El Miércoles Santo y el Nazareno, por María García de Fleury
Por María García de Fleury
La Semana Santa es un momento adecuado para cumplir con los cinco mandamientos de la Iglesia, el primero oir misa entera los domingos, segundo confesar los pecados mortales al menos una vez al año, tercero recibir el sacramento de la Eucaristía al menos por Pascua de Resurrección, cuarto abstenerse de comer carne y ayunar en los días miércoles de ceniza y Viernes Santo y quinto ayudar a la iglesia en sus necesidades.
Estos mandamientos de la iglesia de acuerdo al catecismo de la Iglesia Católica, tienen como objetivo garantizar a los fieles el mínimo indispensable en el espíritu de oración y de esfuerzo moral en el crecimiento en el amor a Dios y al prójimo, si queremos recibir dignamente a Jesús en la Sagrada Comunión durante la Pascua, necesitamos limpiar nuestra alma, especialmente de cualquier pecado mortal a través de Sacramento de la Penitencia.
La mayoría de las parroquias ofrecen horarios de confesión adicionales para la semana Santa pero generalmente cualquier sacerdote está disponible para escuchar la confesión.
Al Miércoles Santo hay quienes lo llaman miércoles de espías para conmemorar la traición de Judas quien fue ese día el que hizo un trato con el sumo sacerdote para traicionar a Jesús por 30 monedas de plata. Esto pone fin al período oficial de la Cuaresma, mañana jueves entramos en el santo trigo, los tres grandes días litúrgicos, Jueves Santo, Viernes Santo, y Domingo de Resurrección.
El Miércoles Santo se realiza la procesión de El Nazareno, una de las tradiciones más representativas de la Semana Santa en Venezuela, la imagen de Jesús con la cruz a cuestas y vestido de morado realiza un recorrido metafórico hacia el Calvario seguido por miles de feligreses, muchos de ellos vestidos del mismo color.
El Nazareno no es otro sino Jesús de Nazaret a quien la gente lo llama el hombre que vivía en Nazaret, el Nazareno. La figura del Nazareno representa la pasión de Cristo y con él a toda la humanidad que está sufriendo, que tiene dolor, con toda la pasión de la humanidad, recuerda que Cristo como hombre conoció el dolor, conoció la angustia las preocupaciones , los desvelos. Cristo vivió la realidad del mundo y venció todos los sufrimientos porque vivió de acuerdo a lo que era la voluntad de Dios para él.
El Nazareno es Dios en la persona de Jesús que busca acercarse a cada uno de nosotros para darnos apoyo ayuda y hacerse solidario, Jesús Nazareno camina con la cruz a cuestas indicando que es un dios activo, cercano a las personas, los fieles peregrinamos junto con él caminando por la vida, pues sabemos que los cristianos no somos discípulos de un sistema filosófico y menos de un sistema ideológico, los cristianos somos hombres y mujeres que hemos tenido un encuentro personal con Cristo en la fe.
Caminar juntos en procesión habla de la unión en la fe, en la solidaridad, en la esperanza, en un futuro mejor. El Nazareno en actitud de caminar indica que en el camino de la vida diaria podemos encontrar a Dios aún cuando estemos rodeados de problemas y dificultades, lo importante es ponernos en camino pedir la ayuda de Dios con la certeza de que con Dios ¡Siempre ganamos!
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