El hijo fue al concesionario, volvió con su padre y le dijo: "Me ofrecieron 10.000 dólares porque parece muy usado". El padre dijo: "Llévalo a una casa de empeño". El hijo fue a la casa de empeño, regresó y dijo: "Sólo me ofrecieron 1.000 dólares porque dicen que es demasiado viejo". Finalmente, el padre pidió a su hijo que llevara el coche a un club de coches clásicos y lo mostrara allí. El hijo llevó el auto al club, regresó y dijo: "¡Algunas personas en el club me ofrecieron $100,000! Porque es un auto muy raro y buscado entre los miembros".
El padre le dijo a su hijo: "Quería que entendieras que el lugar correcto te aprecia de la manera correcta. Si no te valoran, no te enfades, sólo significa que estás en el lugar equivocado. Esos Quienes conocen tu valor son los que realmente te aprecian. ¡Nunca te quedes en un lugar donde no reconocen tu valor!
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