Atención médica bajo de una mata en Altagracia
Llevan ya tres semanas pasando consultas en la plaza del pueblo.
La comunidad exige respuesta de las autoridades regionales y locales.
La comunidad exige respuesta de las autoridades regionales y locales.
Karla Marval Esteves | @kmarval
En el Consultorio Popular Rural Tipo II de Altagracia solo hacen toma de signos vitales a los pacientes. / Foto: YULIANNYS GONZÁLEZ
SOL DE MARGARITA, 16 Abr, 2016 | Debido al continuo ataque de la delincuencia al Consultorio Popular Rural Tipo II de Altagracia, personal médico y de enfermería cumple las jornadas de atención a la comunidad en una plaza frente al centro asistencial, cobijados por los árboles.
La falta de electricidad por causa del robo del cableado eléctrico -que es el cuarto en lo que va de año-, la ausencia del servicio de agua, aunado a las malas condiciones del ambulatorio obligaron a los cuatro médicos y personal de enfermería que allí laboran, así como también a la trabajadora social, a tomar las calles.
Mientras un médico pasa consultas sentado en un banco de la plaza, con un tensiómetro y algunos implementos, los otros recorren esta comunidad del municipio Gómez para llevar algo de bienestar a los vecinos con solo alguna prescripción médica, pues no tienen medicamentos para darles.
Francia Millán, residente de la comunidad, aguardaba sentada en un banco de concreto, junto a su hija embarazada por la consulta del médico cirujano José Daniel Romero, pero la incomodidad por ser vista por los vecinos y transeúntes era visible. Esta mujer expresó su indignación por tener que recibir ella y su hija atención en medio de una plaza, bajo la mirada de extraños.
Para Millán, como para otros pacientes, es denigrante tener que acudir a una consulta debajo de una mata en plena plaza, cuando la solución se encuentra a la mano de las autoridades regionales y locales.
Para los pacientes y residentes de esta zona, claramente la opción viable es que tanto el gobernador Carlos Mata Figueroa como la alcaldesa Yannelys Patiño, así como los organismos de seguridad, decidan hacer cambios para “blindar” este centro de salud primario que atiende a una población de poco más de 14 mil personas.
Uno de los médicos cirujanos de este Consultorio Popular Rural Tipo II, quien trabaja en la plaza del pueblo desde hace tres semanas, manifestó su molestia por esta medida que espera no dure más tiempo, porque no pueden brindar una atención de calidad a los pacientes.
En ese banco de concreto sólo pueden llegar a hacer la toma de los signos vitales y diagnosticar uno que otro dolor. Pero aun la atención más básica, como una sutura o limpiar una herida, está suspendida por falta de insumos y de un lugar apropiado. “La verdad no se parece nada a la salud del siglo XXI, esto parece de antaño. No me parece que estemos en 2016 haciendo esto”, lamentó el galeno.
La molestia por esta situación es general. Juana Coa, residente de la zona, consideró que el constante robo del cableado “es por negligencia e ineptitud de los cuerpos de seguridad”. Para Coa, es hora de que el gobernador ejecute un cambio para que el pueblo obtenga salud.
La Asociación de Comerciantes de Altagracia ha tendido una mano amiga y en varias ocasiones han comprado el cableado eléctrico para reactivar el servicio médico; sin embargo, Eduardo Wettel, presidente de esta asociación, indicó que la delincuencia no da tregua y han robado y dañado la propiedad en más de una ocasión. Para Wettel, es momento de que las autoridades intervengan.
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