Otra estupidez socialista de Podemos: pretenden intervenir el mercado de alimentos
Mientras la izquierda española lucha por conseguir una renta universal para “terminar la pobreza”, ahora parece que también quieren vaciar las góndolas de los supermercados.
Hay una vieja ley en economía que dice que una intervención, que pretende solucionar algún desajuste determinado, en lugar de arreglar el problema genera uno nuevo. Aunque esto se ha corroborado en todo momento y lugar en la historia, los burócratas no tienen otra idea que generar una intervención nueva. Claro que, en lugar de solucionar los inconvenientes, no hacen otra cosa que agravarlos y multiplicarlos. La desastrosa coalición de gobierno en España parece ir a toda velocidad hacia la destrucción total de la economía. Ahora, los socios del PSOE, pretenden regular el mercado de alimentos por los incrementos de los precios. Las telarañas mentales de los miembros de Podemos les impide ver el único resultado que ha arrojado esta peligrosa intervención.
Pablo Echenique, siguiendo la errónea teoría de que los costos determinan los precios, pero más en clave marxista que neoclásica, aseguró en televisión que algunos precios han subido “objetivamente” desde la guerra en Ucrania. Es por eso que propone la intervención del mercado alimenticio para que los trabajadores españoles puedan obtener una canasta básica a precio accesible. En sus comentarios en las redes sociales indicó que proponen retrotraer los precios al 20 de febrero del año pasado, cuando comenzó el conflicto bélico que generó, entre otras cosas, varios aumentos de precios.
La iniciativa dirigista llega en el medio de otro peligroso proyecto podemita: el ingreso universal que propone, como por arte de magia, terminar con la pobreza en España. Según este proyecto, las familias deberán recibir del Estado 1400 euros mensuales, con un extra de 100 por hijo. Tanto la “renta garantizada” como la intervención de los precios en el mercado tienen sus recientes fracasos análogos en Argentina.
Esta mañana, afortunadamente, ya se presentaron varias denuncias por abuso de autoridad, luego que la secretaría de Comercio enviara a los choferes del sindicato de Camioneros a controlar el programa de “Precios justos”. Como indica la historia económica mundial y el sentido común, ignorar el problema inflacionario regulando los “precios” no hizo otra cosa que generar faltantes. Pero como hacen siempre los burócratas estatistas, en lugar de aprender el error y liberar los precios (para atacar las verdaderas causas del problema), el ministerio de Economía se decidió por enviar “vigilantes” a reportar las góndolas vacías.
Todas las iniciativas de Podemos parecen calcadas del kirchnerismo argentino. Al menos, los españoles pueden ver aquí el final de la película y decidir si desean llevar a su país al desastre total, como ocurrió en un país que en su momento fue rico y hasta les donaba a ellos alimentos para paliar las tragedias de otros tiempos.
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