atentado mezquita
Foto Perú 21

Al menos 80 personas murieron y unas 100 resultaron heridas en un atentado contra una mezquita chií durante los concurridos rezos del viernes en la provincia de Kunduz, en el norte de Afganistán, aunque aún no hay una cifra oficial.

«Una fuerte explosión tuvo lugar en la mezquita Sayed-Abad, en la que 80 personas de la comunidad chií que acudieron a los rezos han muerto y unas 100 más han resultado heridas», dijo a Efe Ghulam Rabani Rabani, un antiguo miembro del consejo provincial de Kunduz.

Nazir Naeemi, un ciudadano que se encontraba en el lugar del atentado, afirmó a Efe que «parece que unas 100 personas han muerto y cerca de 200 han resultado heridas», aunque el número todavía es confuso a falta de un número oficial de las autoridades.

El exdirector del Departamento de Refugiados y Repatriación de la provincia Muhamad Akbar dijo a Efe que cuando tuvo lugar la explosión «cientos de personas se encontraban reunidas (en la mezquita) por los rezos del viernes. Tengo información de más de 100 personas muertas y heridas», señaló.

Vídeos de la mezquita tras el atentado muestran decenas de cuerpos cubiertos de sangre con miembros amputados y tendidos en el suelo, entre escombros y los gritos de angustia de las personas que se afanaban por prestar ayuda.

Falta de confirmación oficial

Los talibanes, que controlan el país desde la captura de Kabul el pasado 15 de agosto, han confirmado la explosión pero por el momento no han aportado datos oficiales de víctimas.

«Ha habido una fuerte explosión en la provincia de Kunduz que causó muchas bajas, no conocemos la cifra exacta de víctimas en este momento», dijo a Efe un miembro de la Comisión de Cultura de los fundamentalistas, Jawad Sargar.

El portavoz talibán Bilal Karimi añadió a Efe que miembros de la formación «han llegado a la zona y han comenzado una investigación».

El atentado tuvo lugar en una mezquita en la zona de Sayed-Abad en Kunduz, capital de la provincia homónima, dijo a Efe un funcionario del gobierno depuesto por los fundamentalistas, que pidió el anonimato.