“Eutimia”: el equilibrio perfecto entre la euforia y la tristeza
La eutimia, según Plutarco, implicaba una tranquilidad interna que permitía al individuo mantener su serenidad independientemente de las circunstancias externas, integrándose así como un componente esencial del bienestar
La palabra “eutimia” proviene del griego “eu-” (bueno) y “thymos” (ánimo o espíritu), y se refiere a un estado de ánimo estable, sin fluctuaciones extremas de euforia o tristeza.
En el ámbito de la psicología y la psiquiatría, se considera una meta ideal: un estado emocional equilibrado donde la persona experimenta calma y bienestar sin perder contacto con la realidad.
La eutimia se ha convertido en un concepto clave en el tratamiento de trastornos afectivos, especialmente en trastorno bipolar, y también en un pilar fundamental del bienestar psicológico en la vida cotidiana.
¿Qué significa realmente la eutimia, cómo se diferencia de otros estados de ánimo, su relevancia en la psiquiatría y la psicología, cuáles son las estrategias para alcanzarla y mantenerla?
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Equilibrio que marca la diferencia
Nos adentraremos en cómo este equilibrio puede marcar la diferencia entre un estado de sufrimiento emocional y uno de paz mental.
El diccionario médico de la Universidad de Navarra define Eutimia de este modo: “Término con que se designan los estados de ánimo o humor placenteros, de sosiego y de paz”.
Eutimia: el origen del concepto
El término eutimia tiene sus raíces en la filosofía griega antigua, específicamente en el pensamiento de Demócrito, quien utilizaba la palabra para describir un estado de satisfacción interna y paz mental.
Para Demócrito, la eutimia era un ideal ético que permitía al individuo vivir en equilibrio, libre de angustias y sin verse atrapado por emociones extremas. En este contexto, se consideraba que alcanzar la eutimia era una forma de acercarse a la vida virtuosa, guiada por la razón y alejada de excesos emocionales.
Más adelante, la idea fue adoptada y reinterpretada por filósofos estoicos como Séneca y Plutarco, quienes la vincularon con la templanza y la moderación. Según Séneca, la eutimia era un estado de ánimo deseable que surgía cuando la mente alcanzaba un equilibrio, sin dejarse afectar por los altibajos de la vida.
Para Plutarco, además, la eutimia implicaba una tranquilidad interna que permitía al individuo mantener su serenidad independientemente de las circunstancias externas, integrándose así como un componente esencial del bienestar.
Con el tiempo, el término eutimia se adaptó en el ámbito médico y psicológico moderno para describir un estado de ánimo estable y libre de perturbaciones, especialmente en el tratamiento de trastornos afectivos.
En la psiquiatría contemporánea, se utiliza para referirse al estado de equilibrio emocional que permite a las personas con trastorno bipolar, por ejemplo, funcionar de manera equilibrada y sin episodios de manía o depresión. Este uso refleja una adaptación del concepto clásico al contexto de la salud mental, en el que la eutimia se considera un objetivo terapéutico.
Finalmente, en la psicología moderna, la eutimia ha ampliado su sentido para abarcar un estado general de bienestar emocional en el que la persona experimenta un rango saludable de emociones sin que estas la dominen o desequilibren. Este enfoque actual recupera el ideal griego de equilibrio emocional, aplicándolo a las técnicas de salud mental y bienestar que buscan fortalecer la resiliencia y la adaptación positiva.
Eutimia vs. otros estados de ánimo
Para comprender mejor la eutimia, es útil compararla con otros estados de ánimo:
Euforia: Un estado de ánimo elevado que, aunque puede ser placentero, en exceso puede llevar a la impulsividad y a la falta de control. La eutimia se diferencia de la euforia en que no es extrema ni eufórica, sino un equilibrio entre alegría y serenidad.
Depresión: La depresión implica tristeza, desesperanza y falta de energía. En cambio, la eutimia es un estado estable y funcional donde no se experimentan los síntomas debilitantes de la depresión.
Distimia: Trastorno caracterizado por una tristeza crónica de baja intensidad. La eutimia, en contraste, representa un estado de ánimo más equilibrado y menos afectado por la melancolía constante de la distimia.
Disforia: Un estado de ánimo incómodo o desagradable que puede aparecer en trastornos de ansiedad o depresión. La eutimia es la antítesis de la disforia, ya que representa estabilidad y tranquilidad.
La eutimia, entonces, no es un “punto medio” emocional, sino un equilibrio activo en el cual la persona se siente en paz y en control de su vida emocional, evitando los extremos que alteran la calidad de vida.
Prácticas y terapias para alcanzar la eutimia
Mantener la eutimia puede ser puede convertirse en algo imposible, sobre todo en la vida que llevamos, llena de estímulos y situaciones estresantes. Sin embargo, existen prácticas y terapias que promueven la estabilidad emocional y ayudan a alcanzar la eutimia:
Terapia Cognitivo-Conductual (TCC): La TCC es eficaz para gestionar las emociones y evitar respuestas extremas. A través de esta terapia, los pacientes aprenden a identificar pensamientos distorsionados y reemplazarlos por ideas más equilibradas.
Mindfulness y meditación: Estas prácticas promueven una atención plena que permite vivir el momento presente sin dejarse arrastrar por pensamientos y emociones negativas. La meditación ayuda a mantener la calma y la claridad, condiciones necesarias para la eutimia.
Ejercicio regular: La actividad física regula los niveles de endorfinas, ayudando a mantener un estado de ánimo estable. El ejercicio es un regulador natural que puede contribuir a la eutimia al mejorar el bienestar general.
Terapia de aceptación y compromiso (ACT): Esta terapia promueve la aceptación de las emociones sin juzgarlas ni rechazarlas. La ACT permite que las personas experimenten sus emociones sin dejarlas dominar su vida, lo cual facilita un estado de eutimia.
Apoyo social y redes de apoyo: La interacción social positiva contribuye al bienestar emocional. Mantener relaciones sanas y buscar apoyo en amigos y familiares ayuda a conservar el equilibrio emocional.
Con información de Muy Interesante
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