Viva la muerte
Corresponde a ésta la aprobación de los contratos a los que desesperadamente se aferra el régimen después de exterminar la economía, endeudar como nadie al país, crear la horrenda crisis humanitaria-alimentaria y pulverizar el estado de derecho
¡Mueran los intelectuales! ¡Viva la Muerte!, clamó el fanático general franquista Millán Astray. Con un público extremadamente hostil, don Miguel de Unamuno, rector de la Universidad de Salamanca, decidió responderle.
- Acabo de oír el necrófilo grito ¡Viva la Muerte! Me atormenta pensar que el general Millán Astray (mutilado de una extremidad) pudiera dictar las normas de psicología de masas. Un mutilado sin la grandeza espiritual de Cervantes es de esperar que encuentre un alivio terrible viendo cómo se multiplican los mutilados a su alrededor… Venceréis pero no convenceréis
Con insolente desparpajo el mutilado TSJ despojó de su inmunidad al diputado Freddy Guevara, vicepresidente de la AN, institución legal y legítima. La presidencia también tiene legalidad de origen, no así de ejercicio. La CDI normó que un gobierno legal por origen pueda ilegitimarse por desempeño.
El soberano no sabrá de Derecho pero conoce el enorme daño que le ha causado este régimen y da señales de su decisión de sustituirlo pacífica, democrática, constitucional y electoralmente. El gobierno tampoco sabe de Derecho pero cree conocer lo necesario para eternizarse en el mando. Maneja fechas electorales a capricho y se vale del fraude según que la oposición vote o se abstenga. Si es lo primero, tratará de burlar al elector. Y lo hará de cara a un mundo inclinado a rechazar la destrucción de los DDHH y la crisis humanitaria y alimentaria. El fraude se deslizará a la vista de un mundo no dispuesto a permitir el exterminio de un pueblo. El costo será impagable.
El derecho de sufragar se ejerce a discreción, no es obligatorio. Sin presencia opositora, el gobierno manejará cifras a placer sin el riesgo de ser acusado de cometer irregularidades. Fraude es desconocer el derecho ejercido no el reservado. Lejos de legitimar al Poder las infracciones regionales fueron tan desproporcionadas que la deslegitimación tocó fondo. Las perversiones electorales no acreditan, desacreditan. En cambio, la abstención pierde todo a cambio de nada.
Para medir la importancia de luchar por los “espacios” obsérvese la batalla que se libra alrededor de la AN. Corresponde a ésta la aprobación de los contratos a los que desesperadamente se aferra el régimen después de exterminar la economía, endeudar como nadie al país, crear la horrenda crisis humanitaria-alimentaria y pulverizar el estado de derecho. Millones han escapado al extranjero. Según el IESA 70% de los emigrados va de 25 a 35 años, circa 60% con posgrado.
Es urgente reconstruir la unidad. Siendo plural la sociedad, igual debe serlo su conducción. Unidad de lo diverso, sin exclusiones. También cuenta el “estilo” político y la forma de sobrellevar desacuerdos. Pernicioso es difamar y calumniar a quienes discrepen.
¿Cuándo comenzó a degradarse el estilo desde la densidad argumental a la descalificación, la presunción de inocencia a la de culpabilidad, la serenidad de juicio a la obsesiva sospecha? El retroceso a las cavernas de la infamia empezó
con Chávez, en su ansia irrefrenable de perpetuación. El éxito de su legado fue transferir su violencia verbal a fervientes seguidores y ardientes opositores.
Gritando con Millán Astray: ¡Mueran los traidores! ¡Viva la muerte!
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