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El dolor permanece intacto para quienes aún recuerdan la tragedia de Azores. La madrugada del 3 de septiembre de 1976 un accidente aéreo enlutó a Venezuela y Portugal, luego de que un avión venezolano se precipitara en las islas portuguesas de Azores con los integrantes del Orfeón Universitario de la Universidad Central de Venezuela (UCV).

La tragedia provocó la muerte de 68 personas, entre ellos, 52 estudiantes de la UCV que formaban parte de la coral universitaria, 11 tripulantes militares y cinco acompañantes. 

“Venezuela llora la muerte de 52 miembros del Orfeón Universitario, los militares y el resto de pasajeros, quienes perdieron la vida al estrellarse en Azores. Callan las voces del Orfeón y solo se escucha el lamento angustioso de un pueblo que no encuentra la palabra adecuada frente a la magnitud de esta tragedia”, expresó un presentador del canal Venezolana de Televisión (VTV) en septiembre de 1976.

En el lugar donde se precipitó el avión venezolano, habitantes de Azores construyeron un monumento con piedras volcánicas de la zona en honor a los casi 70 fallecidos.


Orfeón Universitario de la UCV

El Orfeón Universitario de la UCV fue fundado en 1943 durante la rectoría del doctor Rafael Pizzani y bajo la conducción del Maestro Antonio Estévez, siento pionera de las agrupaciones corales universitarias en el país, de acuerdo con lo señalado en la página web del Vicerrectorado de Académico de la Universidad de Carabobo.

Asimismo, el Orfeón de la UCV ha construido una trayectoria que le ha merecido el reconocimiento nacional e internacional gracias al desarrollo de actividades orientadas al canto coral y a la promoción del movimiento universitario en Venezuela.

Tragedia de Azores: 48 años del accidente aéreo que silenció el Orfeón de la UCV
Foto: Jaime Escobar

La ruta de la tragedia de Azores

Las víctimas del accidente viajaron desde Caracas en un avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea venezolana y tenían como destino la ciudad de Barcelona, en España, gracias a que fueron invitados a participar en el XII Día Internacional del Canto Coral que se lleó a cabo en la ciudad catalana. 

Sin embargo, la aeronave nunca aterrizó y se estrelló antes de llegar al Aeropuerto de Lages, en la isla de Texeira del archipiélago de Las Azores, en Portugal.

De acuerdo con la información que ofrecieron las autoridades aeronáuticas en ese entonces, la ruta de vuelo Hércules C-130 contó con varios puntos de inflexión, entre los que se destaca las diversas paradas que hizo para cargar combustible, el aviso meteorológico por los embates del huracán Emmy y la presunta escasa respuesta de la base aérea portuguesa ante el aviso de socorro.

El avión de la Fuerza Aérea venezolana hizo su primera parada en la ruta Caracas-Barcelona en las islas Bermudas, en el mar Caribe, y era pilotado por el teniente coronel Manuel Vásquez Ocanto, quien también era comandante del Grupo VI de la Fuerza Aérea del estado Aragua.

La tripulación también estaba conformada por dos ingenieros de vuelo, que se encargaban de la vigilancia del funcionamiento del vuelo y de la medición de motores, combustible y otros parámetros.

Tras despegar de Bermudas, el avión se dirigió a su siguiente parada: el Aeropuerto Militar de la isla Terceira, ubicado en el archipiélago de Azores, en Portugal. Durante su aproximación a este destino, la tripulación habría calculado que aterrizarían antes del paso del huracán Emmy, de acuerdo a los datos de un centro meteorológico cercano. 

Una hora antes del aterrizaje, el capitán pidió permiso a la torre de control de Portugal para aterrizar; pero el permiso le fue denegado por presuntamente estar varios metros desviado de su ruta, sumado a las ráfagas de viento de más de 120 kilómetros por hora causadas por el huracán Emmy.

Luego de varios intentos para aterrizar, la aeronave se estrelló contra una colina a 20 kilómetros de su destino. 

Tragedia de Azores: 48 años del accidente aéreo que silenció el Orfeón de la UCV
Foto: cortesía

Responsables de la tragedia de Azores

48 años después de la tragedia de Azores, aún ningún organismo o institución asume la responsabilidad del accidente. 

El entonces presidente de Estados Unidos, Gerald Ford, responsabilizó a la Base Aérea de Lajes, sin embargo, no respondieron al señalamiento y, por el contrario, se ofrecieron a repatriar los cuerpos hacia Venezuela.

Por su parte, el gobierno de Carlos Andrés Pérez tampoco dictó responsabilidad sobre el accidente ni a la Fuerzas Armada venezolana ni a la torre de control de Portugal. Al llegar los cuerpos a Venezuela, fueron enterrados en el Cementerio Monumental del Este, en Caracas.