Largas colas a las afueras de Aduana de San Antonio del Táchira para sellar pasaporte e irse del país

Cientos de personas hacen cola desde la madrugada para sellar pasaporte en la Aduana Principal de San Antonio del Táchira. La mayor parte abandona Venezuela buscado otros destinos, huyendo de la crisis actual

Mariana Duque | Táchira | El Pitazo

Julio 25, 2017 7:00 pm

Las colas a las afueras de la Aduana Principal de San Antonio del Táchira son largas para sellar pasaporte | Cortesía: Rosalinda Hernández

San Cristóbal. Con maletas en mano llegan desde la madrugada a hacer cola a las afueras de la Aduana Principal de San Antonio del Táchira, a un extremo del “Puente Internacional Simón Bolívar” que comunica a la capital del municipio Bolívar, con la ciudad de Cúcuta, Departamento Norte de Santander – Colombia.

Quieren sellar el pasaporte para salir de Venezuela, país que enfrenta una crisis política, económica y social por la que se mantienen protestas desde finales del mes de marzo del año en curso. La Aduana no la abren sino hasta pasadas las 8 de la mañana, a veces se extiende hasta las 9.

Este martes 25 de julio, abrieron el paso hacia el puente pasadas las 9 de la mañana. Quienes iban a cruzar a Cúcuta en búsqueda de alimentos, medicinas o para trabajar, ingresaron caminando rápidamente, como cuando abren el corral al ganado. Mujeres con niños en brazos miraban hacia los lados, el pánico se notaba en sus rostros, mientras una anciana lloraba expresando en voz alta “que tristeza da ver a nuestro país así, tanta gente pasando trabajo”.

Mientras tanto, quienes esperaban viajar seguían esperando en Migración Venezuela, la cola es larga para sellar pasaporte. Las fallas del internet y la consecuente caída del sistema hacen que el proceso se retrase más, pero con sus maletas al hombro, cobijas y almohadas, los venezolanos de todas partes del país esperan para cumplir su cometido de iniciar una nueva vida en otras fronteras.

Una vez sellado el pasaporte, proceso por el que esperan hasta cinco horas, proceden a cruzar el puente con sus maletas. Algunos pierden las ruedas —de las maletas— en el camino, y tienen que llevarlas al hombro, a rastras, o pagarle a un carretillero 20 mil bolívares para que las ayude a cruzar. En la mitad del trayecto, están ubicadas las carpas de Migración Colombia, donde los funcionarios del vecino país revisan la tarjeta migratoria y los pasaportes a cada persona que busca pasar a su nación.

Rostros pálidos, ceños fruncidos y lágrimas corriendo se ven en el proceso. Dejar a Venezuela “duele en el alma” –según dicen algunos de los que se atreven a hablar-, pero la situación los lleva a hacerlo.

José Rueda es habitante de San Cristóbal, manifestó su tristeza por tener que dejar el país y  ver a tantos venezolanos en la Aduana Principal de San Antonio del Táchirasepararse de sus familias. “Hay un en éxodo para Colombia porque no soportamos ya la escasez de alimentos, de medicinas, que no hay con qué comer, para sustentar a los hijos. Nos negamos a que los nietos e hijos tengan que sufrir esta dictadura. Es terrible tener que abandonar el país donde uno se crió nada más con la ropa y lo poco que se puede llevar, sus recuerdos, sus añoranzas y proyectos, que se quedan encerrados en esa gran Venezuela que existía antes del gobierno de Chávez”.

Ana Durán viajó con su esposo desde la ciudad de Valencia, estado Carabobo, la tarde del lunes y llegó a la frontera tachirense a las 7 y 10 de la mañana. Su destino es Bogotá, la capital de la república de Colombia, donde le darán posada unos amigos que desde hace dos años decidieron salir de Venezuela.

Hizo cinco horas de cola para sellar el pasaporte, tiempo durante el cual lamentó tener que dejar su tierra natal. “La situación del país, la inseguridad me llevan a irme. Por ahora mi destino es Bogotá, por ahora, tenemos amigos que se han ido y tienen dos o tres años viviendo allá, nos hicieron la invitación.  Presumo que nos quedaremos unos meses, si consigo algo que hacer me quedo más, si no busco otro destino porque debo buscar cómo sobrevivir en alguna parte, por ahora nos vamos mi esposo y yo”.

En Valencia deja a su hijo de 30 años, quien espera que la situación mejore. Jamás imaginó salir del país, nunca se le cruzó la idea por la cabeza, pero ante las circunstancias está buscando maneras de progresar, porque a su juicio, en Venezuela en este momento no hay futuro.

Viaja a pocos días de realizarse las elecciones para los diputados a la Asamblea Nacional Constituyente –ANC- convocada por el gobierno de Nicolás Maduro Moros para este 30 de julio, pero asegura es una coincidencia, porque los pasajes fueron encontrados para esta fecha.

Lorelvis Sábala esperaba en la cola para sellar pasaporte junto a su esposo e hijos. Se veía pálida y triste, su rostro tenía señas de que había llorado. Al ser consultada sobre el motivo de viaje expresó: “me voy por la situación del país, no sabemos si permanentemente. Nos vamos mis hijos, esposo y yo. Es indignante tener que abandonar el país, es muy doloroso”.

Hay quienes comparan lo que está ocurriendo con los campos para refugiados para países en guerra. Arnaldo Uribe es de Colombia, cruzó a Venezuela para hacer algunas diligencias personales, ve con asombro la cantidad de personas que salen con pasaportes en mano y lo compara con el conflicto bélico en Siria y los campos de refugiados.

“En Colombia el presidente Santos ya ha hablado de levantar carpas para refugiar a venezolanos. Es triste ver lo que está viviendo un país que ha sido tan rico y próspero. Esperamos que esta situación cambie”.

Como ellos, miles de venezolanos siguen dejando su país de origen hacia horizontes desconocidos. Muchos no tienen amigos, familia, ni un lugar a donde llegar, pero se aventuran a recorrer tierras extrañas, a buscar posibilidades de empleo y crecimiento, huyendo del hambre, de la inseguridad y de la falta de medicinas. Esperan volver algún día, cuando Venezuela tenga oportunidades de progreso.

De acuerdo a cifras emitidas este martes por Migración Colombia, 26 mil venezolanos cruzaron el pasado lunes 24 de julio la frontera con Colombia por el “Puente Internacional Simón Bolívar”, sin embargo, el concejal por el municipio Bolívar, José Luis Guerrero, indicó que según Migración Venezuela entre 3000 y 3500 personas son las que abandonan el país, los demás cruzan en búsqueda de alimentos, medicinas, para trabajar o estudiar.