Biden y Trump buscan impulso en la frontera para las elecciones
Los discursos de ambos fueron diametralmente opuestos. El expresidente republicano responsabilizó "a la incompetencia de Biden por la invasión mortal" en la frontera sur, mientras que el actual mandatario prefirió responsabilizar al Senado por la crisis
Texas se convirtió en el campo de duelo este 29 de febrero entre el expresidente Donald Trump y el actual mandatario Joe Biden, a menos de ocho meses de las presidenciales y a cinco días del Supermartes. La crisis migratoria, que no cesa en la frontera sur, se convirtió en un tema electoral bisagra.
Y es que 80 % de personas consultadas recientemente por Pew Research Center dice que el actual gobierno de Estados Unidos está haciendo un mal trabajo al respecto, incluido el 45% que dice que está haciendo un “muy mal” trabajo. Sólo 18 % dijo que la Administración demócrata está haciendo un “buen trabajo” al tratar con el gran número de migrantes.
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Biden anunció su visita a la frontera luego del respectivo anuncio de Trump. Por ende, fue visto como un gesto de competencia electoral y no como una preocupación genuina por la crisis. De hecho, en la agenda semanal publicada por la Casa Blanca antes del anuncio, no figuraba ese viaje. Este jueves, ambos estuvieron a unos 300 kilómetros de distancia desde donde pronunciaron discursos muy diferentes desde ubicaciones más que contrastantes.
Discursos opuestos
Trump apeló a la inseguridad y a la responsabilidad de la Administración Biden en lo que denominó “invasión” por los más de 2,4 millones de cruces registrados el año pasado. Una fórmula que podría servirle para ganar votos como ocurrió en las elecciones presidenciales del año 2016 y donde una de sus propuestas fue la construcción del muro fronterizo, el mismo que frenó el gobierno demócrata luego de prometer fronteras abiertas en la campaña del año 2020. Pero tales promesas se salieron de las manos.
Los discursos fueron diametralmente opuestos. El expresidente republicano mencionó el reciente asesinato de la estudiante Laken Riley por parte de un inmigrante que entró sin documentos al país y responsabilizó “a la incompetencia de Biden por la invasión mortal” de EE. UU. “Joe Biden nunca dirá el nombre de Laken Riley, pero nosotros lo diremos”, dijo desde Eagle Pass, Texas. Para Trump, “es como una guerra” que aseguró va a cambiar si llega de nuevo a la presidencia.
A unos 300 kilómetros, el actual presidente prefirió responsabilizar al Senado por no apoyar un proyecto de acuerdo migratorio que otorgaría más recursos al sistema. Biden habló de la crisis climática y trató de apelar a una supuesta unión con Trump, la cual llega en un momento de desesperada falta de popularidad y de urgencia por conseguir votos en los estados indecisos debido a que allí el exmandatario republicano le saca ventaja en cada uno de ellos, incluso por seis puntos de diferencia, según sondeos.
Eagle Pass vs Brownsville
Los lugares de la frontera que visitaron Biden y Trump también varían mucho uno del otro. En los últimos cinco días, la Patrulla Fronteriza en Eagle Pass detuvo a más de 2000 inmigrantes ilegales. En Brownsville, sólo hubo 46 detenciones, indicó Bill Melugin, corresponsal de Fox News en la frontera.
Por ese motivo, una de las críticas contra el presidente demócrata es su presencia en un sector que no refleja la verdadera crisis fronteriza. Justamente el lugar que visitó Biden fue cerrado semanas antes por el gobernador Greg Abbott con alambre de púas y agentes de la Guardia Nacional. Desde entonces los cruces disminuyeron. Eso, sin mencionar su caminar coreografiado que hacen dudar nuevamente sobre su desmejorado estado de salud.
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