¿Es El Salvador la nueva tierra de la libertad?
En El Salvador no hay crisis por fentanilo, ni tiroteos, ni conversiones monetarias porque se aceptan dólares y bitcoin como monedas de circulación oficial, así como tampoco hay saqueos y la tasa de criminalidad es la más baja de América, asegura Nayib Bukele en una publicación en la que invita a los estadounidenses a mudarse a su país
Mamela Fiallo Flor PANAM POST El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, publicó una imagen en su cuenta de Twitter invitando a los estadounidenses a «mudarse a El Salvador» con el slogan «la nueva tierra de la libertad», pues alega en su publicación en inglés que en su país no hay crisis por fentanilo, ni tiroteos, ni conversiones monetarias porque se aceptan dólares y bitcoin como monedas de circulación oficial, así como tampoco hay saqueos y la tasa de criminalidad es la más baja de América.
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Bukele también destaca el clima, las hermosas playas y el buen café que se produce en El Salvador para vender a su nación como la nueva tierra de la libertad, buscando hacer un contraste con Estados Unidos, donde –por ejemplo– el tráfico de fentanilo ha creado una crisis que se ha cobrado miles de vidas y los tiroteos están a la orden del día. Y es que con el más reciente ocurrido este lunes en Nashville, Tennessee, ya suman al menos 30 incidentes con armas de fuego en lo que va de año en escuelas de EE. UU., que han dejado 8 muertos y 23 heridos, de acuerdo con datos de la organización Everytown for Gun Safety.
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¿El menos malo?
Sin embargo, el estilo autoritario de gobernar de Bukele, puesto de manifiesto con la destitución de jueces y la aprobación de una reelección por parte de estos que no estaba explícitamente contemplada en la Constitución, así como las denuncias de violaciones a los derechos humanos, marcan un contraste con todo lo que ofrece.
La pugna en las redes sociales con su homólogo colombiano, Gustavo Petro, le ha permitido a Bukele legitimar su política de seguridad, pues en esta complicada comparación el mandatario del país sudamericano sale perdiendo al no tener resultados que mostrar, mientras en la nación centroamericana –a pesar de las válidas críticas por parte de organizaciones internacionales– la lucha contra las pandillas ha bajado a cero durante más de 300 días consecutivos la tasa de homicidios.
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