El santuario mariano más famoso y antiguo de todo el sur de Alemania es el de Altoetting: Nuestra Señora de Altoetting es un santuario bávaro, cerca de la frontera con Austria. Se remonta a la época carolingia, a la época del santo obispo san Ruperto, pero la estatua actual, ennegrecida por el tiempo y el humo de las velas, data del siglo XIV.
Varios grandes personajes quisieron que sus corazones fueran colocados en una urna o enterrados bajo los adoquines de la capilla: los corazones de los duques y reyes reinantes de la familia Wittelsbach (familia de la famosa emperatriz "Sissi"), así como los restos del piadoso comandante Tilly.
Los católicos alemanes recuerdan estas grandes fechas:
- En 1650, la población hizo una peregrinación a pie de 500 km para agradecer a María por haberles preservado la fe católica después de las Guerras de Religión.
- En 1934 fue canonizado el hermano capuchino Conrad de Parzham, fallecido en 1894, quien durante toda su vida había sido portero del convento de los capuchinos de Altoetting y tenía una brillante piedad mariana. ¡Ese año más de medio millón de peregrinos llegaron a Altoetting!
- Se dice que durante la Segunda Guerra Mundial, al ver llegar el ejército americano, las tropas nazis de las SS se refugiaron en el convento de Altoetting después de haber fusilado al decano. Los estadounidenses advirtieron que bombardearían el lugar si no se encendían las luces eléctricas. Los nazis se negaron, pero un valiente peregrino logró encender la luz, pagando con su vida este valiente acto y salvando el santuario de la destrucción.
- Durante el terrible período del nazismo, el santuario y sus peregrinos fueron perseguidos; sin embargo, la multitud hacia Nuestra Señora de Altoetting antes bien se duplicó.
- El 18 de noviembre de 1980 el papa Juan Pablo II visitó el santuario.
- El 11 de septiembre de 2006, el papa Benedicto XVI acudió a celebrar allí la Eucaristía y el oficio vespertino.
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