Empeora salud de exministro de Bolsonaro mientras el de Lula sigue libre
Anderson Torres “presentó episodios severos de ansiedad, pánico, desesperación, angustia, dificultad para respirar, tristeza profunda, acompañados de llanto”, informó el psiquiatra que hace seguimiento
La salud de Anderson Torres, exministro de Justicia durante la gestión de Jair Bolsonaro, continúa empeorando en la cárcel. Hace pocos días sus abogados interpusieron ante el Supremo Tribunal Federal (STF) una solicitud de medida cautelar, debido a “riesgo de suicidio”. Ahora, este 28 de abril el magistrado Alexandre de Moraes pidió al centro penitenciario un reporte, con el fin de determinar si es necesario trasladarlo a un hospital.
La situación del exministro resulta desigual si se compara con el caso de Marco Edson Gonçalves Dias, quien hasta el 19 de abril era jefe del Gabinete de Seguridad Institucional (GSI) del presidente Luiz Inácio Lula da Silva. El antiguo funcionario quedó grabado por las cámaras del Palacio de Planalto, justo cuando abría puertas a manifestantes que destrozaban instalaciones el pasado 8 de enero.
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El general posteriormente dijo que “estaba haciendo gestión de crisis”, porque las personas serían detenidas por agentes de seguridad en el segundo piso. Sin embargo, el argumento resultó poco convincente para la opinión pública. Hasta la fecha continúa libre sin mayores decisiones de la justicia.
En cambio, Torres “presentó episodios severos de ansiedad, pánico, desesperación, angustia, dificultad para respirar, tristeza profunda, acompañados de llanto”, en las últimas semanas según el psiquiatra que hace el seguimiento.
Parte médico: riesgo de suicidio
Lo que ha trascendido hasta ahora es que otro magistrado del STF, Luiz Roberto Barroso, se negó a juzgar el habeas corpus interpuesto a favor del exministro de Justicia. Brasil Sem Medo reporta que según ese funcionario, dicho recurso “no es el instrumento procesal adecuado para cuestionar la decisión de un ministro, en referencia a la orden de captura emitida por el ministro Alexandre de Moraes”.
De Moraes también se resiste a tomar algún tipo de medida que permita salir en libertad al exministro de Bolsonaro. De acuerdo a Gazeta Brasil, pidió a Wenderson Souza e Teles, secretario de Administración Penitenciaria del Distrito Federal, informar “si el lugar donde está recluido está en condiciones de garantizar su salud” o si es necesario llevarlo a un hospital penitenciario. Tiene un lapso de 48 horas para responder a partir de este viernes 28 de abril.
Más de tres meses tiene tras las rejas el exministro de Bolsonaro, mientras que este último también sigue bajo investigaciones por los ataques contra sedes de poderes públicos el 8 de enero. A pesar de las imágenes filtradas por CNN, el sistema judicial de Brasil sigue apuntando al conservadurismo en lugar de mirar dentro de las filas del gobierno izquierdista.
El informe que entregaron los abogados, elaborado el 22 de abril, indica que “el riesgo de intento de autoexterminio ha ido en aumento”. Por eso la recomendación para Torres es “la hospitalización domiciliaria”.
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