10 alcaldes opositores gobiernan con el concejo municipal en contra
“El riesgo de que ocurra lo mismo de Guarate y Jiménez está latente”, dijo José Viloria, de Miranda (Trujillo)
De las 79 alcaldías que ganó la oposición en 2013, un total de 10 operan hoy con concejos municipales dominados por el PSUV. En otras 4 cámaras, la mayoría depende de un voto que no es fijo para ninguna tendencia. La posibilidad de que haya declaratorias de ausencia del alcalde por parte de la mayoría oficialista en la cámara municipal, como ocurrió con Lumay Barreto en Páez, Warner Jiménez en Maturín y Delson Guarate en Mario Briceño Iragorry, está latente.
Así lo afirma el mandatario del municipio Miranda de Trujillo, el dirigente de Voluntad Popular, José Viloria, quien el martes pasado afrontó un intento de toma de la sede de la alcaldía por seguidores del PSUV. Los revoltosos soldaron las puertas de la edificación e impidieron el ingreso de los trabajadores. Todo esto ante la mirada de la Policía de Trujillo que no actuó, de acuerdo con el relato de Viloria.
“El riesgo de que ocurra lo mismo de Guarate, Jiménez o Barreto está latente para mí y para los otros alcaldes que tienen a la cámara en contra, porque aquí el gobierno no respeta la ley, la voluntad del pueblo ni nada”, afirmó el alcalde.
La toma se mantuvo hasta el viernes 7 de octubre, cuando Viloria habilitó un tribunal que se trasladó al sitio. “En vez de morder el peine que me pusieron, me fui por los canales regulares a la Defensoría, la Fiscalía y puse la denuncia en el Cicpc. El viernes me vine con el tribunal, abrimos y revisamos todo. No les salió como en Maturín y Briceño porque la gente vio todo lo que pasó. El pueblo estuvo de nuestro lado”, indicó Viloria.
A su juicio, los recientes ataques contra las alcaldías en manos de la oposición tienen dos objetivos: “Por una parte, desbancar a los alcaldes que como yo gobernamos con cámaras municipales en contra y, por la otra, distraernos de la recolección del 20% de las firmas para el revocatorio. No lo van a lograr”.
El dirigente recalcó que a diferencia de sus pares de Maturín y Briceño Iragorry, él no tiene ningún juicio, acusación ni expediente abierto. “Me han amenazado todo el tiempo. Esta es una alcaldía que por primera vez está en manos de la oposición. Yo le pedí a la contralora municipal, que milita en el PSUV, que me audite. No me han podido acusar de nada porque la gestión está limpia”.
Viloria sostiene que la acción de la semana pasada fue en respuesta a las soluciones que gestiona su despacho para el problema del suministro de agua que padece el municipio: “Es un sabotaje orquestado de manera criminal, dado que ven que estamos resolviendo. Dañaron un motor y dos tableros y usaron eso como excusa”.
En total son 2 alcaldías en Carabobo, una en Lara, 3 en Mérida, una en Portuguesa y 3 en Trujillo que están en riesgo. De ese grupo, 2 son capitales de estado (Valencia e Iribarren) y otra es capital comercial (Valera).
Sin defensa. El diputado Juan Pablo Guanipa (MUD) lidera el proyecto de reforma de la Ley Orgánica de Poder Público Municipal. La modificación del artículo 87, que sirvió de base legal para las actuaciones contra Jiménez y Guarate, también será revisado.
“Una cosa muy grave en la ley es el irrespeto del derecho constitucional a la defensa. El artículo 87 solo habla de que si el alcalde es detenido queda destituido y puede ser sustituido por un funcionario, pero no fija los parámetros para que se defienda, aun cuando eso es un principio constitucional”, dijo Guanipa.
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