Escasez de materia prima encarece comidas rápidas
Aunque se ha regularizado la distribución de pan, los bachaqueros hacen de las suyas con los precios de la harina de maíz precocido y otros productos. Turistas están alarmados por los precios de las empanadas.
Dexcy Guédez
Los vendedores de comida rápida sufren a diario el aumento de precios en la materia prima. / Foto: DEXCY GUÉDEZ
SOL DE MARGARITA, 14 Ago, 2015 | La escasez de materia prima encarece los precios de las comidas informales y afecta las ventas de perrocalenteros, empanaderas, chicheros y otros trabajadores independientes que buscan el sustento en los cuatro puntos cardinales de Margarita.
Juan Carter, secretario general del Sindicato Único de Trabajadores Independientes y Conexos de la entidad, recalcó que no es posible que las empanaderas tengan que pagar hasta 3.000 bolívares por una paca de harina de maíz, mientras que al detal consiguen el kilo hasta en 250 bolívares con los bachaqueros del centro y del terminal de pasajeros de Porlamar.
Carter indicó que los 363 vendedores ambulantes de comidas rápidas afiliados, están sufriendo las mismas penurias para poder adquirir la materia prima, para lo cual deben dejar de trabajar al menos dos días a la semana, para poder hacer las colas para comprar.
En el caso de los vendedores de perros calientes y hamburguesas, deben madrugar todos los días para comprar hasta cuatro bolsas de pan, según sea el racionamiento que apliquen las panificadoras.
El representante sindical precisó que los vendedores de ese tipo de comidas en las avenidas 4 de Mayo, Santiago Mariño, calle El Hambre y en los alrededores del hotel Venetur Margarita, han establecido un precio único de 120 bolívares un perro caliente y las hamburguesas hasta 350 bolívares, de acuerdo con los adicionales que lleven.
Turistas alarmados
De acuerdo con Carter, los turistas son quienes más acuden a las comidas rápidas para saciar el hambre, pero muchos salen alarmados cuando se les informa que una empanada que antes costaba entre 10 y 15 bolívares, puede oscilar entre 70 y 100 bolívares, dependiendo del relleno.
"Los vendedores tienen que sacar sus ganancias y para eso tienen que subir los precios", apuntó el dirigente.
Destacó, que un desayuno con empanadas y refresco o malta, cuesta más que lo que gana un trabajador con salario mínimo.
Depresión por mala temporada
El representante de los trabajadores independientes subrayó que los 1.863 afiliados que trabajan con mercancía seca en el casco comercial de Porlamar, están sufriendo la depresión del Puerto Libre, ya que no cuentan con mercancía para vender durante la temporada de vacaciones escolares.
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