Diócesis rememoró muerte y pasión de Cristo en las calles San Cristóbal
Con la cruz a cuestas ciudadanos de San Cristóbal siguieron el viacrucis por diversos sectores de la capital tachirense, en conmemoración de la entrega, crucifixión y sepultura de Cristo.
En la procesión religiosa se hizo una parada en la sede de Diario La Nación donde se rememoró la novena estación, cuando Jesús cae por tercera vez y la muchedumbre observa con expectación si el hijo de Dios tiene fuerzas para continuar su calvario.
José Lucio León, párroco de la iglesia Nuestra Señora de Coromoto y arciprestazgo de San Pedro, recitó dicha estación de la pasión y muerte de Jesucristo en compañía de los ciudadanos que con oraciones, cánticos y la ya tradicional caminata dramatizaron el recorrido.
El viacrucis comenzó en el atrio de la iglesia Divino Redentor donde el grupo juvenil de la parroquia escenificó la primera estación, cuando Jesús es entregado, el público tuvo la oportunidad de interactuar. Luego en el Hospital Oncológico se hizo una parada para orar por los enfermos del mundo, que estuvo dirigida por el monseñor Mario Moronta, obispo de la Diócesis de San Cristóbal; además, se hizo entrega de unos medicamentos para la institución.
A lo largo del camino la cruz ha pasó por las manos de los niños, los jóvenes, adultos, los periodistas, entre otros.
La procesión continuó por la prolongación de la 5ta. Avenida y al llegar al Viaducto Viejo se pasó en silencio para recordar a los caídos que en los años 70 y 80 fallecieron en la imponente estructura. Orar por los difuntos ha sido uno de los hitos en este viacrucis como parte del llamado hecho por el papa Francisco en este el Año de la Misericordia.
En la Catedral, punto final del viacrusis, se espera pasar por la puerta santa para que las personas estén gracia ganen la indulgencia y la jornada terminará con la eucaristía a cargo del monseñor Mario Moronta en compañía de los sacerdotes de la Diócesis.
(Héctor Yepes / Diario La Nación)
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