Policía política intenta enjuiciar a otro miembro de la UNPACU por “receptación”
Aunque fue liberado este 5 de octubre, después de cinco horas de interrogatorio, el activista Elber Pérez Pérez podría ir a juicio por el supuesto delito de “receptación”.
MIAMI, Estados Unidos. – Bajo amenazas de ir a prisión fue liberado este 5 de octubre Elber Pérez Pérez, activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) y promotor de Cuba Decide. Poco antes el opositor había sido conducido en la patrulla número 482 hacia la segunda estación policial del municipio de Holguín y sometido a cinco horas de interrogatorios y amenazas.
Mediante una advertencia verbal, los oficiales le indicaron que debía presentarse al día siguiente, 6 de octubre, a la misma estación para rendir declaración.
El “encuentro” duró más de tres horas. Le impusieron una multa de 1000 pesos en CUP por el supuesto delito de “receptación” y le decomisaron varias varillas de acero propiedad del activista.
CubaNet contactó a Edgar Pérez, familiar de Elber, y también integrante del grupo opositor.
“Elber residía en Majibacoa, Las Tunas. Trasladó ese acero oxidado durante su mudanza hacia Holguín y no hay motivo para que se lo decomisen”, aseguró.
“Como se negó a pagar la multa y a firmar todos los papeles, lo quieren llevar a juicio. Todo es una fabricación de la Policía política”, afirmó Edgar.
En julio pasado, un opositor tunero y familiar de Elbert también fue detenido en medio de un operativo policial que el Ministerio del Interior llevó a cabo para evitar manifestaciones el día 26 de julio, una fecha celebrada por el régimen cubano.
Se trata de Ernesto Pérez Pérez, que ahora se encuentra en la prisión provincial de Las Tunas a la espera de juicio por los presuntos delitos de “receptación” y “resistencia” al arresto.
Un mes antes, en junio, Fernando González Vaillant y Roilán Zárraga Ferrer también fueron detenidos y están acusados de “receptación” por poseer diez libras de carne de pollo, destinadas al proyecto comunitario que mantiene la UNPACU en el reparto Altamira, en Santiago de Cuba.
Los dos opositores fueron detenidos junto a José Daniel Ferrer el primero de octubre de 2019. Cinco meses después, en febrero de 2020, fueron condenados a tres años y siete meses, y cuatro años y medio de privación de libertad, respectivamente.
Jesús Sánchez Romero es otro miembro del grupo opositor bajo proceso de investigación por el mismo delito. En mayo pasado, las autoridades le confiscaron varias mascarillas y paquetes de detergente, en medio de un allanamiento violento a su vivienda.
Según el líder de la UNPACU y uno de los principales promotores de Cuba Decide, José Daniel Ferrer, las acusaciones por el supuesto delito de receptación “están de moda” en medio de la grave crisis que vive el país. El opositor asegura que los cargos contra los miembros de su organización no tienen basamento legal puesto que ellos “no han incurrido en delito alguno”.
“Falsas y ridículas acusaciones, que tratan de justificar con cualquier pequeña cantidad de productos alimenticios u otros de primera necesidad. La intención es usar contra los opositores estas figuras delictivas para intentar contener y asustar a la población ante los graves problemas generados por las arbitrarias políticas de la dictadura”, sentenció Ferrer.
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