Se desploma la política exterior con «perspectiva ecológica» de Boric
El presidente chileno ha protagonizado al menos cinco escándalos que han diluido su política exterior "turquesa". Ni en Greenpeace conocen las propuestas de conservación que su gobierno dice estar impulsando
La política exterior del presidente chileno, Gabriel Boric, es de color «turquesa». Así lo definió el mandatario desde su arribo al poder porque tendría un «‘foco verde’ en la protección de la biodiversidad y un ‘foco azul’ en la protección de los océanos» para impulsar la cooperación internacional y el multilateralismo con una «perspectiva ecológica». Sin embargo, sus continuos tropiezos diplomáticos desmontan su discurso.
- Lea también: Los cinco problemas que viajan con Boric a la ONU
- Lea también: Boric debutará en la ONU con escándalo de asesora vinculada al narcotráfico
Hasta ahora, ni Boric ni su Cancillería –pese a haber asistido a la Asamblea General de Naciones Unidas– dan cuenta de una articulación regional en torno a su política exterior «turquesa» como tampoco en torno a la defensa de los derechos humanos para ampliar los espacios democráticos y proteger al planeta –como promete–. En contraste, en su discurso defiende a Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Estefanía González, coordinadora de campañas de Greenpeace, admitió en El Mostrador que desconoce las propuestas de Gabriel Boric y el supuesto esfuerzo de conservación que impulsa.
Cuestionamiento al rey
El primer escándalo diplomático de Gabriel Boric ocurrió el día de la ceremonia de su toma de posesión en el Congreso de Valparaíso en marzo. El mandatario cuestionó al rey Felipe VI por supuestamente haber retrasado el cambio de mando.
«Me pareció bien inaceptable que se atrasara la ceremonia porque el rey de España se había atrasado. Pero bueno, son cosas que pasan. Uno tiene que respetar, por cierto, los protocolos establecidos», dijo Gabriel Boric. Pero desde la Casa Real española, en un comunicado, respondieron que habían seguido las indicaciones de los servicios de protocolo chilenos: «Ellos (protocolo) son quienes marcan el ritmo de llegada de las caravanas. De hecho, la caravana con la delegación española estuvo esperando en fila detrás de otras hasta que protocolo y seguridad dieron la instrucción de que ya se podía acceder».
Impasse diplomático con Israel
Boric enfrenta un impasse con Israel por rechazar las credenciales del embajador designado en Santiago, Gil Artzyeli, quien quedó plantado frente a La Moneda. No pudo entrar pese a estar en la agenda del palacio presidencial. Después de esperar una hora en las afueras de la sede de gobierno, le notificaron que no sería recibido. La Cancillería de Israel citó al embajador chileno en el país, Jorge Carvajal, para una «conversación de amonestación» por el «comportamiento sin precedentes de Chile».
Condiciones a las exportaciones
El presidente chileno también fue cuestionado después de declarar a la revista Time que el país debería condicionar las exportaciones para forzar la adopción de políticas ambientales por parte del mundo desarrollado.
Es casi una asfixia a la economía, considerando que los reportes del Servicio Nacional de Aduanas arrojan que Chile exportó más de 50000 millones de dólares en cobre en 2021, más de la mitad solo a China; 6000 millones de dólares a Estados Unidos y 3000 millones a la India, montos que equivalen al 65 % de las exportaciones de cobre.
Roce con Argentina
Durante la gestión de la exministra de Interior, Izkia Siches, la administración de Boric protagonizó antes de su gira oficial a Argentina un impasse por referirse al Wallmapu, un concepto que abarca no solo tierras chilenas sino también del país vecino, que han sido habitadas por el pueblo mapuche. La legitimación por parte de la alta funcionaria al reclamo territorial fue considerado por Argentina como un problema que afectaría a la soberanía. A Siches le tocó pedir disculpas al embajador argentino en Santiago, Rafael Bielsa.
Episodio bochornoso con Estados Unidos
Durante la Cumbre de las Américas celebrada en junio en Los Ángeles, Gabriel Boric cuestionó la ausencia de Estados Unidos en el lanzamiento de la Coalición Américas por la Protección del Océano (una iniciativa de su gobierno, que busca crear, declarar, implementar y gestionar de manera efectiva áreas de protección), pero a solo dos asientos a su derecha estaba John Kerry, exsecretario de Estado de Estados Unidos y actual representante del clima de la Casa Blanca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario