Madres en Defensa de la Verdad: Un movimiento que busca justicia en tiempos de incertidumbre

 

Las madres de los niños, niñas y adolescentes detenidos, en contexto poselectoral, crearon un frente para exigir su liberación y se cumpla el debido proceso

IPYS,  Eilidibeth Córdova – 20/12/24

“Madres en Defensa de la Verdad” es un movimiento que surge de la incertidumbre, el miedo y la solidaridad. Este grupo está compuesto por madres cuyos hijos están detenidos. 

Los adolescentes fueron arrestados en un contexto poselectoral y están siendo acusados de terrorismo, a pesar de que las madres sostienen que no existen pruebas en su contra y que se están violando todos los procedimientos legales.

En el caso de Ángel Ramírez, de 16 años, en la audiencia preliminar le pidieron que se declarara culpable. El adolescente no aceptó y pasó a juicio. Su madre, en conjunto a otras, se concentraron al frente de la sede de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Caracas. 

Las familias entregaron una carta en la que le piden al organismo intervenir en la liberación de los niños, atención psicológica y una visita independiente en los centros de detención. Durante la rueda de prensa, la madre de Ángel, Nérida Ruiz, de 39 años, explicó las condiciones en la que fue arrestado su hijo, quien cumplió 17 años en prisión. 

“Mi hijo es inocente y no es terrorista. Fue detenido en nuestra casa, mientras cuidaba a su hermano, también le están imputando hurto agravado porque lo están vinculando al caso de las motos Bera”, explicó a los medios de comunicación. 

Ramírez, de 17, fue detenido en su casa en el barrio El Tamarindo, de El Valle. Lo acusaron de haber robado una moto, a pesar de que su familia había reportado -en la noche anterior- que el medio de transporte había sido estacionado cerca. 

Según el relato de su madre, fue detenido sin orden de aprehensión el 31 de julio, a pesar de que no había pruebas en su contra. La madrugada del día anterior, 30 de julio, ocurrió un saqueo en el concesionario de motos Bera en El Valle, y lo implican en este delito.

La historia de Ángel forma parte de los relatos de ‘Madres en Defensa de la Verdad”, cada una carga con su propia historia y, entre ellas, se dan ánimos para salir adelante. 

Foto: Las madres y familiares están haciendo lo posible para que se les cumpla el debido proceso a sus hijos.

«La familia está presa con los detenidos» 

Las madres han liderado la lucha por sus hijos. En las concentraciones y manifestaciones en las que se exige justicia, las mamás llevan la bandera. Sobre esto, la defensora de derechos humanos, Ligia Bolívar, afirmó en una entrevista con Luis Ernesto Blanco, director de RunRunes, que “la familia está presa con los detenidos”. 

Explicó que lo que existe en un país normal en Venezuela no, esto lleva a las familias a pasar penurias al momento del traslado, llevar comida y esto hace que las personas cercanas a los detenidos también queden en privativa de libertad. 

Pero, en medio de todo lo que ocurre, Bolívar destaca la solidaridad de las familias y se refirió al movimiento de Madres en Defensa de la Verdad. 

“También hay que decir que se ha generado un movimiento de solidaridad entre los mismos familiares. Esas madres, porque la mayoría son mujeres, han generado una dinámica de comprensión valiosa. Es la única forma de sobrevivir y decir “no estás sola”, porque es una situación que está arropando a muchas personas”, dijo. 

La también socióloga y educadora destacó que las madres no se están quedando calladas, ya que se dieron cuenta de que “el silencio es cómplice de los represores”. 

La mayor carga es para las madres 

Las madres son las que llevan la mayor carga, sumado al hecho de que muchas son madres solteras. Algunas han tenido que dejar trabajos, pedir vacaciones o incluso pedir préstamos para asistir a cada visita, llevar productos de higiene, comida y trasladarse hasta los centros de detención. 

Este movimiento, que nació desde un grupo de WhatsApp, ha permitido que estas mujeres se sostengan y se den fuerzas en los momentos más difíciles y puedan sobrellevar el dolor más grande: el no poder ver a sus hijos. 

Algunas han tenido que enfrentar problemas relacionados con la salud mental. Katherine, madre de Irene, de 17 años, detenida en Valencia, Carabobo, contó que le cuesta conciliar el sueño en las noches y que comenzó a experimentar ataques de pánico, debido a esto tuvo que asistir al psiquiatra. 

Foto: Las madres se concentraron al frente de la oficina de UNICEF, en Caracas, para pedirle al organismo que intervenga por sus hijos e hijas.

Irene es hija única y fue detenida el 4 de agosto. La niña tenía la ilusión de estudiar Derecho y de ser modelo, pero su vida fue pausada por ser acusada de incitación al odio. El 26 de septiembre se llevó a cabo la audiencia preliminar y se declaró inocente, ahora deberá enfrentarse a juicio. 

Katherine, como otras madres, se afianza en Dios y aseguró que espera que todo termine pronto. “Son niños, no son terroristas”, indicó. 

En su afán de encontrar la libertad de sus hijos, las mamás de los adolescentes llegaron al Ministerio Público y también al Tribunal Supremo de Justicia. En ambos, introdujeron un documento pidiendo que se les respete el debido proceso y le permitan defensa privada. 

Marelys Ruiz, vocera de Madres en Defensa de la Verdad y tía de un niño detenido, expresó que los “muchachos” necesitan alguien que los defienda y quieren tener acceso a una defensa privada. 

Foto: Las madres entregaron dos recursos ante el Ministerio Público y el Tribunal Supremo de Justicia, en ambos piden la liberación de sus niños.

“Esto no es vida, ni para él, ni para nosotras. Él tiene un hermanito pequeño y su hermanito llora todas las noches esperándolo. Pregunta ‘¿Y mi hermano, dónde está mi hermano?’ Y duerme abrazado de la foto porque no lo ve. Cada vez que le decimos que está de viaje se nos parte más el alma”, detalló. 

Ruiz enfatizó que el movimiento busca hacer eco de “todos los falsos cargos que le están haciendo a los muchachos porque son jóvenes, estudiantes, deportistas, colaboradores, en su mayoría, con la comunidad y no merecen que le están dañando su futuro de esta manera”.