A pesar de que un doctor emitió el certificado de defunción, su esposa, sus padres y hermanos mantuvieron en su vivienda el cuerpo, al que rociaban con productos de limpieza y le aplicaban una especie de pasta para que no se pudriera. Además, le cambiaban la ropa todos los días, mantenían prendido el aire acondicionado y lo llenaban con agua bendita para intentar despertarlo.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario