Una nueva fecha para el Día de la Juventud
LA OPINIÓN DEAdolfo P. Salgueiro@apsalgueiro1
Termina otra semana más de tensiones, luchas y muerte en un escenario en el que Maduro & Co. se aferran al poder que ejercen, ya sin legitimidad alguna. Otros protagonizan los más denodados sacrificios procurando el regreso de la libertad, la institucionalidad y la recuperación de la paz, la tolerancia y la tranquilidad que siempre han sido y son características del gentilicio venezolano y –por qué no– de la harina precocida que se requiere para alimentar estómagos y sueños.
El promedio de una vida joven perdida diariamente es el saldo trágico de casi 90 jornadas de enfrentamientos reprimidos con creciente violencia por fuerzas del gobierno y la participación enigmática, pero cada vez más creciente de los tales “colectivos” cuyas cadenas de mando carecen de transparencia, pero todas parecen converger en Miraflores y sus alrededores. En todo caso, llegará el día cuando en La Haya se diluciden esos interrogantes.
Ni se diga del bochornoso incidente protagonizado por un corpulento oficial de la Guardia Nacional Bolivariana en perjuicio de Julio Borges cuyo video ha dado la vuelta al planeta.
El mundo al revés: el militar destinado al cuidado y seguridad de la Asamblea Nacional expulsando a empujones al presidente del cuerpo, que le viene a reclamar por qué sus subalternos han lastimado a unas diputadas apelando a la violencia física. Menos mal que hoy día no hay episodio que quede fuera del alcance de los “teléfonos inteligentes”. De no ser así jamás este columnista –ni nadie medianamente civilizado– hubiera podido ni imaginar ni creer que un oficial de alto rango de la Fuerza Armada Nacional pudiera incurrir en el grado de salvajismo y alienación que el video deja plasmado. Coronel Lugo, usted no es un soldadito de bajo rango, sino que reporta a altos niveles; le falta apenas un escalón para convertirse en el dosmilésimo general! Por esto y por otros pecadillos bien documentados es que La Haya le espera también si es que antes los tribunales de justicia de una Venezuela libre no le piden cuentas.
Tampoco olvidemos la “histórica sentencia” de la semana emitida por la Sala Constitucional de un llamado Tribunal Supremo que, sin la menor vergüenza, resolvió transferir potestades penales de la Fiscalía a la Defensoría del Pueblo saltándose a la torera la “mejor Constitución del mundo”. Sería bueno que vayan pensando a quién se las van a transferir cuando Tarek William Saab salte la talanquera como hizo la doctora Ortega Díaz. ¿Será a los colectivos?, ¿al PSUV? o ¿a las comunas? Ni dejemos tampoco de anticipar ni nos sorprendamos cuando el mismo grupo de “juristas” otorgue la razón al diputado Carreño, quien solicita antejuicio de mérito para la fiscal y que tambien pronto se declare la incapacidad mental de la señora (ojo: no la de Carreño). Será que se le olvidó a él que alguna vez proclamó a los cuatro vientos que un conocido sistema de televisión satelital para los hogares servía tambien para asomarse a espiar en la intimidad de los hogares? Desde entonces a la fecha este columnista, por prudencia y pudor, no ha vuelto a ponerse cariñoso con su esposa en el dormitorio donde tenemos el televisor por miedo a aparecer vaya a saber en qué ignotos laboratorios de “guerra sucia”. Y mientras esas sentencias demoran apenas horas en ser emitidasse sospecha que en las gavetas del mentado tribunal debe haber quedado traspapelado el caso de los diputados por Amazonas iniciado hace ya casi dos años. ¿Será por eso que hay magistrados “desaparecidos” en esa sala?
Al debutante canciller Moncada lo dejamos tranquilo esta semana de debut para que pueda ocuparse de llamar a santeros y exorcistasque le acondicionen su oficina. ¿Habrá encontrado olor a azufre como el que describió el comandante galáctico en su “histórico”discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre de 2006? Eso sí… por favor, no le ofrezca boxeo a quienes expresen disenso porque eso queda feo en un canciller que piensa que representa en el exterior a un pueblo, aunque ello solo sea un decir.
Como corolario a estas líneas, deseamos dar difusión a la iniciativa que nos hizo llegar un muy dilecto amigo. La misma consiste en reconocer como “Día de la Juventud” a alguna de las fechas del asesinato de los jóvenes modernos héroes de nuestra patria quienes, con igual valor y convicción que José Felix Ribas aquel 14 de febrero de 1814, acompañado por los estudiantes del Seminario y de la Universidad de Caracas, lograron imponerse a la tropa colonial profesional española de Morales en la memorable batalla de La Victoria. Ribas no murió en ese enfrentamiento sino que fue ejecutado después de ser vencido en Maturín en 1815 .La gesta de los muchachos de hoy es tan relevante como la de ayer para la recuperación de la República y por eso apoyamos entusiastamente la iniciativa.
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