Carlos Simón Olmos, dirigente regional de AD
“En el año 92 por muchísimo menos que hoy dieron un golpe de Estado”
“Este país es inviable mientras esté en la presidencia Nicolás Maduro”.
Gráficas: Marcos Rivero
Gráficas: Marcos Rivero
El dirigente manifestó que la MUD debe reconocer que en la mesa de diálogo se cometieron errores, “aquel documento que se firmó y que se le dio vueltas para justificar lo injustificable fue un error. Explicarle a la gente con la verdad porque en este país no hay pendejos ya”. Sobre la aspiración de Carlos Andrés González, aunque reconoció no es un manojo de sonrisas, indicó que posee las cualidades indispensables para ser el próximo Gobernador de Trujillo
Yoerli Viloria/ECS.- EL DIARIO DE LOS ANDES, 22-12-2016Con la serenidad que lo caracteriza y que pocas veces deja traslucir una sonrisa pese a algunos chistes irónicos que de vez en cuando salen de su boca, Carlos Simón Olmos, secretario político del Comité Ejecutivo Seccional del tradicional partido Acción Democrática y rector del Instituto Universitario de Tecnología “Mario Briceño Iragorry”, indicó que Venezuela atraviesa una situación muy grave, “como nunca la ha habido en el país o cualquier otro del mundo, salvo en condiciones de guerra”.
¿Si tuviese que usar algún calificativo para caracterizar el momento histórico que atraviesa el país cuál sería?
“Brutalidad, fatalidad, calamidad, una situación catastrófica desde el punto de vista de la escasez e inaccesibilidad de los precios para todo el mundo, ningún país del mundo ha vivido esto. Estamos en un proceso de empobrecimiento y hay una amenaza de la viabilidad del país para convertirse en lo que llaman los expertos en un país fallido donde no existe norma, como la selva”.
Año 1992
“En el año 92, por muchísimo menos que lo que estamos viviendo nosotros, Hugo Chávez Frías y los que le acompañaron a él, dieron un golpe de Estado, un intento fallido y se plantearon sacar al presidente Carlos Andrés Pérez y no había ni la sombra de lo que estamos viviendo ahorita”.
Olmos resaltó que la situación actual que se vive en Venezuela justifica, y es plenamente legítimo, que el pueblo venezolano en su mayoría desee la renuncia del presidente Nicolás Maduro, “esto no es ningún escándalo, no hay que escandalizarse por eso, la diferencia con el año 92 es que nosotros queremos que se vaya democráticamente, con elecciones”.
Dictadura sin duda
Para el dirigente socialcristiano, el gobierno nacional es una dictadura “sin ninguna duda”, porque desconoce al Parlamento Nacional, tiene presos políticos y lo más grave es que se niega a someterse a una consulta popular, “cuando antes el Gobierno se jactaba de la cantidad de elecciones que hacía. De aquí para adelante debemos entender que estamos frente a una dictadura”.
El dirigente aseguró que si Nicolás Maduro no sale de la presidencia de la República, Venezuela va hacia un proceso de empobrecimiento inexorable, “hasta en las enfermedades más graves con el tratamiento hay expectativa de esperanza, y en la mayoría de los casos se produce una mejora, en el caso nuestro todos sabemos que estamos muy mal pero la probabilidad real es que vamos a estar peor porque no estamos tratando la enfermedad”.
¿Ante esa caracterización cómo debe actuar la oposición?
“Lo primero es no seguir haciendo política como si estuviésemos en un país normal, nosotros tenemos que plantearnos dos cosas: la restitución de la democracia y definitivamente la salida de Maduro como punto fundamental”.
¿Cuáles serían las acciones para alcanzar esas dos premisas por la vía democrática?
“Siento que la MUD ha jugado un extraordinario papel, en materia electoral tuvo un éxito inmenso al lograr compactar a la oposición y los resultados del pasado 6D, pero plantearse como meta restituir la democracia en Venezuela no lo puede hacer solo la MUD, ni los partidos políticos, ni siquiera los más grandes o los inmensos y buenos dirigentes. Esto tiene que ser un proceso que incorpore a la sociedad civil, tenemos que convocar a todo mundo. Esto tiene que ser una lucha cívica y no está ocurriendo así”.
Acotó que no está pidiendo que se desplacen los partidos, “jamás podrán desplazarse los partidos”, sino que la desde la MUD se promueva un gran frente más amplio nacional, “ésta es una responsabilidad de los políticos y precisamente son ellos los que deben convocar a la sociedad civil, a eso tenemos que llegar”.
¿Cómo convocar a la sociedad civil a un gran frente de lucha si después de lo que fue el llamado “diálogo” el pueblo mira con recelo al oficialismo y MUD por igual?
“Suscribo lo que dices, pero había que ir al diálogo, pero igualmente mantener una agenda de calle. Lo primero es definir un camino y hablarle a la gente con sinceridad, hay que reconocer que en la mesa de diálogo se cometieron errores, aquel documento que se firmó y que se le dio vueltas para justificar lo injustificable fue un error. Explicarle a la gente con la verdad porque en este país no hay pendejos ya”.
Hay quienes aseguran que Carlos Andrés González, candidato a la Gobernación de Trujillo por AD, es una figura difícil de vender en la calle por su falta de carisma popular, uno de los elementos por los que Hugo Chávez cautivó a su público y que desde entonces la mayoría de los venezolanos utiliza como referente sin reparar en otras cualidades ¿Cree que sería la candidatura más estratégica para la MUD?
“Claro que si, Carlos Andrés es un profesional joven que no tiene pasado negativo, no es perfecto como no lo es ninguno, hombre que sabemos a qué atenernos, no tiene posiciones ambivalentes. El carisma es una cosa importante en política, pero más importante es tener una persona auténtica, coherente y el carisma es algo que se hace en la medida que se va actuando. A Carlos Andrés Pérez le decían el ministro policía porque le tocó aplicar mano dura contra la subversión en su tiempo, y después llegó a ser un hombre sumamente carismático y llegó a la presidencia”.
MUD debe sincerarse
Olmos resaltó que lo primero que debe hacer la dirigencia de la Mesa de la Unidad Democrática es sincerarse, “no se ha sido sincero, es la verdad. Inclusive en las informaciones que se le daba a la gente con lo del diálogo se quería hacer ver que se estaba logrando lo que no se estaba logrando. La MUD tiene que redefinirse y definir un camino que no lo tiene en este momento, la gente se queja porque no sabe para dónde van a coger, esa es la verdad. Y para mi aquí solamente hay que discutir dos cosas, restituir la democracia y salida de Maduro”.
¿Si tuviese que usar algún calificativo para caracterizar el momento histórico que atraviesa el país cuál sería?
“Brutalidad, fatalidad, calamidad, una situación catastrófica desde el punto de vista de la escasez e inaccesibilidad de los precios para todo el mundo, ningún país del mundo ha vivido esto. Estamos en un proceso de empobrecimiento y hay una amenaza de la viabilidad del país para convertirse en lo que llaman los expertos en un país fallido donde no existe norma, como la selva”.
Año 1992
“En el año 92, por muchísimo menos que lo que estamos viviendo nosotros, Hugo Chávez Frías y los que le acompañaron a él, dieron un golpe de Estado, un intento fallido y se plantearon sacar al presidente Carlos Andrés Pérez y no había ni la sombra de lo que estamos viviendo ahorita”.
Olmos resaltó que la situación actual que se vive en Venezuela justifica, y es plenamente legítimo, que el pueblo venezolano en su mayoría desee la renuncia del presidente Nicolás Maduro, “esto no es ningún escándalo, no hay que escandalizarse por eso, la diferencia con el año 92 es que nosotros queremos que se vaya democráticamente, con elecciones”.
Dictadura sin duda
Para el dirigente socialcristiano, el gobierno nacional es una dictadura “sin ninguna duda”, porque desconoce al Parlamento Nacional, tiene presos políticos y lo más grave es que se niega a someterse a una consulta popular, “cuando antes el Gobierno se jactaba de la cantidad de elecciones que hacía. De aquí para adelante debemos entender que estamos frente a una dictadura”.
El dirigente aseguró que si Nicolás Maduro no sale de la presidencia de la República, Venezuela va hacia un proceso de empobrecimiento inexorable, “hasta en las enfermedades más graves con el tratamiento hay expectativa de esperanza, y en la mayoría de los casos se produce una mejora, en el caso nuestro todos sabemos que estamos muy mal pero la probabilidad real es que vamos a estar peor porque no estamos tratando la enfermedad”.
¿Ante esa caracterización cómo debe actuar la oposición?
“Lo primero es no seguir haciendo política como si estuviésemos en un país normal, nosotros tenemos que plantearnos dos cosas: la restitución de la democracia y definitivamente la salida de Maduro como punto fundamental”.
¿Cuáles serían las acciones para alcanzar esas dos premisas por la vía democrática?
“Siento que la MUD ha jugado un extraordinario papel, en materia electoral tuvo un éxito inmenso al lograr compactar a la oposición y los resultados del pasado 6D, pero plantearse como meta restituir la democracia en Venezuela no lo puede hacer solo la MUD, ni los partidos políticos, ni siquiera los más grandes o los inmensos y buenos dirigentes. Esto tiene que ser un proceso que incorpore a la sociedad civil, tenemos que convocar a todo mundo. Esto tiene que ser una lucha cívica y no está ocurriendo así”.
Acotó que no está pidiendo que se desplacen los partidos, “jamás podrán desplazarse los partidos”, sino que la desde la MUD se promueva un gran frente más amplio nacional, “ésta es una responsabilidad de los políticos y precisamente son ellos los que deben convocar a la sociedad civil, a eso tenemos que llegar”.
¿Cómo convocar a la sociedad civil a un gran frente de lucha si después de lo que fue el llamado “diálogo” el pueblo mira con recelo al oficialismo y MUD por igual?
“Suscribo lo que dices, pero había que ir al diálogo, pero igualmente mantener una agenda de calle. Lo primero es definir un camino y hablarle a la gente con sinceridad, hay que reconocer que en la mesa de diálogo se cometieron errores, aquel documento que se firmó y que se le dio vueltas para justificar lo injustificable fue un error. Explicarle a la gente con la verdad porque en este país no hay pendejos ya”.
Hay quienes aseguran que Carlos Andrés González, candidato a la Gobernación de Trujillo por AD, es una figura difícil de vender en la calle por su falta de carisma popular, uno de los elementos por los que Hugo Chávez cautivó a su público y que desde entonces la mayoría de los venezolanos utiliza como referente sin reparar en otras cualidades ¿Cree que sería la candidatura más estratégica para la MUD?
“Claro que si, Carlos Andrés es un profesional joven que no tiene pasado negativo, no es perfecto como no lo es ninguno, hombre que sabemos a qué atenernos, no tiene posiciones ambivalentes. El carisma es una cosa importante en política, pero más importante es tener una persona auténtica, coherente y el carisma es algo que se hace en la medida que se va actuando. A Carlos Andrés Pérez le decían el ministro policía porque le tocó aplicar mano dura contra la subversión en su tiempo, y después llegó a ser un hombre sumamente carismático y llegó a la presidencia”.
MUD debe sincerarse
Olmos resaltó que lo primero que debe hacer la dirigencia de la Mesa de la Unidad Democrática es sincerarse, “no se ha sido sincero, es la verdad. Inclusive en las informaciones que se le daba a la gente con lo del diálogo se quería hacer ver que se estaba logrando lo que no se estaba logrando. La MUD tiene que redefinirse y definir un camino que no lo tiene en este momento, la gente se queja porque no sabe para dónde van a coger, esa es la verdad. Y para mi aquí solamente hay que discutir dos cosas, restituir la democracia y salida de Maduro”.
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