¿Qué le espera a Colombia con la llegada de Trump a la presidencia?
La victoria contundente de Donald Trump presenta desafíos significativos para Colombia en diversos ámbitos. Es esencial que el país adopte una postura proactiva para adaptarse a las nuevas dinámicas y asegurar que las relaciones bilaterales continúen siendo un pilar fundamental para su desarrollo económico y social.
Bernardo Henao Jaramillo PANAM POST
Cuando todas las encuestas daban por triunfadora a Kamala Harris, Donald Trump la derrotó estruendosamente en los comicios del pasado 5 de noviembre en Estados Unidos. El neoyorkino se hizo con 301 delegados de los colegios electorales, mientras que la vicepresidente solo consiguió 226. El republicano también obtuvo 74.263.828 votos, que son el 50.5 % del total de la votación. Es sin duda una victoria aplastante.
Gustavo Petro no tuvo más remedio que extender un nimio saludo de felicitación al vencedor. Por supuesto, es poco probable que en lo que le resta de mandato se lleve a cabo un encuentro con el presidente electo de los Estados Unidos.
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La victoria contundente de Donald Trump presenta desafíos significativos para Colombia en diversos ámbitos. Es esencial que el país adopte una postura proactiva para adaptarse a las nuevas dinámicas y asegurar que las relaciones bilaterales continúen siendo un pilar fundamental para su desarrollo económico y social.
El indiscutible triunfo en las elecciones presidenciales de Estados Unidos plantea de inmediato varios escenarios para Colombia en términos de relaciones bilaterales, economía, seguridad y migración.
Frente a las relaciones bilaterales, se recuerda que durante su primer mandato, Trump adoptó frente a Colombia una postura estricta en temas de seguridad y narcotráfico. No se ven elementos nuevos como para creer que esa tendencia cambie. Por lo general, la prioridad de los Estados Unidos es incluir el tema del narcotráfico en la agenda de ambas naciones.
La forma como Petro viene tratando el tema y acercando a toda clase de personajes, al margen de la ley, a su gestión, muy probablemente generará tensiones con Washington.
El crecimiento de los cultivos de coca, vamos en más de 250.000 hectáreas cultivadas, merecía una descertificación del gobierno de los Estados Unidos. Biden no lo hizo pero Trump sí lo hará, a menos que se entreguen resultados contundentes de erradicación, que ojalá tengan un resultado similar al del segundo gobierno de Álvaro Uribe, cuando se llegó a solo 40.000 hectáreas sembradas. La descertificación suspendería los programas de cooperación afectando nuestra economía y sería un golpe a la reputación de nuestro país.
En temas económicos, en campaña se conoció que Donald Trump impondría aranceles universales de entre 10% y 20%, lo que podría afectar el comercio global.
Aunque es poco probable que se modifique sustancialmente el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países, el enfoque proteccionista de Trump podría generar fricciones en las relaciones comerciales. Las empresas colombianas, especialmente las que exportan a Estados Unidos, deberían prepararse para un entorno más volátil y competitivo.
Trump ha prometido endurecer la política migratoria y no cabe duda de que lo hará. Habrá redadas masivas de migrantes indocumentados y posiblemente deportación de unos dos millones de ellos. Muchos colombianos se verán afectados y el efecto inmediato de esto será la disminución de las remesas que envían al país.
Como defensor del petróleo, Trump priorizará los combustibles fósiles y es probable que disminuya el énfasis en las energías renovables.
Esa postura confronta directamente con el ataque permanente de la administración Petro a los combustibles fósiles, por lo que es bastante probable que se podría ver afectada la cooperación en proyectos ambientales y energéticos entre ambos países, y Colombia podría enfrentar presiones para alinearse con políticas menos enfocadas en la sostenibilidad, pero la terquedad del mandatario colombiano los distanciará.
La llegada de Trump a la Casa Blanca tendrá una consecuencia inmediata en la vecina Venezuela. Es más que probable que se suba la recompensa por Nicolás Maduro. Se conoció que los senadores republicanos de Florida, Rick Scott y Marco Rubio, aumentarán la recompensa por información que conduzca al arresto del gobernante. Un proyecto de ley en el Senado de Estados Unidos que será presentado por ellos aumentará la recompensa por información que conduzca a su detención, de los actuales 15 millones de dólares a 100 millones de dólares. Maduro, como se recuerda, fue acusado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos en 2020 por cargos de tráfico de drogas.
El Departamento de Estado ha ofrecido una recompensa de hasta 15 millones de dólares por información que conduzca al arresto o condena de Maduro.
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