captación de recursos o ¿al gobierno?, que pese a manejar nuestros recursos solo nos habla de guerras y enemigos en vez que soluciones, logros y mejoras sustanciales para los ciudadanos.
Yo tengo claro quiénes son y donde están los intrusos e invasores y por eso apoyo y difundo la campaña: "mi compromiso es por ti" margarita...
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