Perú desmonta el mito de la derecha «misógina» y «machista»
Además de las alcaldesas electas, Renovación Popular fue el partido que más mujeres tuvo como candidatas. En total fueron 16 solo en Lima. Entre las 11 que no lograron el triunfo electoral una parte obtuvo la segunda posición.
En Lima se desmontó el mito de que la derecha es misógina y machista, tras las elecciones regionales de este domingo en Perú. El ejemplo más preponderante se evidencia en el triunfo para cinco alcaldesas en esta jurisdicción, quienes, a su vez, pertenecen a Renovación Popular, el partido del virtual burgomaestre de Lima, Rafael López Aliaga.
- Lea también: Perú Libre desaparece del mapa en las regionales con Castillo en el poder
- Lea también: Pedro Castillo acumula 16 acusaciones en el Congreso peruano
Las ganadoras de esta contienda electoral fueron Mónica Tello, del distrito de Pueblo Libre; Nancy Vizurraga, en San Isidro; Cintia Álvarez Loayza, en Surquillo; Malca Schnaiderman, en Lince; mientras que Jéssica Vargas quedó como virtualmente como ganadora en el municipio Barranco. Sin embargo, la izquierda, que ostenta ser feminista, no logró representatividad femenina más que en Chiclayo.
Es la primera vez que dichos distritos serán presididos por mujeres. El mayor triunfo puede ser Surquillo, en cuanto la virtual alcaldesa desplazó a José Luis Huamaní, candidato que tiene denuncias de vínculos con el narcotráfico. En boca de urna, este referente del partido Alianza para el Progreso ganaba con holgura, pero el resultado se revirtió una vez que las actas se procesaron.
Además de las alcaldesas electas, Renovación Popular fue el partido que más mujeres tuvo como candidatas. En total fueron 16 solo en Lima. Entre las 11 que no lograron el triunfo electoral una parte obtuvo la segunda posición.
Curiosamente, el recuento de candidatas femeninas lo hizo un portal de izquierda «progresista». En su intento de señalar la falta de representatividad de mujeres, destacó cómo en Perú se desmonta el mito de la derecha misógina. Los datos condicen con los registros oficiales de la ONPE.
Mujer con poder y feminista no son sinónimos
Asimismo, las referentes de Renovación Popular ganaron en distritos que la izquierda «progresista» había erguido como sus bastiones. Esa realidad cambió. Ahora estarán en el poder mujeres que defienden la vida, la familia, la patria y la propiedad privada.
Pese a su logro, no han recibido la felicitación del ministerio de la Mujer, ni de organizaciones feministas. Al contrario, han sido repudiadas. Y el feminismo peruano está casi de luto al saber que tendrán un alcalde provida y junto a él cinco alcaldesas distritales que defienden a las mujeres (y hombres) desde la concepción, sin discriminación de edad, desarrollo y ubicación (el vientre materno).
Sin cuotas, ni agenda de género
De hecho, Mónica Tello, virtual alcaldesa de Pueblo Libre, tiene en agenda la inclusión no ideologizada. Priorizar a ancianos y personas con problemas de movilidad, por medio de rampas, también por medio de la promoción de hábitos saludables, lo opuesto a la propaganda a favor de la obesidad que impera en la narrativa progresista.
Entre las propuestas de las referentes de Renovación Popular no hay agenda de «género». No promueven un enfrentamiento entre hombres y mujeres, una lucha de clases trasladado a los sexos. Al contrario, instan a la descentralización de la seguridad y mejorarla para todos los ciudadanos, no desde un sesgo ideológico de división o jerarquías.
De manera que promueven la igualdad ante la ley. Lo que en teoría pregona el feminismo pero que en la práctica no. Pues su discurso es de «empoderamiento», como si la mujer dependiese de otros para obtener poder. Como parte de una lógica de «redistribución», como si de un monopolio se tratase, exige cuotas.
Las dirigentes electas en Lima demostraron que la mujer puede llegar al poder por mérito, no por cuota, pues es poderosa, no empoderada. Es por ello que dejaron en claro que en Perú se desmontó el mito que la derecha es misógina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario