El mejor cachito de Caracas: estos son los ganadores
La segunda edición de este concurso convocó a 16 finalistas que compitieron en dos categorías: el tradicional cachito de jamón, que se eligió en cata a ciegas, y el cachito de autor, donde la creatividad debe conjugarse con la técnica
En la mañana de hoy 3 de mayo, 16 panaderos compitieron en la final del concurso El Cachito de Caracas 2023, que celebró su segunda edición y que premió 2 categorías: tradicional y de autor.
En la categoría cachito de jamón tradicional, que se evaluó en cata a ciegas por un jurado compuesto por maestros panaderos de distintas escuelas de cocina, triunfaron Chocolat Deli de la avenida Baralt, cuyo equipo comanda el joven panadero Samuel Correia; Panadería Pinto’s en La Florida y La Tazita, en Sebucán.
En la categoría cachito de autor, que consiste en que los participantes presenten propuestas con rellenos creativos, concepto e historia, ganaron la panadería Alicantina, en Las Mercedes; la propuesta artesanal Dolce Vero, de la panadera y pastelera Verónica Loggiodice y Chocolat Deli, en la avenida Baralt.
La Alicantina llamó a su cachito de autor «El Mediterráneo», y entre sus ingredientes tenía pavo, tomates seco, orégano, albahaca y aceitunas kalamata. La masa también fue intervenida con hierbas aromáticas y tomate seco, lo que le dio un atractivo color y aroma.
Dolce Vero, por su parte, hizo un homenaje a sus raíces italianas con «El Musiú». «Lo llamo así para celebrar a todos los señores inmigrantes que vinieron a trabajar por Venezuela», contó Vero durante la presentación. El relleno era similar al de los raviolis, con ricotta con perejil, tocineta con miel y nueces caramelizadas.
El tercer lugar fue el «Chino-venezolano», una especie de lumpia hecha cachito. Ese fue el concepto que buscó el equipo de Chocolat Deli que presentó un cachito con relleno de chopsuey con lomito, marinado con especias asiáticas, y envuelto en una lonja de jamón ahumado para que tampoco dejara de ser cachito.
Los participantes
Estas 16 panaderías fueron seleccionadas en catas a ciegas, en varias rondas preliminares en las que compitieron 64 propuestas. Lo interesante es que ninguno de los participantes de las jornadas semifinales sabían cuándo los organizadores del concurso, es decir Panificadora Pastelpanes, iba a comprar los cachitos que evaluarían distintos jueces para decidir los que irían a la gran final.
Pastelpanes es la creadora y organizadora del concurso desde su primera edición en 2022. Es un equipo joven, que en el caso del concurso, lo lideran Luis Rogelio Salcedo y Denys Salomón.
Para la final, los jueces se dividieron entre ambas categorías, que se evaluaron al mismo tiempo, para no influir mutuamente en el resultado. Los criterios para decidir los ganadores fueron presentación (que incluía el formado de la capa exterior del cachito), el aroma, la miga, el sabor y el relleno.
En la categoría de cachito tradicional, el jurado estuvo compuesto por Eric Martin, de la pastelería especializada en hojaldre Mémé; Juan Carlos Bruzual, del Iepan; El Capi Panadeiro; el neurogastrónomo Merlín Gessen, Miguel Fernández Silano, de Chef Campus Culinary Institute y los docentes de Panadería de los institutos Mariano Moreno y GAPP.
La evaluación del cachito de autor fue responsabilidad de los chefs Mercedes Oropeza de @unavainita, Francisco Abenante de La Casa Bistró, Víctor Moreno de Moreno Restaurante y Gabriel García Luis de Nola; de los periodistas especializados Giuliana Chiappe, directora de Bienmesabe, y Ronald Aristimuño, de @gastro.no.mia y de la profesora y barista Janina Pojan, conocida como @lacoffeeteacher.
Las 16 panaderías o emprendimientos artesanales panaderos que compitieron en la final fueron Santorini, Café Work Center, Bien Me Sabe (emprendimiento artesanal), Pan de Tata, Dolce Vero Ccs (emprendimiento artesanal), La Tazita, Concordeli, Ópera Deli, Chocolat Deli, Alicantina, La Flor de Altamira, Pinto’s, Symphony, Piu Dolce y Pastellus.(emprendimiento artesanal).
Los ganadores están obligados a mantener la calidad de sus cachitos durante todo el año. Los supervisores de Pastelpanes harán visitas sorpresa para comprobarlo. De no cumplir con este requisito, será retirado el premio y pasará a la siguiente panadería en el podio. Para ello, los jueces siempre escogen un cuarto ganador que es el sustituto y que permanece en reserva.
La final se celebró en la sede de Puerko’s, en El Paraíso y, además de este restaurante, los patrocinantes de El Cachito de Caracas fueron PastelPanes, Puyao`s Café, Plumrose, El Estímulo, Levadura Flesshman, Maltín Polar, Mémé, Araxi Burger, Pestana Caracas, Oro Café, Papicar Market, Chef Campus, Desahogo Marketing, Iepan, leche Campestre, El Bosque Bistró, Instituto Mariano Moreno, GAPP, Quesos Ananké, Rancilio, Federación Venezolana de Industriales del Pan, @unavainita, Alumware, Y a beber, Kami Burger y Bonaire Work Wear.
Además de celebrar al cachito como el desayuno o «comida rápida» de la panadería venezolana, Pastelpanes se propone con el concurso elevar el nivel de la panificación en el país, unir al gremio y formar a los participantes en distintas áreas. Para ello, desde enero, les ofrecen talleres y masterclasses relacionados con gastronomía y, en especial, con la panadería.
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