LA CASA DONDE NACIÓ EL SABIO FRANCISCO ANTONIO
RISQUEZ
DEBE SER RECUPERADA
La
casa donde naciera el 10 de octubre de 1856 el padre de la Farmacopea
Venezolana, el sabio Francisco Antonio
Rísquez, debería ser rescatada para convertirse en museo.
Cuando
en Margarita el turismo ha sido elevado a la categoría de primera fuente de captación
de los recursos que requiere la región para su desarrollo, el llamado turismo
cultural, que tanto gusta a los visitantes de los países industrializados,
debería ser impulsado para que por un lado se rescaten las numerosas reliquias
históricas margariteñas, destinadas inexorablemente a desaparecer en breve tiempo,
y por otra parte, generar medios económicos que podrían emplearse en su
conservación.
Hace
algunos años, con motivo de la celebración del Día del Farmacéutico, planteamos
la posibilidad de que se recatara el inmueble donde nació este ilustre margariteño,
gloria de las ciencias médicas venezolanas y la idea fue acogida con
beneplácito por los farmaceutas del Estado. Pero nada en concreto se
materializó.
Todavía
hay tiempo. La sugerencia es para el Concejo Municipal del Distrito Marcano.
Cuatro
placas colocadas en las paredes del inmueble que dan a la calle El Sol, de
Juangriego, constituyen un testimonio visual de que este gran hombre nació en
esa sencilla vivienda, construida a la usanza de la época. La primera placa,
colocada por el Hogar Americano, dice: “En esta casa nació el 10 de octubre de
1856, el sabio y filántropo médico venezolano
Dr. Francisco Antonio Rísquez”. La segunda expresa: “Homenaje de la Universidad de Los Andes en el Centenario del nacimiento
del Dr. Francisco Antonio Rísquez”. La
tercera señala: ”La Federación Médica Venezolana rinde homenaje al esclarecido médico neo-espartano Doctor
Francisco Antonio Rísquez con motivo de
cumplirse el Centenario de su Nacimiento”. La cuarta dice: “El Colegio de
Médicos del Estado Nueva Esparta al insigne sabio margariteño Dr. Francisco
Antonio Rísquez en el Centenario de su Nacimiento”.
Ni
una placa del Ayuntamiento, ni del Colegio de Farmacéuticos, ni del Liceo que
lleva su nombre en La Asunción.
(El
Faro de Margarita, Porlamar, 5 de
junio de 1985)
NOTA:
El inmueble fue recuperado por el extinto Fondo de Desarrollo del Estado Nueva Esparta
y allí funciona un pequeño museo en su honor. Allí se realizan actividades
culturales.
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