Black Mirror dejó de ser ficción: China entrena perros robots en ejercicios militares
Científicos chinos instalaron en un perro robot una ametralladora con capacidad de lanzar 750 disparos por minuto. Si apuntara al pecho de una persona, "la mayoría de las balas impactarían en la región del corazón"
La temporada 4 de la serie Black Mirror presentó el episodio llamado «Metalhead», donde la protagonista trata de huir de unos perros “robots” luego de que la humanidad colapsara. En blanco y negro transcurre la historia posapocalíptica que no termina con un final feliz para ella.
Era ficción, hasta que dejó de serlo. Estos robots ya existen en la vida real y, a medida que pasa el tiempo, sus desarrolladores les dan más habilidades. Algunos están siendo armados para desempeñarse en ejercicios militares en China. Como menciona SCMP, hay quienes lo tildan de mera propaganda con el fin de enviar un mensaje a países enemigos, otros no dudan de lo que podría pasar con futuras guerras si realmente se sumaran estos “perros” a su arsenal.
- Lea también: ¿Qué son las armas antisatélite que EEUU ve como una amenaza de Rusia?
- Lea también: China envía un microorganismo al espacio para buscar vida en Marte
Un perro robot “asustó” a un niño en la 25ª Feria de Alta Tecnología de China a finales del año pasado. Casi en paralelo, en Estados Unidos las creaciones de Boston Dynamics dieron ruedas de prensa y patrullaron las calles de Nueva York. El gobierno de esa ciudad compró dos por 750.000 dólares. Sin embargo, esos modelos occidentales aún no tienen habilidades militares como sí está pasando en China.
Así disparan los perros robots
Científicos chinos instalaron en un perro robot una ametralladora con capacidad de lanzar 750 disparos por minuto. Luego, este disparó ráfagas de 10 balas a un objetivo de tamaño humano que se encontraba a 100 metros. Tras medir la distancia máxima entre el centro del objetivo y los cinco agujeros de bala más cercanos, comprobaron que si el robot apuntara al pecho de una persona, “la mayoría de las balas impactarían en la región del corazón”.
Por otro lado, los robots convertidos en armas podrían sortear terrenos difíciles con acciones complejas “como maniobrar, escalar y saltar”. Considerando que estos perros pueden subir escaleras, realizar acrobacias y hasta “atravesar vertederos de basura o selvas tropicales y mantener una carrera continua durante casi cuatro horas mientras transportan una carga de 20 kg”, entonces se estaría hablando de que en el corto plazo podría cambiar la forma en cómo se libran las guerras.
Ya es evidente que el régimen chino colabora con aliados antioccidentales como Rusia e Irán para crear un nuevo “mundo multipolar”, como lo admitió el propio Vladímir Putin. Por ende, no es para menos que un arma letal en forma de robot genere preocupaciones. Hasta hace un mes un reporte de la Fuerza Espacial de Estados Unidos reveló que tanto Xi Jinping como su homólogo ruso están creando armas antiespaciales para “negar, perturbar o destruir satélites y servicios espaciales”.
Los científicos chinos que hacen las pruebas de los perros robots vieron avances, pero dicen que aún falta ajustar fallas, como aumentar la capacidad de munición más allá de 100 disparos. Pero acá lo que se pone en tela de juicio es el tema ético. ¿Qué poder de decisión tendrán estos perros robots en el campo de batalla? ¿Cómo determinan quien vive y quien muere? ¿Están trabajando en eso estos expertos? Las repuestas quizás se vean en el mediano plazo, esperando que disten mucho del desenlace del episodio de Black Mirror.
No hay comentarios:
Publicar un comentario