Las primeras sandalias aparecieron hace más de 75.000 años
Sandalias del Antiguo Egipto. Huellas fósiles halladas en las playas de Sudáfrica señalan que nuestros antepasados remotos ya usaban algún tipo de calzado similar a las chanclas.
Los zapatos más antiguos conocidos en Europa tienen alrededor de 6.000 años y en Sudáfrica se creía que las personas no comenzaron a utilizar calzado hasta hace unos 2.000 años. Pero los rastros de fósiles encontrados en tres superficies antiguas halladas en la costa del Cabo de Buena Esperanza han cambiado radicalmente esta idea.
Según estas nuevas evidencias, en plena Edad de Piedra (hace entre 75.000 y 150.000 años), los humanos que vivían en esa región ya usaban algún tipo de calzado para caminar por la playa, según revela una investigación del Instituto de Estudios Evolutivos de la Universidad de Wits.
Rocas muy afiladas
Todos suponíamos que esa gente habitualmente andaba descalza. Sin embargo, en aquella época la costa sur del Cabo tenía rocas muy afiladas. Tiene sentido que usaran calzado para protegerse. Hace cien mil años, una lesión en el pie podría haber sido fatal, apunta el doctor Bernhard Zipfel, autor principal del estudio.
El hecho no es menor. Porque estos hallazgos podrían significar que nuestra especie tenía capacidades cognitivas y prácticas complejas mucho antes de lo que se pensaba. La teoría de Zipfel y su equipo revela al menos tres sitios de huellas en la costa sur del Cabo que pueden haber sido creados por humanos calzados.
Una huella fósil encontrada en las playas del sur del Cabo de Buena Esperanza. Charles Helm.
Los científicos han utilizado un método de análisis conocido como icnología, que se centra en estudiar las huellas y los rastros fósiles, ayudando en la búsqueda de evidencias del uso de algún tipo de calzado. Las pruebas contundentes de qué tipos de zapatos usaban los antiguos homínidos son remotas, ya que el cuero y los materiales vegetales se habrían biodegradado.
Zipfel y sus compañeros consideraron la opción de buscar pistas en antiguas calzadas. Sin embargo, el registro global de sitios con huellas es escaso y apenas se han postulado cuatro yacimientos con más de 30.000 años de antigüedad. Todos ellos están situados en Europa occidental y uno es un lugar usado por los neandertales.
Así que optaron por abrir una vía secundaria basada en la evidencia arqueológica reciente de sandalias usadas por los san, los pueblos de cazadores-recolectores bosquimanos que hablan alguna de las lenguas joisanas que incorporan chasquidos y cliqueos.
Los investigadores improvisaron calzado primitivo y caminaron arriba y abajo por las mismas playas que pisaron los homínidos de la Edad de Piedra. Pasearon en diversas condiciones y pudieron estudiar sus huellas tanto en arena seca como mojada. Luego compararon los resultados con yacimientos arqueológicos de entre 70.000 y 150.000 años de antigüedad. Hubo correlaciones asombrosas, aseguran.
Unas chanclas primitivas
El doctor Bernhard Zipfel, que también es podólogo, cree que el tipo de calzado que usaban estos antepasados remotos eran lo que hoy en día conocemos como chanclas. Era importante que los zapatos que utilizaban resistieran las preocupaciones medioambientales, explica.
Aunque nuestra evidencia no es concluyente, estamos satisfechos con nuestros descubrimientos. Vale la pena señalar que los hallazgos de la investigación sugieren de forma firme que la región del sur de África ha sido un centro para el desarrollo de capacidades cognitivas y prácticas durante un largo período, concluye Zipfel.
La Vanguardia de España
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