Debate vicepresidencial: Harris propone regulación, Pence libre empresa
El Partido Demócrata busca controlar tanto la producción como la reproducción, mientras el Partido Republicano apuesta por una economía libre para resolver los problemas ambientales y laborales, de la mano de la defensa de la vida
El primer debate entre los candidatos a la Vicepresidencia de Estados Unidos concluyó con más respuestas que ataques personales, en comparación con los aspirantes a la Presidencia.
Lo más disputado al principio fue el abordaje del coronavirus. La candidata demócrata Kamala Harris increpó al vicepresidente Mike Pence por la demora en actuar por parte de la administración de Donald Trump.
El republicano contestó que el presidente de la nación declaró la prohibición de vuelos desde China, cuna del coronavirus desde finales de enero. Y Joe Biden se opuso, acusando que se trataba de xenofobia.
La moderadora preguntó entonces cómo sería la relación con China, si sería un rival o un aliado. Pence contestó que podrían jugar en la misma cancha pero con las reglas claras. Y afirmó que el Partido Comunista Chino es responsable de la propagación del virus.
También afirmó Pence que Biden es un «cheerleader» de China. Pues durante su gestión como vicepresidente de Barack Obama perdió 200 000 puestos de trabajo en el área de manufactura.
En contraste, señaló el vicepresidente Pence, con Trump aumentaron 500 000 puestos de trabajo de manufactura.
Sin embargo, con la cuarentena provocada por el coronavirus, bajó el empleo en la nación. Punto que Harris usó contra Pence.
Si bien se perdieron 22 millones de empleos, durante la pandemia, señaló Pence, ya se recuperaron 11,6 millones.
Y la administración Trump logró la aprobación del Congreso para financiar el programa de protección de pagos por un costo de 4 billones de dólares para subsanar la falta de ingresos en los hogares de EE.UU.
Pence aprovechó el ataque de su contraparte para denunciar la participación de Harris en la creación del Green New Deal, un pacto ambiental que lastimaría la industria nacional, aboliría los combustibles fósiles, prohibiría el fracking y lastimaría al corazón del país.
También destacó cómo Joe Biden dijo que no apoya dicho acuerdo. Pero en la página oficial de su campaña dice que sí. Entonces la moderadora intervino y pidió una explicación.
Harris insistió que no se opone al fracking y apoya la creación de empleos.
No obstante, anteriormente dijo públicamente ante la pregunta una ambientalista que ella está a favor de prohibir el fracking.
Pence tomó ventaja de la inconsistencia en el discurso y dijo que el plan económico de la dupla Biden-Harris significa más impuestos, más regulación, abolición de los combustibles fósiles y una rendición económica a China.
Esto implicaría imponer un nuevo acuerdo ecológico, aumentar los costos de energía en los hogares y aplastar los empleos estadounidenses.
En el plano ambiental, Harris se intentó posicionar como la candidata pro ciencia, cuando la moderadora destacó la intensificación de incendios en la costa Oeste y de la intensidad de los huracanes en los estados del golfo.
Pence apunta a la innovación para enfrentar cuestiones climáticas, Harris a la regulación y prohibición
Pence no se inmutó y respondió cómo la administración Trump redujo más CO2 que cualquier nación desarrollada a través de la innovación, no de la regulación y prohibición.
Sostuvo cómo los mercados libres, el gas natural y el fracking hacen más por el medio ambiente que los países firmantes de los acuerdos de París.
Citó también al Instituto Nacional de Oceanografía, que afirma que no hay más huracanes que hace 100 años.
La moderadora cortó el tiempo de Pence pero se pudo escuchar cómo este se refería como «alarmistas» a ciertos discursos ambientalistas. Luego de anunciar cómo Trump lanzó la ley al aire libre y logró agua más limpia para la nación como parte de su compromiso con el medio ambiente.
Harris en contraste es copatrocinadora del Green New Deal, que Pence acusa que incluye cargas de 2 billones de dólares para empresas estadounidenses.
En respuesta, la candidata demócrata intentó menospreciar el programa económico de Trump, alegando que los recortes de impuestos solo benefician al 1 % más rico de la población.
Pero Pence le contestó que en promedio la familia de cuatro integrantes ha ahorrado 2 000 dólares a nivel fiscal y ha aumentado 4 000 dólares en ingresos.
El vicepresidente señaló cómo el aspirante demócrata a la presidencia pretende derogar los recortes de impuestos de Trump.
Solo hubo un tema en el cual ambos candidatos actuaron de igual manera, ante la pregunta qué pasaría si el presidente no puede gobernar por problemas de salud.
Tanto Trump con 74 años como Biden con 78 cumplidos, cualquiera de los dos será el presidente más anciano en la historia y por tanto su salud es preocupante. Pero ninguno de los dos aspirantes contestó a esta inquietud.
Candidata demócrata afirma posición proaborto, el republicano provida
También hubo una pregunta que Kamala Harris no respondió y Pence lo señaló: ¿intervendrá el Partido Demócrata en la Corte Suprema ante la amenaza de una mayoría provida?
El temor entre los progresistas que el aborto pueda volver a ser ilegal con un fallo de la Corte Suprema se ha potenciado con la nominación de una juez provida.
Harris intentó mostrarse indignada ante la duda de no ser considerada una persona de fe por su posición proaborto, igual que Biden.
Confirmó su posición que la mujer debe ser libre de elegir sobre su cuerpo. Y pese a pretender mostrarse como la candidata pro-ciencia, no consideró cómo el aborto pone fin a los latidos del hijo, no de la madre, y por tanto la mujer que aborta no decide sobre su cuerpo sino el de su hijo.
En total contraposición, Pence usó sus minutos para la pregunta siguiente con el fin de afirmar su postura provida, de la cual mostró estar muy orgulloso.
Con ese tema se afirmó la postura de ambos partidos. Por un lado el Partido Demócrata mostró ser el que busca el control tanto de la producción como la reproducción, mientras el Partido Republicano apuesta por una economía libre para resolver los problemas ambientales y laborales, de la mano de la defensa de la vida.
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