Zulia | Afinan detalles para la tradicional Bajada de La Chinita

25 de octubre, 2024 - 1:26 pm

Evelis Borjes | Foto: Archivo 800 noticias

Faltan pocas horas para la tradicional Bajada de la Virgen María, en su advocación de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá en Maracaibo, con ello inician las fiestas patronales 2024, las cuales tienen una duración de 40 días, hasta el próximo sábado 30 de noviembre que se realizará la Aurora de la Reina Morena.

La Basílica Santuario, ya está lista para recibir al menos 200 mil personas entre propios y visitantes para venerar a La Chinita, quien se reencontrará con su feligresía.

Para esta oportunidad se dispondrán de 20 mil sillas para que se sienten las personas a observar la bajada de la Santa Reliquia desde su nicho hasta el portico del templo, así lo dio a conocer el párroco rector Nedward Andrade.

Asmismo, Andrade explicó que ya todo esta listo para el inicio de las Fiestas Patronales en honor a La Chinita.

El párroco rector también hizo la invitación para este viernes 25, a las 5.00 de la tarde se realizará una misa para orar por el éxito de las celebraciones eclesiaticas en honor a la Campeona de la Salud.

Tras la eucaristia, saldrán los 21 grupos de las pastorales que hacen vida en la Basílica para entregar los pasquines, que son los programas de las fechas y procesiones de La Chinita.

Tradicional Bajada

Para este sábado 26 de octubre, a las 5.00 de la tarde iniciará la santa eucaristía en honor a la Bajada de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, la misma será oficiada por monseñor Enrique Pérez Lavado, arzobispo de Maturín.

Para este día, el manto que será utilizado por la santa reliquia está inspirado en la oración y la unión, este manto es una invitación a elevar nuestros corazones hacia lo divino y a fortalecer los lazos que nos unen como comunidad de fieles.

Una pieza confeccionada con esmero y devoción, representa un homenaje a la Virgen en el día de su bajada. Su diseño, de una elegancia sublime, evoca la silueta celestial de la Madre de Dios, adornada en el manto como estrella en el cielo nocturno, llevando un mundo que simboliza la humanidad que ella ampara. La base color blanco crema, símbolo de pureza y luz, se ve realzada cristales y bordados que, como estrellas en el firmamento, iluminan la obra.

Fue ofrendado por Familia Reverol Dávila y el diseñador caraqueño Julio Mora.