jueves, 4 de marzo de 2021

Justicia social no es socialismo

 

Justicia social no es socialismo, por Fernando Luis Egaña

justicia social

Mail: flegana@gmail.com


(Esta es la ampliación de un texto de septiembre de 2018).

Está muy trillada la expresión de «no confundir la gimnasia con la magnesia», en el sentido de que las palabras suenan parecidas pero se refieren a cosas muy distintas. Pero la referida expresión es pertinente a estas líneas porque se entiende sin problemas. De allí que, cambiando lo cambiable, hay que decir algo similar en relación con el principio de la justicia social y la ideología socialista-marxista.

Confundirlos es un absurdo conceptual. Pero ocurre —y cada vez con más frecuencia— en nuestra abatida Venezuela. De manera que si alguien se presenta como partidario de la justicia social, en lo nacional o internacional, de inmediato es calificado por ciertos comentaristas de las redes sociales de «socialista-marxista» o, cuando menos, protosocialista-marxista. Lo cual, desde luego, no se puede aceptar.

La superación del socialismo-marxista no está en el liberalismo irrestricto, en el imperio soberano de los mercados. No. Debe estar en una sana combinación de libertad económica y responsabilidad social.

De hecho, en Alemania o Japón es así, para no hablar de los Estados Unidos, cuyo sistema económico no es ajeno, para nada, a la regulación extensiva del Estado. Y, ojo, hay regulaciones que pueden responder al principio de la justicia social y otras que no.

Todo esto viene a cuento porque es sumamente peligroso que, por ignorancia, por dogmatismo o hasta por mala fe, se trate de formar una corriente de opinión en favor de que el principio histórico de la justicia social —fundamento, por ejemplo, de la Doctrina Social de la Iglesia— no es más que una manifestación de rancio marxismo o anticuado socialismo. Y no es así, ni en su génesis histórica ni en su definición doctrinal ni en el campo de las políticas públicas.

El comunismo, en sus variadas vertientes: ortodoxo o “socialismo real”, eurocomunismo, socialismo “borbónico” (que ni olvida, ni aprende), etcétera, es la imposición del colectivismo, la supresión de las libertades económicas y los derechos de propiedad, y el encumbramiento de una dictadura política, económica, social y cultural, en cabeza del partido único.

Eso no tiene nada que ver con la noción de justicia social en un contexto de primacía de la iniciativa personal, del principio de subsidiaridad y de búsqueda del bien común, respetando el pluralismo e impulsando los valores democráticos.

Entonces, por favor, no confundamos la justicia social con el socialismo marxista. Favor recordar lo de la gimnasia y la magnesia…

*Lea también: Adiós, Maduro, adiós, por Pedro Luis Echeverría

La referida Doctrina Social de la Iglesia, cuyo acervo documental y patrimonio cultural es de muy amplio alcance, siempre ha sido clara en la oposición a toda forma de colectivismo. Máxime si este es de raíz materialista y justifica el despotismo en función de una supuesta revolución para imponer un Estado de poder omnímodo.

El catecismo de la Iglesia católica, promulgado por Juan Pablo II en 1992, expresa: «La sociedad asegura la justicia social cuando realiza las condiciones que permiten a las asociaciones y a cada uno conseguir lo que es debido según su naturaleza y su vocación. La justicia social está ligada al bien común y al ejercicio de la caridad».

Tal expresión es de una claridad meridiana para comprender la naturaleza específica de las cosas.

Es importante destacar el papel de la caridad, como virtud teologal, en la evolución de la apreciación de la justicia social, en tiempos relativamente recientes. Ello también la deslinda de los socialismos que minusvaloran la caridad o que la denuncian como un paliativo precario ante las desigualdades, con lo cual se desconoce la fuerza operativa de la caridad, consagrada en el mensaje de la Iglesia y su Doctrina Social.

En Venezuela, por ejemplo, la bandera de la justicia social, en el contexto acá señalado, fue enarbolada en el siglo XX por la democracia cristiana o socialcristianismo y, de modo principal por su líder fundador, Rafael Caldera.

De hecho el lema partidista fue: «Por la justicia social en una Venezuela mejor». Todo su desarrollo conceptual no solo es divergente del socialismo marxista sino contrario a este.

Es más, el presidente Caldera promovió una perspectiva original del tema con la propuesta de la justicia social internacional, que fue acogida con entusiasmo en los ambientes demócrata-cristianos de América Latina y Europa, pero no así desde los ámbitos marxistas, que la llegaron a considerar una amenaza a sus teorías de la lucha antiimperialista —que no admitía la validez intrínseca sino acaso táctica— de la cooperación social o las relaciones de justicia social entre el llamado mundo desarrollado y el «tercer mundo».

Un caso notable de concreción del principio general de la justicia social internacional fue el Acuerdo Energético de San José, impulsado por el presidente socialcristiano, Luis Herrera Campíns, suscrito en 1981, en alianza con México. Su finalidad era el apoyo energético —y sobre todo petrolero— a países de América Central y el Caribe, para aliviar sus finanzas y respaldar los procesos de democratización.

El Acuerdo de San José establecía referencias favorables en momentos de altos precios en los mercados globales del petróleo.

Puede sostenerse, entonces, que la justicia social fue una cuestión central, en la teoría y la práctica, en sectores políticos venezolanos no marxistas. Luego, la expresión fue perdiendo contenido y significación propias, hasta el punto de que también se convirtió en una banderilla retórica de la hegemonía que ha imperado en Venezuela durante el siglo XXI y todo eso ha espesado la peligrosa confusión que prevalece.

Fernando Egaña es Abogado-UCAB. Exministro de Información.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Etiquetas

Noticias de Venezuela Politica Noticias de Nueva Esparta Opinion Derechos Humanos en Venezuela Presos Politicos Dictadura en Venezuela Nacionales Noticias Nacionales Perseguidos Politicos DDHH Internacionales Noticias Estado Nueva Esparta Noticias Regionales Crisis Humanitaria Crisis Economica Cultura Noticias Internacionales Nicolas Maduro Estado Nueva Esparta Economia Crisis Social Turismo en Isla de Margarita IAPOENE Resolucion 008610 Chavez Manifestaciones en Tachira FILCAR 2015 Leopoldo Lopez Libertad de Prensa Maria Corina Machado SEBIN corrupcion Carnavales 2015 Maduro Movimiento Estudiantil UNIMAR Deportes Diosdado Cabello Hugo Chavez Libertad de Expresion 4 de febrero de 1992 Gobierno de los EEUU Isla de Margarita MUD OEA Turismo Fundacion UDC Lilian Tintori Inseguridad en Venezuela ONU Primero Justicia Barack Obama Estado Sucre Golpe de Estado del 4 de febrero de 1992 INEPOL Mesa de la Unidad Democratica dictadura Capriles Radonsky Cumana Defensor del Pueblo España Jony Rahal Voluntad Popular Henrique Capriles Radonski Lista Falciani Nelson Bocaranda PNB Secretario General de la OEA Swiss Leaks 12 de Febrero Colombia Cristina Fernandez Escolta de Diosdado Cabello lo acusa en Washington de narcotráfico Historia de Venezuela Jesus Chuo Torrealba Marianela Salazar Municipio Antolín del Campo CAMPO Noticias de Uruguay Pedro Leon Zapata RUNRUNES Rodriguez Torres TSJ Tarek William Saab Autorizan uso de armas mortales contra protestas en Venezuela CENCOEX Cartel de los Soles Caso HSBC Escolta denuncia a Diosdado Fidel Castro HSBC La Asuncion Manifestaciones en Caracas Municipio Mariño PODEMOS España Partido PODEMOS Sebastiana sin Secretos Teodoro Petkoff dictador historia Alberto Nisman Argentina CADIVI CNE Caricatura Chavismo Devaluacion del Bolivar Estado Merida FARC Guerra Economica Helicoide Inflacion en Venezuela Leamsy Salazar Luisa Ortega Diaz Manifestaciones en Merida Maxidevaluacion Municipio Gomez Ocho militares del anillo de seguridad de Maduro también huyeron Padrino Lopez Simon Bolivar UCAT UCV democracia 12F Alcaldia de Mariño Asamblea Nacional Blanqueo de Capitales Empresas de Maletin Estado Bolivar Farmatodo Fernando Luis Egaña Gobierno Español Golpe de Estado al Presidente Maduro Guayana HRW Hiperinflacion Human Rights Watch Indice de Miseria Investigacion Jorge Giordani Juan Carlos Monedero Juangriego Marta Colomina Megadevaluacion Ministerio Publico Ministro de la Defensa Municipio Diaz Municipio Tubores Noticias de Argentina Noticias de Colombia PDVSA Pedro Claver Cedeño Periodista Eladio Rodulfo Gonzalez Pollo Carvajal Porlamar Reporteros sin Fronteras SIMADI Tabare Vasquez UCAB UDO Universidad de Oriente Venezuela Primero en Indice de Miseria 2014 AD Accion Democratica Alberto Barrera Tyszka Andres Oppenheimer Autoritarismo BCV BID Banco Central de Venezuela CNP Carnaval de Carupano Carnaval del Mar Carnavales de El Callao Censura en Venezuela Cesar Miguel Rondon Convenio Cambiario 33 Corte IDH Cupo Viajero DECLARACION DE TBILISSI DISCURSO DE ANGOSTURA Educacion Efemerides Efemerides de Margarita Empresas Basicas Fiscal General de la Republica GNB Hugo Carvajal Iglesia Venezolana Laguna de La Restinga Monedero Municipio Marcano Nelson Mandela Noticias de Chile Operacion Jerico Oscar Arias Pedro Llorens Pensamientos de Simon Bolivar Puerto Libre RSF RSF 2015 Rodolfo Marcos Torres RupertiGate SICAD SIDOR Salvador Allende Sistema Cambiario Sistema Marginal de Divisas Tasa SIMADI Tribunal de la Haya UNES UPEL Víctimas inocentes del 4 de Febrero de 1992 William Brownfield Wilmer Ruperti