Adultos mayores están condenados a una muerte prematura ante paupérrima pensión
/ Foto: Cortesía (El Diario)

Los adultos mayores parecen condenados a una muerte prematura ante la más reciente medida del Gobierno de mantener el monto de la pensión en 130 bolívares, equivalentes a apenas cinco dólares. ¿Acaso busca el Ejecutivo desaparecer este beneficio?

El coordinador nacional del Comité de Derechos Humanos para la Defensa de los Pensionados, Jubilados y Adultos Mayores, Édgar Silva Herrera, aseguró que los adultos mayores pasan «por un proceso de exterminio» por parte del Estado.

Alegó que el pago de 5,25 dólares a una población de más de cinco millones de pensionados es un delito de lesa humanidad y un ataque sistemático por el que, desde hace varios años, ha denunciado las medidas implementadas por mandatario nacional Nicolás Maduro ante las instancias internacionales, según reseñó El Pitazo.

¿Desaparecerán las pensiones?

Indicó que el Estado ancló ilegalmente las pensiones al salario mínimo y, por lo tanto, estancan el sueldo para no aumentar el pago a jubilados y pensionados; por lo que si la situación no mejora las pensiones desaparecerán con el proceso de la inflación de manera definitiva.

“Han castigado con la mayor fuerza a la población adulta mayor que cotizó toda una vida para tener un retiro con bienestar e independencia financiera. Eso es parte de la dignidad del adulto mayor, no pedirle dinero a nadie y vivir de su propio esfuerzo. Hoy están condenados a una muerte adelantada, de exterminio y desaparición de la población”, precisó Silva en referencia a la ausencia de beneficios para esta población.

Adultos mayores desatendidos por el Estado

A criterio de Silva Herrera, los adultos mayores están completamente desatendidos sin atención médica ni farmacéutica, mientras que las bolsas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) y la asignación de bonos a través de la Plataforma Patria no solucionan la vida de un ciudadano, puesto que éstos no llegan a todos los pensionados y se constituyen en una asistencia discriminatoria e insuficiente.

«Esta población vive de la caridad y de la asistencia de familiares en el exterior, organizaciones no gubernamentales (ONG) que prestan ayuda humanitaria, al igual que de las iglesias que ofrecen servicios de alimentación y entrega de medicinas», señaló, lo que representa una violación cruda de los derechos de un adulto mayor que debería estar disfrutando la vida, pero la situación del país se lo niega generando carencias y que sean propensos a caer en depresión.

El defensor de los adultos mayores expresó que el mayor anhelo es luchar por un sistema de seguridad social que garantice la salud en el periodo de retiro laboral, pero también cuando el trabajador se encuentra activo. Por ello, consideró indispensable la unificación de todos los sectores laborales del país con el objetivo de doblegar al gobierno en su política perversa contra el sector laboral y en especial con la población mayor.