Diputado Gustavo Delgado. (Fotot/Carlos Eduardo Ramirez)
Diputado Gustavo Delgado. (Fotot/Carlos Eduardo Ramirez)
Según el diputado copeyano en el Consejo Legislativo, Gustavo Delgado, “hay por lo menos seis panaderías a las que el Gobierno y organismos de control como la Sundee, tienen en la mira y que podrían ser objeto de expropiación si no acatan las órdenes y lineamientos en cuanto a la producción que deben sacar diariamente”.
Explicó el legislador que: “Nos han notificado que estos establecimientos, ubicados en varios municipios del estado, se dedican a la elaboración de pastas y productos de panadería, están a merced de lo que determinen las autoridades, que es lo correcto, porque el Gobierno de los pobres pretende desalojarlos de sus propiedades, lo que significa robarse unos bienes que son de propiedad privada, con la implementación de fiscalizaciones”.
“La mayoría de panaderías del estado tiene fiscales y con eso se persigue a los dueños de dichos establecimientos y los trabajadores, cuando el Gobierno debe ocuparse en garantizarles los insumos, como harina de trigo, aceite, azúcar, para que no falte el pan ni los productos que allí se elaboran para la gente”, recalcó.
Vemos cómo en Caracas expropiaron o se robaron tres panaderías, y vayan para que vean quiénes están al frente, lo digo con mucha responsabilidad, son unos malandros los que tienen allí, están haciendo lo mismo en otros estados; aquí en el Táchira tienen en la mira a algunas panaderías y pastelerías, porque a ellos (autoridades) les da la real voluntad y gana  que acaten una orden ilegal de la Sundee”.
“Esas fiscalizaciones que se hacen no buscan mejorar la prestación del servicio en las panaderías o para garantizarles insumos, son para arrinconar y quebrar a todo el sector panadero y pastelero del Táchira, acción que repudiamos y rechazamos”, acentuó Delgado.
— No ha habido buena voluntad de parte del Gobierno para ayudar al sector, lamentamos que insista en perseguir a la gente que trabaja y genera empleo en el país; es decir, la empresa privada, en vez de ocuparse de los especuladores. Todo lo que agarra el gobierno lo daña, dos casos emblemáticos: Cementos Táchira y el Central Azucarero de Ureña, (Cazta), ambos arruinados, porque los expropiaron, se los robaron y no han sido capaces de mantenerlos productivos. Otro ejemplo es Pdvsa Gas Comunal, la asumió el gobierno y 40% de la población del estado no tiene gas doméstico— refutó.
Anunció que elevará el caso al Parlamento regional y sugerirá que sean suspendidas las fiscalizaciones que “en nada ayudan a la operatividad de las panaderías”, así como que el Gobierno se comprometa a suministrarle al sector los insumos necesarios para que haya abastecimiento de pan. (LZ)