Parir en Venezuela es un peregrinaje cada vez mayor. Ni siquiera la principal maternidad del país, la Concepción Palacios, se salva de la escasez de insumos, el déficit de médicos y la necesidad de referir a las parturientas a otro centro de salud, uno que esté “mejor dotado”. Al menos por ese día.
La falta de anestesiólogos se ha traducido en una disminución del número de partos atendidos durante 2018, afirman médicos que trabajan en la institución hospitalaria.
“No podemos ingresar a una madre a la maternidad si no tenemos quién coloque la anestesia. No sabemos qué complicación se pueda dar en el parto y eso es un riesgo para la madre y su bebé”, afirma una obstetra que prefirió no revelar su nombre por temor a represalias.
El martes 11 de diciembre las parturientas que llegaron a la Maternidad Concepción Palacios fueron referidas a otro hospital. La razón: el anestesiólogo de turno para ese día se ausentó.
El especialista que trabaja los miércoles solo asitió al centro asistencial el pasado 12 de diciembre de 10:00 am a 4:00 pm. Todas las mujeres que llegaron fuera de ese turno tuvieron que peregrinar por el resto de la capital hasta conseguir otro hospital en el que las atendieran.
“Es muy impredecible. Si las parturientas llegan hoy (jueves, 13 de diciembre) sí las podemos ingresar porque tenemos anestesiólogos y todos los insumos necesarios. Si llegan mañana viernes, no sé. Es impredecible”, explica la médico obstetra.
Pero no es solo la falta de anestesiólogos lo que compromete el número de partos atendidos en la Concepción Palacios. También incide la ausencia de material médico-quirúrgico. Desde hace tres meses las calderas del hospital (utilizadas para esterilizar los instrumentos médicos) están dañadas. El personal ha tenido que recurrir a otro centro de salud para solicitar apoyo en la esterilización de los materiales.
“Antes, esos instrumentos se esterilizaban aquí, pero ahora tenemos que enviarlos a otro sitio para que lo hagan y esperar a que los traigan de vuelta. Si en ese momento llega una parturienta, no la podemos atender porque los materiales no están limpios. Estamos hablando de las tijeras y todos los implementos de metal que se utilizan durante el parto“, detalla la médico.

Sin registro formal de los recién nacidos

Desde hace seis meses la Maternidad Concepción Palacios tiene problemas para expedir los certificados de nacimiento de los recién nacidos. El formato, suministrado por el Ministerio de Salud, también escasea en el principal centro de atención materna en el país.
“Aquí llegan madres con niños de hasta seis meses de nacidos a preguntar por los certificados de nacimiento”, afirma un enfermero de la maternidad. Desde hace un mes, el Ministerio de Salud comenzó a entregar un límite de certificados por día para dárselos a los padres de los bebés que han nacido en el último semestre y que, parar el momento del parto, no pudieron recibir el documento.
Los recién nacidos no pueden ser presentados sin el certificado de nacimiento, que detalla el lugar donde el niño nació, el centro de salud, los padres y su identidad.
“Sin eso, no están registrados. No existen. Lo único con lo que cuentan los padres es una constancia de nacimiento, pero no es un documento formal”, detalla el enfermero.

Un déficit que se agrava

En el servicio de Cirugía de la Maternidad Concepción Palacios debería haber nueve cirujanos. Sin embargo, apenas tiene tres médicos. El déficit de personal se ha agravado este año, afirman los doctores.
Según la Federación Médica Venezolana (FMV), 26 mil médicos han abandonado el país en los últimos 14 años. El gremio estima que el éxodo de cirujanos asciende a 2.500, una de las especialidades que encabezan la lista migratoria.
El déficit de personal de Enfermería no se queda atrás. Miguel, un enfermero de la maternidad, ha visto partir a al menos 20 colegas este año. “Meten sus vacaciones o piden reposo, les va bien afuera y se quedan”, precisa Miguel.
Desde junio de este año los enfermeros de red pública y privada se declararon en huelga para exigir mejoras salariales. Sin embargo, para la fecha, no han visto sus demandas materializadas.
El paro ha afectado las consultas de la Maternidad Concepción Palacios, que actualmente solo atiende a los pacientes que llegan a la consulta de prenatal. En las otras áreas, como adolescencia, no se está prestando servicio.