Teniente Igbert Marín es sometido a otro proceso judicial por «conspiración de La Viñeta»
Familiares del teniente coronel Igbert Marín Chaparro aseguran que la audiencia de presentación se realizó en la sede del Dgcim Boleíta, de noche y se le impidió comunicarse o juramentar a sus abogados de confianza. El militar fue trasladado al Internado Judicial El Rodeo I, ubicado cerca de Guatire, estado Miranda. Su hermana afirmó que está «visiblemente más delgado» y hace días presentó una crisis hipertensiva
Los familiares del teniente coronel (Ej.) Igbert Marín Chaparro denunciaron este miércoles 6 que el militar está siendo sometido a un nuevo proceso judicial por su presunta vinculación a la «conspiración de La Viñeta», una supuesta operación para atentar contra el gobernante Nicolás Maduro.
En un video a través de sus redes sociales, los familiares del teniente coronel del Ejército recordaron que desde el 24 de octubre de 2023 podía optar a medidas de redención de pena, según estableció el juez de ejecución.
Igbert Marín Chaparro fue ser sentenciado en diciembre de 2020 –junto a otros tres tenientes coroneles– a cumplir siete años y seis meses de prisión por los delitos de instigación a la rebelión y contra el decoro militar. El pasado 2 de marzo cumplió seis años detenido.
«Sin embargo, en días recientes Igbert fue imputado por nuevos delitos con penas de hasta 30 años de prisión. Esto ocurrió en una audiencia sorpresiva de noche, en la misma sede de la Dgcim con la imposición de un defensor público, negándole, pese a su solicitud, la presencia de sus abogados de confianza», aseveró su hermana Ignell Marín.
La acusación, señalaron sus familiares, corresponde a su supuesto vínculo con la «conspiración de La Viñeta», como las autoridades denominaron a una operación desmantelada en mayo de 2023 para asesinar a Maduro y atentar contra el ministro de Defensa, general en Jefe Vladimir Padrino López, dentro de la residencia oficial de La Viñeta, ubicada en Fuerte Tiuna, la principal instalación militar del país.
Ignell Marín dijo que esta acusación se hizo «valiéndose de evidencias falsas y amañadas», y como una «confabulación para impedir lo que era su inminente libertad y perpetuar su ya injusta prisión».
«Mi hermano niega estas acusaciones, y es que es absurdo pensar que él, desde una cárcel de máxima seguridad, pueda violar los estrictos controles que ahí imperan y participar en acciones de esta naturaleza», recalcó.
Además, la hermana del preso político se refirió a su traslado de la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Mlitar (Dgcim) Boleíta al Internado Judicial El Rodeo I, ubicado cerca de Guatire, estado Miranda. Explicó que fue despojado de sus pertenencias y a toda la familia se le prohibió entregarle insumos básicos.
Ignell Marín afirmó que su hermano está «visiblemente más delgado» y hace días presentó una crisis hipertensiva, por lo que temen que su condición se agrave debido a que no hay centros de salud cercanos a los que pueda ser trasladado.
«Está en condiciones infrahumanas (…) Lo mantienen encerrado en una celda insalubre donde apenas hay una letrina. No tiene agua potable y no le han permitido recibir el sol. Las escasas porciones de alimento que recibe en su celda no cubren sus necesidades. Le han negado la visita de sus abogados y no le permiten la comunicación con sus hijos», detalló.
Marín también comentó que en las dos visitas que se le han permitido apenas ha contado con 20 minutos para conversar con su hermano, con vidrios y una reja de por medio. «Para llegar a ese lugar fui encapuchada durante una parte del trayecto por funcionarios que en todo momento cubrían sus rostros con pasamontañas».
Esta situación, refirió, imposibilita a sus padres de poder cumplir con la visita. «Las torturas psicológicas a las que él está siendo sometido también afectan a nuestra familia, pues estas vejaciones están generando profundos daños que nos mantienen en un estado de angustia permanente».
No hay comentarios:
Publicar un comentario