En Hawái (Estados Unidos), varias parroquias y órdenes religiosas y laicas reflejan la importancia del Rosario dentro de la Iglesia Católica. Muchos sacerdotes, religiosos y religiosas rezan el Rosario con regularidad. El obispo de Honolulu, monseñor Larry Silva dijo que reza, al menos, dos Rosarios diariamente.
El Rosario es un medio de meditación profundamente significativo. Puede ser una forma en que los fieles expresen su amor, su fe y su devoción. Puede brindar consuelo o ayudar a las personas a concentrarse, incluso puede servir para interactuar con otros.
Cuando el padre Anthony Tran de Hawái era niño, rezar el Rosario le parecía “repetitivo y mecánico” y no le atraía. Sin embargo, al enterarse en la escuela secundaria sobre las apariciones marianas, particularmente de Fátima, donde uno de los niños no pudo ver a María hasta que rezó el Rosario correctamente, el padre Tran, actualmente vicario parroquial de la co-catedral Santa Teresa en Honolulu, quedó profundamente marcado por esta experiencia. Se dio cuenta de la importancia de esta oración y, al ingresar al seminario y agregar el Rosario a su rutina, entendió que María intercede por nosotros y nos ayuda a acercarnos más a su Hijo, Jesucristo.
Hoy, el padre Tran dice que el Rosario está aún más al centro de su vida espiritual. “Al dedicar mi Rosario en la oración por aquellos a quienes Dios me ha confiado, espero parecerme a María, acercando a otros a Jesús, así como Ella me acerca a Él”, dijo. “Por lo tanto, el Rosario se ha convertido no solo en una devoción personal, sino también en una herramienta pastoral que me ayuda a cimentar mi relación con Jesús y guiar a otros en su fe”.
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