Diego Armando Maradona: pedofilia, violencia y adicciones
Considerado uno de los mejores futbolistas, el argentino tenía un amplio historial de faltas morales y legales
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La muerte del exfutbolista argentino Diego Armando Maradona sacudió al mundo del deporte. El presidente de Argentina, Alberto Fernández, decretó en ese entonces tres días de duelo nacional por el fallecimiento del “Pelusa”, quien, fuera de la cancha, tuvo una conducta que siempre dejó mucho que desear.
A pesar de su enorme influencia debido a sus logros deportivos, Maradona distaba mucho de ser un ejemplo para los jóvenes que aspiraban a convertirse en estrellas del balompié. Su adicción a sustancias ilegales fue un problema que lo acompañó hasta el final de sus días.
Además de su conocida adicción al alcohol y la cocaína, cuyo consumo fue captado en plena cancha durante el Mundial de Rusia 2018, acusaciones más graves marcaron su vida privada. Hace varios años, se difundieron imágenes del exjugador argentino abrazando a dos mujeres desnudas que, según se aprecia, parecían menores de edad.
Las mismas fotografías resurgieron en junio de este año, luego de que el grupo Anonymous las hiciera públicas y acusara abiertamente a Maradona de pedofilia. El abogado del exfutbolista, Matías Morla, defendió a su cliente argumentando que las fotos eran de años atrás, cuando él se encontraba en Cuba, una explicación que no negaba los hechos.
Cuba era uno de los destinos preferidos de Maradona. Aunque no solía posar frecuentemente en las playas, las polémicas imágenes y su cercanía con figuras del régimen alimentaron rumores sobre posibles vínculos con la explotación sexual infantil en la isla.
Cuba es, lamentablemente, uno de los principales destinos para el turismo sexual infantil. Aunque las autoridades gubernamentales no lo reconocen, es un “secreto a voces” que ha sido documentado en varios reportajes de la prensa extranjera.
Un reportaje del diario español El País, publicado en 2018, incluyó testimonios de jineteras —como se conoce en Cuba a las mujeres que ejercen la prostitución con turistas—. Según las entrevistadas, la edad promedio para iniciarse en el trabajo sexual en la isla era de apenas 10 años.
Por ello, no sorprenden las constantes visitas de Maradona a Cuba, donde mantenía una estrecha relación con el líder Fidel Castro, quien le brindaba todo tipo de facilidades durante su estancia.
Una de esas relaciones con menores de edad se dio a conocer en 2019, cuando el cubano Santiago Lara interpuso una demanda por paternidad contra Maradona.
Aunque al final del proceso Lara nunca fue reconocido, se llevó a cabo porque existía la posibilidad de que Maradona fuera su padre, lo que significa que tuvo intimidad con la madre Natalia Garat, a pesar de que ella era menor de edad en el momento de su concepción.
A las adicciones y la pedofilia, se suman las acusaciones de violencia familiar, desatadas luego de que se diera a conocer un video en el que Maradona empuja y golpea en las manos a su esposa, Rocío Oliva, hasta que ella deja de grabar.
El exfutbolista se defendió diciendo que él “nunca le había levantado la mano” y que solo le golpeó el teléfono y ya, sin embargo, no hay pruebas de ello, pues la grabación se corta y no hay garantía de que no siguiera golpeándola.
El matrimonio terminó cinco años después del escándalo y Oliva denunciaría entonces el alcoholismo de Maradona y las conductas violentas que ello traía consigo.
La paternidad irresponsable fue otra de las faltas de Maradona. El Pelusa dejó solo cinco hijos legalmente reconocidos: Dalma, Giannina, Diego Junior, Jana y Diego Fernando. No obstante, dos de ellos tuvieron que enfrentar procesos judiciales para que él se hiciera cargo como padre biológico y uno de ellos ya contaba con 29 años cuando fue reconocido.
Además de ello, enfrentó otros tres procesos judiciales —todos en Cuba—, donde ninguno de los demandantes obtuvo el apellido por veredicto del tribunal, por lo que podría ser mayor el número de hijoa concebidos y no reconocidos por el campeón mundial de 1986.
Ahora que el presidente Fernández declaró tres días de luto nacional, las reacciones de indignación de los usuarios en redes sociales no se hicieron esperar, de mujeres y colectivos feministas que buscan promover la verdadera imagen del exfutbolista, en un país que sufre en promedio un feminicidio al día y que idolatra públicamente a un abusador violento y pedófilo.
Aunque el debate sobre separar “la obra del artista” —en este caso la carrera del deportista—, surge cada vez que una celebridad enfrenta cargos de cualquier tipo, lo cierto es que en el caso de Maradona no se trata de meras “especulaciones” y la admiración de un personaje con conductas violentas y adicciones podría enviar un mensaje erróneo, sobre todo a las generaciones más jóvenes.
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