Camila Vallejo y la indignante defensa de la corrupción en el gobierno de Boric
Camila Vallejo, vocera del gobierno del presidente Gabriel Boric, alega que la corrupción es consecuencia de una “debilidad institucional”
La corrupción es indefendible. En ninguna circunstancia es aceptable ni justificable. Sin embargo, Camila Vallejo, vocera del gobierno del presidente Gabriel Boric, alega que la práctica en el Ejecutivo es consecuencia de una “debilidad institucional” dejando a un lado que quienes recaen en ella lo hacen irrespetando la ley con un exceso de confianza para obtener beneficio personal.
La alta funcionaria que milita en el Partido Comunista, en conjunto con otros referentes no menos polémicos, cómo por ejemplo el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, apela al indignante alegato para rebatir el resultado de las 15 auditorías hechas por la Contraloría General a 15 secretarias regionales del ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) que confirman irregularidades administrativas en las transferencias directa de dinero a fundaciones aliadas del mandatario nacional en el marco del programa de asentamientos precarios.
De acuerdo con el informe del ente, desde enero de 2021 y junio de 2023 predominó una “alta discrecionalidad en la asignación de recursos, descontrol en los accesos a información interna y contratación de parientes y militantes en las organizaciones receptoras de los fondos públicos”.
Ese patrón de corrupción en el gobierno de Boric, a través del cual se sospecha el desvío de al menos 30 millones de dólares con 47 organizaciones se repite de norte a sur pero Vallejo niega un “modus operandi” insistiendo en “las brechas” del aparato estatal permiten a “quienes tengan intenciones de otro tipo defraudar al fisco”.
Un discurso sin moral
Las respuestas de la vocera de gobierno chileno contradicen la promesa de transparencia hecha por la administración por tener “una mejor escala de valores”. Aquello fue sólo un discurso y ahora, las endebles reacciones parecen refugiarse en uno de los problemas más graves que afectan la salud mental: la anomia, que implica asumir que da lo mismo actuar de manera honesta o no al degradar o irrespetar las normas y las leyes considerando que -hasta la fecha- el ministro de Vivienda, Carlos Montes sigue al frente de la cartera, así como también el jefe de asesores de La Moneda, Miguel Crispi; la directora de Presupuestos, Javiera Martínez, y todos los seremis del Minvu en el país.
“Son sinvergüenzas y caradura Llegaron al poder. Sabían que podían repartir plata. Contrataron amigos en puestos claves. Bajaron estándares de transferencias. Crearon Fundaciones. Adjudicaron a dedo y robaron miles de millones de pesos”, así resume el concejal de Providencia, Matías Bellolio lo ocurrido en su cuenta de X.
Estirando el tiempo
La bancada parlamentaria de la Unión Demócrata Independiente (UDI) denuncia que Boric sigue sin establecer responsabilidades que corresponden al no remover ni destituir a quienes por acción u omisión como también las que por acción u omisión “permitieron que se llegara a este nivel de corrupción en prácticamente todo el país”.
“Esperamos que en las próximas horas el presidente Boric demuestre su verdadero interés por investigar caiga quien caiga y le exija la salida a todos sus colaboradores que tengan algún grado de responsabilidad en este caso” manifestaron en un comunicado.
¿Es posible un remezón en el gabinete? Con un tercer cambio hecho sólo hace tres meses parece inviable. Además, al contralor general, Jorge Bermúdez, saldrá de su cargo en un mes. El próximo 15 de diciembre dejará el rol ejercido ocho años y en el gobierno, según El Mercurio “llevan meses discutiendo los pros y contras de nominar a su eventual sucesor”. Nelly Salvo, la secretaria general del ente fiscalizador, cercana al propio contralor suena como candidata “de continuidad”. También destaca el fiscal, Xavier Armendáriz, de la región Centro Norte, como candidato. Quien sea, le tocará asumir las investigaciones, imputar y formalizar a los culpables.
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