No hay acomodo posible
La situación del país ha empeorado de manera tal que resulta imposible pensar que puede haber un acomodo con un régimen incapaz de mejorar las condiciones de vida de la inmensa mayoría de los venezolanos.
Que el salario mínimo de los venezolanos sea de 6 dólares mensuales y que eso afecte, no sólo a los empleados públicos, sino a pensionados y jubilados, es consecuencia de las acciones tomadas por un régimen incapaz e irresponsable que no piensa en el bienestar del pueblo, sino sólo en mantenerse en el poder al costo que sea.
Pretendieron vender la idea de que era posible una recuperación económica y articularon fachadas tipo aldeas Potemkin para engañar, pero la dura realidad mostró que estas eran sólo burbujas de jabón que se desinflaron a finales del año pasado, hasta el punto de que, incluso, en los automercados se nota ya un descenso en la compra de alimentos.
Los bodegones, los nuevos y lujosos restaurantes, los casinos, no son expresiones de una recuperación económica, sino simplemente de espacios disponibles fundamentalmente para la nueva clase, que teme desplazarse por el mundo para consumir con un dinero, en la mayoría de los casos, mal habido.
Si los venezolanos que la están pasando mal no entienden que es indispensable ir a votar en las primarias y apoyar a los candidatos que de verdad quieren un cambio, el futuro será mucho más negro que lo que hoy tenemos, aunque sea difícil de imaginar.
La única alternativa de cambio está en votar y forzar la unidad de propósito en sacar a Maduro de la conducción errática e irresponsable del poder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario