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Los babalawos, sacerdotes de la Santería cubana, alertan sobre el aumento de las “tensiones políticas” y la desobediencia en la isla, en las predicciones para 2021 que dieron a conocer este viernes.

Un “aumento de las tensiones políticas, sociales y religiosas que pueden llevar a un conflicto”, y del “desacato a las autoridades en sentido general”, son parte de los acontecimientos sociales previstos por los religiosos en sus “predicciones de Ifá para Cuba y el mundo”, conocida como la “Letra del Año”.

Asimismo, prevén “incumplimientos y rupturas de convenios”, y el “aumento en las pérdidas humanas como consecuencia de la emigración ilegal”.

Estos pronósticos se obtienen cada 31 de diciembre por un grupo de “sacerdotes de Ifá”, veteranos y prestigiosos babalawos de la Santería Cubana o Regla de Ocha, culto llegado a Cuba en el siglo XVI con los esclavos procedentes de África.

Fueron dados a conocer este viernes coincidiendo con la puesta en marcha en la isla de una profunda reforma económica, que quintuplicará el salario mínimo hasta 2.100 pesos cubanos, unos 87 dólares, pero que también incluye un sustancial incremento del precio de la canasta familiar y de los servicios básicos.

Sin hacer la menor referencia a esas medidas, que han llenado de incertidumbre a los cubanos, los yorubas recomiendan “elevar la planificación económica familiar para evitar pérdidas de dinero y deudas“, y llaman a la familia cubana a “inculcar” a sus hijos el “respeto” y “amor por el trabajo”.

El año 2021 estará gobernado por el orisha Olokun, divinidad que controla las profundidades del mar y que es venerado por su capacidad para brindar gran riqueza, salud y prosperidad a sus fieles.

Gobernará acompañado de Ochún, que en la sincretización cultural es identificado con la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona católica de Cuba.

La Letra del Año se realiza a partir del Oráculo de Ifá, un complejo y extenso sistema adivinatorio traído a América por los esclavos yoruba.

Esas predicciones son seguidas con atención por buena parte de la población cubana, practicantes de la Santería, el culto de origen africano más extendido en la isla, junto con la Regla Conga o Palomonte.