Condenan a piloto venezolano por ayudar a El Aissami a violar sanciones
Víctor Mones fue sentenciado a más de cuatro años de cárcel luego de admitir que ayudó al ministro chavista con transporte internacional en un avión privado
Fichas que rodean al chavismo van cayendo una a una. En un mismo día se dio a conocer el anuncio de extradición a Estados Unidos de Álex Saab, señalado como testaferro de Nicolás Maduro; y horas después circuló la información de que el piloto venezolano Víctor Mones fue sentenciado a más de cuatro año de prisión.
Mones ya había admitido ante un tribunal estadounidense su colaboración con Tareck El Aissami para burlar las sanciones impuestas por Estados Unidos. El Aissami hoy ostenta tres cargos distintos dentro del régimen y es señalado por enriquecerse gracias a una extensa red de lavado de dinero y narcotráfico.
Las palabras del juez que dictó la sentencia ratifican el problema en el que se metió el piloto venezolano, aliado de Tareck El Aissami. «Sabías que esto era lo incorrecto», fue la frase del juez Alvin Kenneth Hellerstein, según el informe de Joshua Goodman, periodista de Associated Press.
Camisa de once varas
El futuro del piloto venezolano era predecible desde que admitió su delito. Mones, creador de American Charter Services (ACS), con sede en Florida, se declaró culpable en noviembre de 2019. La agencia Reuters señala que había sido acusado —junto a El Aissami— por fiscales federales en el Distrito Sur de Nueva York de violar las sanciones bajo la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Foreign Narcotics Kingpin Designation Act).
“Víctor Mones Coro ha admitido que conspiró para eludir las sanciones estadounidenses con la finalidad de ayudar al exvicepresidente (ejecutivo) venezolano Tareck El Aissami (…) a obtener transporte internacional en un avión privado”, comunicó entonces el fiscal federal de Manhattan, Geoffrey Berman.
Adicional a lo que pasaba con Víctor Mones, el ministro chavista acumulaba otras acusaciones. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) lo incluyó en su lista de los más buscados por narcotráfico internacional y lavado de activos.
Los detalles de la decisión están en el sitio web del organismo estadounidense. «Él facilitó cargamentos de narcóticos desde Venezuela, incluyendo control de aviones que salieron de una base aérea venezolana y rutas de drogas mediante los puertos en Venezuela», dice el texto en referencia a El Aissami.
«En sus antiguas posiciones, él supervisó o fue dueño parcial de cargamentos de narcóticos de más de 1000 kilogramos desde Venezuela en múltiples ocasiones, incluyendo aquellos con México y Estados Unidos como destinos finales».
Samark José López Bello también está incluido en el comunicado como coconspirador de El Aissami. Por si fuera poco, el entonces gobierno de Donald Trump anunció una recompensa de 10 millones de dólares por información que llevara a la captura del entonces ministro de Industria y Producción Nacional.
El cómplice de Víctor Mones
La dictadura venezolana se ha dedicado durante dos décadas a negar todo tipo de acusaciones que perjudiquen su «gestión». Cuando el piloto Víctor Mones admitió su culpabilidad, Tareck El Aissami calificó el hecho como una «agresión infame, canallada del imperialismo».
Sin embargo, la realidad mostraba lo contrario. Dentro del caso surgió el nombre de Alejandro Marín, otro piloto venezolano que fue capturado en Miami en septiembre de 2020 y mantenía vínculos con el aliado de Tareck El Aissami.
Marín fue acusado en EE. UU. de falso testimonio según la información revelada por la periodista Maibort Petit al portal Infobae. En enero de 2018, el piloto firmó un acuerdo para actuar como fuente confidencial de la Agencia de Seguridad Nacional. Sin embargo, de manera deliberada, habría “falsificado, ocultado y encubierto hechos materiales usando trampas, planes y dispositivos como teléfonos celulares”.
Oriana Rivas
Periodista venezolana radicada en Buenos Aires. Investigación para las fuentes de política y economía. Especialista en plataformas digitales y redes sociales.
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