Rafael Iribarren: La Constituyente Madurista
.- Una constituyente antichavista para la reelección de Maduro.
La constituyente anunciada por Maduro es madurista; no chavista. Realmente antichavista. La promueve desentendido de los demás chavismos en su proyecto de construir el madurismo. Para imponerles su liderazgo y su reelección. Dándose una base sociopolítica regional que no tiene; quitándosela a los gobernadores y alcaldes chavistas; la mayoría 4Febreristas.
Es antichavista. Junto con Ecarrá; el cerebro constitucionalista del madurismo; y Jaua; quiere cambiar la CRBV; la constitución de Chávez “la mejor y más moderna del Mundo”; que iba a “durar cien años”; dictada por él mismo desde Miraflores en 1999: sobre el programa del “Proceso”, “Para salir del laberinto” de 1997. E invirtiendo la dinámica de “La victoria perfecta” de Chávez del 2012
.- Una huida hacia adelante en escenarios entre gigantografías.
Contra la pared; bailando en un tusero; es una “huida hacia adelante”. Pero no en una perspectiva real, concreta; sino en la perspectiva virtual escenográfica de los estudios de grabación de sus cadenas nacionales. Escenografía pura de montajes en tramoyas y bambalinas gigantografías y gingles; de asambleas controladas y falsos positivos.
.- Ni comunal ni originaria ni federalista.
La constituyente madurista no es; ni, en tal caso, sería; comunal ni originaria ni federalista; como pretenden en sus retóricas Maduro Jaua y Ecarrá. Ni siquiera psuvista. En tal caso; no pasará de algunas asambleas regionales y/o sectoriales; varias en el Teresa Carreño; como las que en el 2015 y 2016 montó para el “II Congreso del PSUV”; y el “Congreso de la Patria”. Con participantes; Maduro mismo dixit; “escogidos cuidadosamente entre los más comprometidos con la revolución”; con una agenda y control de su procesamiento desde Miraflores; y absolutamente centralizada en Caracas.
.- No se atreve a disolver la AN; dos de cada tres diputados oficialistas lo rechazarían.
Pese a sus amenazas reiteradas; las personalizadas contra diputados concretos; y las generales; sigue sin atreverse a intervenir o disolver la AN. Aunque con todo el poder fáctico y político-institucional que le permite el presidencialismo, absolutamente concentrados y centralizados; está solo y aislado políticamente nacional e internacionalmente; sin bases sociopolíticas reales; concretas. Maduro no tiene partido; el PSUV; aparte su in-estructura y reducirse a una burocracia que maneja las nóminas gubernamentales; no es madurista; es mayormente 4Febrerista. No pasa del 15% el apoyo nacional que tiene; y la inmensa mayoría del mismo chavismo que queda lo rechaza; es antimadurista. En ese contexto; y, según; dos de cada tres diputados chavistas; de la AN lo rechazan; y como ya se dan manifestaciones abiertas; la mayoría de la fracción parlamentaria oficialista se alzaría en contra de una eventual intervención o disolución.
.- Crear una base electoral nueva para construir el madurismo sin los otros chavismos.
En su proyecto personal reeleccionista; en el mismo contexto de estar atrapado en el aquelarre del todos contra todos de los chavismos; y en las tensiones e incoherencias internas de su equipo de gobierno; sin más soporte que el poder fáctico; que cada vez más tiene que manejar más a pulso. Tampoco cuenta con el CNE; ni con el sistema de sistemas de procesamiento y totalizaciones electorales. Hasta lo que se cree; y según; solo controla su directiva; sus cuatro rectoras; o, según, solo tres. Con el suspenso en que está; de que en ellas se produzca; o ya está planteada; una crisis como la de la Fiscal.
Sin contar discrecionalmente con el CNE; ahora, ni siquiera, seguro, con su burocracia directiva; ni su estructura interna de procesamiento; la idea de la “constituyente comunal” apunta a crear una base electoral nueva; “comicial; Ecarrá; la llama, “originaria”; comunal; parroquial; fuera del manejo inicial oficial del CNE. Pero que por la vía de hecho; “originaria”; se le imponga; según, “desde las bases ciudadanas”; por encima de las convocatorias formales; aparte de los listados oficiales de electores; y como un ente electoral soberano; por encima del CNE,; que tendría que reconocerlo como supuesta fuente de legitimidad. Y obviamente de la AN.
.- Bypasear al CNE el PSV y el GPP: de “La victoria perfecta de Chávez” a la “constituyente comunal” de Maduro.
A sabiendas; a pesar del obligado teatro; de que no tiene ninguna posibilidad concreta de ganar limpiamente ninguna elección ni nacional ni regional ni local; de que no tiene bases sociopolítica ninguna; de que no tiene partido y que no cuenta ni con el PSUV ni la mayoría chavista de la AN. Y que tampoco controla todo el CNE; ni hoy puede negociar su manejo con los otros chavismos como fue hasta el 2013. Sobrestimando, no se sabe qué; y subestimando todo se contexto; Maduro se lanza a bypasear; no solo al país, que lo rechaza absolutamente; y a la mayoría chavista; sino que también al CNE y al PSUV y el GBP.
Un bypaseo que implica invertir la estrategia de imposición del poder centralizado absoluto que Chávez intentó con su “Victoria perfecta” del 2012. Que consistía en “ganar”; CNE-Smartmatic mediante; todas las gobernaciones, consejos legislativos y alcaldías. A partir de su liderazgo nacional; mediante el fraude necesario; y la incondicionalidad de los liderazgos chavistas regionales y locales; pretendía lograr electoralmente el control político-institucional absoluto del país; desde lo nacional a lo regional y a lo local. Para luego re-legitimarlo; como estructura de control y poder nacional-presidencial-central; con la implementación del “Plan de la Patria”; declarada como iba a ser; y como fue, por la AN de entonces, ley orgánica de la República.
El Plan de la Patria; con todo y el liderazgo de Chávez; ya en mengua, pero todavía importante; era inviable; y, en intentándose implementar; en el corto plazo se hubiera desmontado. Hoy es igual de inviable; e imposible de siquiera intentar su implementación; sin ni siquiera liderazgos nacionales regionales y locales incondicionales ganados para el centralismo como los chavistas de entonces. La beligerancia ciudadana local y regional apunta al dimensionamiento de lo regional como dimensión concreta del ejercicio de la soberanía ciudadana; hacia la descentralización, la desconcentración y la despresidencialización del ejercicio del Poder. Hacia la regionalización y ciudadanización de la política. Hacia la activación de un nuevo sujeto político el ciudadano; en u nuevo ámbito socio-político y político-institucional; la región.
.- Ante la constituyente madurista; CALENDARIO ELECTORAL con regionales ya.
Llegue hasta donde llegue la constituyente madurista; nonata que es y desahuciada como está; aparte de rechazarla totalmente como se está haciendo; en la calle y políticamente; para bloquearla. Hacia que sea el equivalente venezolano del rechazo paraguayo a la pretensión reeleccionista de Cartes; ese no es el tema de fondo; sino en tal caso circunstancialmente; de la confrontación y lucha contra el madurismo. La respuesta a la constituyente madurista; es profundizar e intensificar la movilización por las regionales; y la presión sobre el CNE para que formalice y publique ya el calendario electoral que presentó en octubre pasado. O sea; no equivocarse ni desviar la atención; aunque tiene que ver; la cuestión no es la constituyente madurista; sino las regionales Aparte la agenda general por el respeto a los DDHH, el reconocimiento de la ANB y la libertad de los presos políticos Con una agenda política sobre lo electoral, de tres puntos: 1.- Concentrar la presión en el CNE para la formalización y aprobación del CALENDARIO ELECTORAL de octubre pasado; 2.- Concentrarse en activar y armar lo regional como base política para lo electoral; sea cando sean las elecciones regionales; como en función de dimensionar las regiones, como poder regional; frente al poder nacional central autónomo; y, 3.- Impulsar una AGENDA CIUDADANA para el debate sobre la región y la ciudadanía frente al Poder nacional. El presidencialismo y el centralismo.
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