Calzadilla: “Este es un proceso que no es auditable”
El secretario general del MPV indicó que crecen las dudas sobre el proceso de validación de las organizaciones políticas y habló de la posibilidad de que sea impugnado
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En Avanzada Progresista consideran que el proceso fue exitoso
Simón Calzadilla, secretario general del Movimiento Progresista de Venezuela, denunció que el proceso de renovación de las nóminas de los partidos es imposible de auditar debido a que el Consejo Nacional Electoral no les proporciona la información de quiénes fueron las personas que acudieron a ratificar su voluntad de permanecer en una organización con fines políticos.
“Este es un proceso que no es auditable. No tenemos un soporte de las personas, que registradas en el CNE, validaron nuestro partido. Esa información queda a la absoluta discreción de las rectoras del Poder Electoral, lo que es un hecho absolutamente grave. Las dudas sobre este proceso crecen y el convencimiento de que tenemos que denunciar e impugnar estas irregularidades”.
En Avanzada Progresista consideran, por el contrario, que el proceso fue exitoso. Luis Romero, secretario general del partido liderado por Henri Falcón, dijo que activaron la maquinaria en estados donde apenas comenzaban su actividad partidista. Dijo que durante la jornada debieron sortear obstáculos como las fallas en el servicio eléctrico, que las máquinas no fueran probadas antes de ser instaladas y que estuvieran ubicadas a la intemperie.
Los obstáculos en el oeste. Participar en el proceso de la validación de los partidos en el oeste de Caracas no fue una tarea fácil para los militantes de las organizaciones. En algunos lugares fueron puestos puntos rojos que confundían el proceso del CNE con alguna jornada del PSUV y en otros no había ni siquiera un toldo que sirviera para ubicar a los funcionarios del Poder Electoral.
Para poderse realizar el proceso en el punto de Parque Carabobo, el punto del CNE debió moverse hasta el módulo policial porque donde se instalaron originalmente fallaba el servicio eléctrico. Wilimener Chacón, coordinador juvenil de Avanzada Progresista, denunció que la data no estaba siendo transmitida en tiempo real y que los datos estaban siendo almacenados en un dispositivo de memoria externa.
También señaló que el color rojo del toldo confundía la jornada con alguna actividad del PSUV. Ante esta situación, decidieron improvisar un aviso para indicar que ahí se llevaba a cabo el proceso de validación.
En la plaza Diego Ibarra fue difícil ubicar a los funcionarios del CNE que realizaban la actividad.
Dos personas sentadas en una mesa con unas computadoras y una captahuellas, sin ninguna identificación y ubicadas en la parte inferior de la oficina principal del Poder Electoral, hacían pensar a los militantes de los partidos que ahí había un punto para la validación.
Luis Ponce, testigo principal por Avanzada Progresista, dijo que en ese punto la concurrencia fue mínima. Destacó que no hubo fallas ni retrasos con el servicio de Internet o el sistema biométrico.
Un escenario similar se observó en la plaza Juan Pablo López de la parroquia Altagracia. Tampoco había toldo y solo una de las funcionarias estaba identificada con un chaleco del CNE. Las representantes del Poder Electoral explicaban amablemente a los curiosos que su presencia en el lugar obedecía al inicio del proceso de la renovación de las nóminas de los partidos.
En la plaza de La Pastora hubo mayor organización, aunque los ausentes fueron los militantes de las organizaciones políticas. Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana estuvieron presentes en toda la jornada.
En el segundo día correspondiente al primer lote de organizaciones también estuvieron ausentes los partidos Organización Kilométrica de Venezuela, Movimiento para una Venezuela Responsable, Sostenible y Emprendedora, La Fuerza del Cambio y Vamos Adelante.
Para que los partidos no sean invalidados por el CNE deben alcanzar como mínimo el 0,5% del Registro Electoral en 12 estados.
Ensayo y error. El consultor político y experto electoral, Aníbal Sánchez, señaló que el primer fin de semana sirvió para demostrar la inviabilidad del proceso, debido a que las condiciones no están dadas para que los partidos cumplan con los requerimientos del organismo comicial.
“Mediante un ejercicio de campo se contabilizó que para alrededor de 21.500 electores los tiempos promedios estuvieron por encima de los dos minutos por elector (2'35") y con ese número escaso de máquinas, aún no participando los seis partidos convocados por jornada o fin de semana, no sería posible alcanzar el 0,5% del RE en al menos 12 entidades”.
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