Pentecostés, inicia la cosecha espiritual, por María García de Fleury
800 Noticias | Maholy Meneses
La Pascua es el domingo más importante del año litúrgico y el segundo domingo más importante es Pentecostés. En el Antiguo Testamento era la fiesta de la cosecha y posteriormente los israelitas las unieron a la alianza en el monte Sinaí cincuenta días después de la salida de Egipto.
La palabra Pentecostés significa quincuagésimo, hace alusión a los cincuenta días que transcurren desde la Pascua hasta esta celebración. En Pentecostés los cristianos tenemos la oportunidad de vivir intensamente la realidad existente entre la resurrección de Cristo, su ascensión y la venida del Espíritu Santo.
Es una festividad sagrada que conmemora el descenso del Espíritu Santo sobre los apóstoles y la Virgen, marca el nacimiento de la Iglesia y representa el cumplimiento de la promesa de Cristo después de su resurrección. Al final del Evangelio de San Lucas en el capítulo 24 a partir del versículo 44 se señala que Jesús después de resucitar le dijo a los apóstoles «todo esto se los había dicho cuando estaba todavía con ustedes tenía que cumplirse todo lo que está escrito en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos referente a mí, todo esto estaba escrito los padecimientos del Mesías y su resurrección de entre los muertos al tercer día, luego debe proclamarse en su nombre el arrepentimiento y el perdón de los pecados comenzando por Jerusalén y yendo después a todas las naciones invitándolas a que se convierten, ustedes son testigos de todo esto ahora yo voy a enviar sobre ustedes lo que mi padre prometió permanezcan pues en la ciudad hasta que sean revestidos de la fuerza que viene de arriba».
Amigos en el calendario judío una de las tres grandes fiestas anuales era Pentecostés y lo asociaban con la cosecha de cebada como aparece en el capítulo 23 del éxodo, ahora con la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles lo que los judíos habían celebrado como la provisión de Dios para sus necesidades físicas adquiere un significado completamente nuevo, vincula la cosecha física de los cultivos con su contraparte espiritual en la vida de las personas, ese día de Pentecostés después de la resurrección y ascensión de Cristo marcó la inauguración de la cosecha espiritual global.
Cuando el Espíritu Santo bajó sobre los apóstoles en forma de lengua de fuego amaneció la siguiente fase de la historia de la salvación, ese día Pedro salió a predicar explicando lo que les había sucedido cuando el Espíritu Santo vino sobre ellos, no predicó acerca del Espíritu sino acerca de Jesús como el Cristo y se convirtieron más de 3.000 personas pidiendo el bautismo la respuesta de la multitud a su sermón fue una prueba viviente de que la época del nuevo pacto iniciado mediante la obra consumada de Cristo en realidad había comenzado, era el inicio de la iglesia que Cristo había fundado.
El Espíritu Santo siempre estará presente entre nosotros, inspirando nuestra vida, renovando nuestro interior impulsando a ser testigos en medio de la realidad que nos corresponde vivir, porque es el Espíritu de Dios y con Dios siempre ganamos.
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